Luego de quedarse sin empleo y ante la necesidad de generar un ingreso económico que le permita mantener a su familia, a Pablo Romero se le ocurrió apostar a la venta ambulante de empanadas.
Fue con esa idea que ayer, aprovechando el feriado por el Día del Trabajador, se dirigió hasta el Parque Centenario, en el barrio porteño de Caballito, e instaló el carro que le habían prestado para llevar a cabo su nuevo trabajo. Sin embargo, su “changa” se vio interrumpida cuando personal de la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y agemtes de Policía de la Ciudad llegaron hasta el lugar para desalojarlo e incautar toda la mercadería.
“¡No me pueden sacar! Es la primera vez que vendo. Me quedé sin laburo hace 15 días y tengo dos pibes, loco. Ya me sacaste todo, ya me arruinaste”, suplicó Pablo a una inspectora de la AGC, que ya estaba con la planilla en mano, dispuesta a labrar el acta correspondiente y llevarse todas sus pertenencias.
La incómoda situación fue filmada por un testigo, que se transformó en un improvisado camarógrafo y, al mismo tiempo, les pedía a las autoridades que depusieran su accionar. “¡El carro dejáselo! Ya bastante se van a robar todo esto y ahora también se van a robar eso. ¡Dejáselo loco!”, se escucha gritar a un hombre indignado por la secuencia que observaba de cerca.
“Acá venden falopa todas las noches loco. Dejen de perseguir al laburante”, advirtió otro testigo. No obstante, los integrantes de la AGC no escucharon los pedidos para que le devolvieran todo a Pablo, y el hombre finalmente tuvo que irse del parque.
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El video se viralizó rápidamente en redes sociales y generó reacciones a favor y en contra del accionar policial.
Fuentes de la AGC consultadas por Infobae explicaron que este tipo de operativos contra la venta ilegal se desarrollan habitualmente en la vía pública. “No se sabe la procedencia de la mercadería y se incauta lo que no está autorizado. Es un tema de salud pública”, explicaron desde la agencia a este medio. Y completaron: “Los inspectores verifican la procedencia de la mercadería y verifican si la misma se encuentra debidamente rotulada y envasada, a fin de preservar la salubridad de los productos, evitando la venta al público de alimentos no apto para consumo”.
Indignado por la situación que vivió Pablo, el secretario general del sindicato de vendedores ambulantes “Vendedores Libres”, Omar Guaraz, se solidarizó con el trabajador y dio detalles de las complicaciones que atraviesa el sector en el último tiempo. “Lamentablemente hoy los vendedores en CABA están transitando un avance de la violencia institucional. Y por otro lado la corrupción policial y la AGC que tarifa el espacio público. Vivimos escenas de violencia en todos los lugares de la Ciudad de Buenos Aires”, aseguró Guaraz en diálogo con Infobae.
Con el objetivo de contextualizar el revés que sufrió Pablo, Guaraz se refirió al contexto económico “complicado” y la pobreza “generalizada” que atraviesa el país. “Tenemos una inflación que está destruyendo el poder adquisitivo, una economía que se achica, donde cada vez crece más la informalidad y tenés casos en la ciudad de Buenos Aires, que es la más rica, de vendedores que salen entre ocho y diez horas y no abren caja”, advirtió.
Por último, Guaraz se puso a entera disposición de Romero. “En nombre de Vendedores Libres y los manteros expresamos nuestra solidaridad con Pablo”, concluyó.
También hubo muchos usuarios de redes sociales que expresaron su voluntad de ayudar a Pablo, entre los que se destacó el streamer Gerónimo “Momo” Benavides. Al observar las imágenes de lo sucedido, el joven le pidió colaboración a sus seguidores para ayudar al hombre. “Si encuentran el contacto de Pablo le financio el emprendimiento”, escribió en su perfil de Twitter. Y en un segundo tuit, agregó: “Y aclaro que la pongo de mi bolsillo”.
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