Durante la vigilia pascual celebrada en la Catedral Metropolitana, el arzobispo de Buenos Aires y primado de Argentina, el cardenal Mario Poli, llamó a “vivir con un corazón puro”, al tiempo que pidió “inaugurar una nueva dimensión en cada hombre y en cada mujer”. “Lo necesitamos”, expresó.
Poli auspició la misa en conmemoración del Sábado de Gloria, celebración que comenzó a partir de las 21 horas. Cada día anterior al Domingo de Pascua, se recuerda el “Triudo Pascual”, período en el que la liturgia cristiana conmemora la Pasión de Cristo, ya que en este día se hace honor a los preparativos de la noche anterior a la resurrección.
Como parte de esta ceremonia, bendijo el “Fuego Sagrado”, llama con la que encendieron los cirios pascuales que representan al “Cristo resucitado” para la tradición católica. Así, mientras el cardenal avanzaba se encendían las velas de los presentes, iliuminándo la nave central del histórico y principal Iglesia del país.
Luego de que se leyeran las siete lecturas que refieren a la resurrección de Jesús, Poli continuó con su homilía en la que se refirió a la Pascua como “la fiesta más solemne, la noche más santa, más antigua y más sagrada”, así como también la definió como “la noche de las noches”, “la santa vigilia”.
“La resurrección de Jesús ha inaugurado una nueva dimensión del ser humano, que fue creado para la eternidad”, explicó el sucesor del papa Francisco en Argentina. En este contexto, pidió a los presentes y a toda la comunidad: “Renovemos esta misma alianza de amor, recordando el reposo sepulcral” e “inauguremos una nueva dimensión en cada hombre y en cada mujer, detrás de cada uno de nosotros y del prójimo”.
“Celebremos hoy esta Pascua, que dice tanto de nuestras propias vidas, lo necesitamos”, exhortó Poli. El cardenal primado de Argentina solicitó además “vivir con un corazón puro”. En sus palabras, el arzobispo de Buenos Aires mencionó que Cristo celebró tres Pascuas en su vida, pero resaltó que “la tercera y más importante es la de su resurrección”.
De esta manera, sostuvo que “la Pascua contiene todos los bienes que Dios quiere para sus hijos, creados para la eternidad”, por lo que la consideró como “la fuente de la gracia que se derrama en todos los sacramentos de la iglesia”, de acuerdo con la información de Télam.
Antes de finalizar con sus reflexiones sobre las escrituras de la biblia, el cardenal se adelantó a la renovación de las promesas bautismales que estaban previstas que se realicen. Poli se refirió entonces al agua, con la que se realizaría luego el sacramento, y precisó que, para la Iglesia, “es el agua de la salvación”. “Nos sumergimos en la pascua de Jesús para participar de su resurrección y asunción al cielo para que algún día estemos con él para siempre”, cerró su homilía.
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Después, bendijo el agua y tomó la renovación de las promesas bautismales. Tal como establece la fe católica, se colocó incienso en el atrio en evocación de las “llagas de Jesús” y, antes de finalizar la vigilia, se conmemoró a la Virgen María.
De la celebración participaron el arzobispo de la Iglesia Ortodoxa griega, Iosif Bosch, así como también el rector de la catedral, Alejandro Russo, quien saludó a Poli por su década dedicada a la institución porteña desde que Jorge Bergoglio fue elegido papa y tuvo que mudarse al Vaticano.
La vigilia se dio tan solo días después de que el cardenal primado de Argentina confirmara que Francisco le había aceptado su renuncia, presentada meses atrás luego de cumplir los 75 años. De igual forma, aseguró que el sumo pontífice le pidió que permanezca en su lugar hasta que “llegue el próximo”.
La misa pascual de este domingo está prevista para las 11:30 de la mañana, en la que se realizarán los ritos centrales que establece la tradición cristiana. Se espera que la celebración finalice con un concierto cerca de las 16:30 a cargo del organista titular, ministro profesor Enrique Rimoldi, junto con la Capilla Musical de la Catedral Metropolitana.
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