“Cuando me fui de Estados Unidos muchos de mis amigos no entendieron ni a dónde iba ni por qué elegí un país tan diferente; no sabían en qué lugar del mundo se ubicaba y hasta desconocían que se tratara de una nación. Hoy saben que el país que elegí es mi lugar en el mundo. Me preocupo en transmitirles los valores de esta tierra tan lejana para muchos y tan cercana para mí”, sostiene David respecto de los afectos que dejó en su país natal.
Cuando arribó a la Argentina, David decidió residir en Mendoza, el lugar que lo había enamorado en 1998 en aquel primer viaje que hizo al país por un intercambio de jóvenes profesionales del Rotary Club International. No imaginó el cambio fundamental que le esperaba para su vida: no solo conoció una provincia que lo recibió con los brazos abiertos sino que el destino lo cruzó con Carla, la mamá de su hijo, y a su familia, que lo llenaron de afecto y contención. “Me trataron como a un hijo más. Es una linda costumbre el encuentro familiar cada domingo, juntarse a festejar cumpleaños y aniversarios; siempre hay un motivo para celebrar”. Al cabo de un tiempo de llegar nació su hijo Benji. “Fue un gran cambio y el inicio de una etapa fundamental en mi vida. Si bien hoy estoy separado de su madre, mantenemos un vínculo estrecho y seguimos siendo familia porque los valores en este país son prioritarios a la hora de los vínculos”.
David pudo desarrollarse y crecer en sus emprendimientos. Organiza pasantías en bodegas para estudiantes universitarios de Estados Unidos y asesora a extranjeros que invierten en Mendoza. “Me di cuenta que también era una oportunidad para poner en valor las riquezas de Mendoza y de la Argentina”, sostiene. Sin embargo, su trabajo no le impide disfrutar de tiempo con amigos y familia, porque la sociedad argentina le da mucha importancia y valor al tiempo compartido. “Además esta provincia posee un clima increíble. Se hacen muchas actividades al aire libre y la naturaleza está muy cerca. Me gusta ir los fines de semana con mi hijo Benji a almorzar a Valle de Uco, somos habitués de una hermosa parrilla en Tupungato y nunca dejamos de comer las típicas tortitas ´raspaditas´ mendocinas. Andar a caballo por la Cordillera de los Andes también es algo que amo hacer; me da una sensación de libertad indescriptible. Mirando esos paisajes pienso en la proeza del gran General San Martín, tan querido por estas tierras”.
“No solo me gusta el estilo de vida que llevo sino que vivir en una provincia como Mendoza me permitió tener en el mismo barrio, en pocas cuadras a la redonda, la panadería, la carnicería, la farmacia, el mini mercado; todo lo que uno puede necesitar está a mi alcance. Mi hijo y yo conocemos a los vecinos. Es lindo tener amigos en el barrio y poder verlos a diario, cruzarnos en la plaza o en los negocios de la zona”, cuenta.
La música y la cultura también son fundamentales para su calidad de vida. “Acá en Mendoza soy amigo de Paula Tejada Gomez, hija del gran poeta Armando Tejada Gomez, reconocido no solo en la región sino en toda Latinoamérica, creador de Canción con Todos y referente de grandes músicos. Además, tuve el honor de poder conocer a su compañero y amigo, el gran músico y compositor mendocino Daniel Talquenca, que me abrió las puertas de su casa para contarme el gran aporte que hizo este poeta a la música y al arte. Estas son cosas que me acercan a la cultura de este país, gracias a la generosidad que tienen los argentinos por compartir sus costumbres, tradiciones e historia”.
“Este país también me enseñó el lado positivo de la informalidad y la productividad ociosa, algo impensado en Estados Unidos donde todo el tiempo uno está trabajando. Esto es fantástico: cuando uno no está haciendo nada también está siendo productivo porque ahí es cuando surgen grandes ideas. He aprendido que el ´no hacer nada´ en realidad es una forma de ´hacer mucho´ “. A lo largo de sus 20 años, aprendió a vivir una vida distinta a la que tenía. “Esto demuestra que uno está siempre a tiempo de cambiar y de encontrar la forma de ser feliz aunque no sea en el lugar donde naciste. A veces las circunstancias te alejan de tu hogar de nacimiento, pero la vida es un viaje y hay que aprender y estar preparado para descubrir nuevos horizontes”.
A partir de julio, David recorrerá la Argentina junto a Infobae para descubrir el maravilloso país que eligió para vivir y las razones por las que lo sigue eligiendo.
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