A partir del próximo jueves, la línea de trenes San Martín, que une el barrio porteño de Retiro con el partido bonaerense de Luján, atravesando en el camino varias localidades del Conurbano, operará todos los días con la frecuencia de domingo y feriados debido a la poca cantidad de formaciones que están en condiciones de circular.
Así se lo comunicó la empresa estatal Trenes Argentinos a los empleados de este ramal, a través de un breve comunicado en el que se precisó que esta medida se mantendrá “hasta nuevo aviso” y que se tomó por “la falta de disponibilidad de material rodante”.
De esta manera, los servicios a Retiro que salen tanto desde José C. Paz como de Pilar, tendrán una frecuencia aproximada de 30 minutos, que se acorta a 20 durante algunos momentos del día, mientras que los que parten de la estación Dr. Cabred, lo harán cada una hora y cuarto. Lo mismo sucede en sentido inverso.
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En diálogo con Infobae, fuentes de Trenes Argentinos confirmaron el nuevo horario y explicaron que, “en rigor, se trata de demoras porque hay menos formaciones operando y eso lleva a que el esquema se acerque a un diagrama de domingos y feriados”.
En este sentido, precisaron que actualmente esta línea opera con nueve de las 13 formaciones con las que cuenta habitualmente, ya que las otras no están en condiciones de circular debido “a un retraso en el proceso de mantenimiento de formaciones y máquinas”.
Por este motivo, se decidió continuar prestando servicio, pero con un diagrama más corto y con refuerzos solamente en los horarios pico.
Este martes por la mañana ya se registraron varias demoras y cancelaciones en el tren San Martín por “problemas operativos”, según informó la cuenta de Twitter de la empresa estatal, aunque también se vio afectada la línea Sarmiento.
A mediados del mes pasado, ambos ramales estuvieron más dos horas interrumpidos por una amenaza de bomba en la estación José C. Paz, lo que motivó un operativo en la zona a partir del cual el Escuadrón Antiexplosivos de la Policía Federal Argentina (PFA) determinó que se trataba de una falsa alarma.
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Según confirmaron en aquel momento fuentes policiales a Infobae, la brigada de explosivos concurrió al lugar y conforme a su protocolo de actuación determinó que no había ningún artefacto con riesgo de detonación. “En minutos se restablecerá el servicio”, precisaron poco después de las 8:00 del pasado 17 de enero. La información luego fue ratificada por Trenes Argentinos.
A raíz de este imprevisto, miles de pasajeros que utilizan el tren que une Retiro con Open Door (estación Dr. Domingo Cabred) se agolparon desde temprano en las distintas terminales a la espera de novedades. Mientras se restablecía el funcionamiento del ferrocarril, la Secretaría de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad de Buenos Aires publicó en su cuenta oficial de Twitter una serie de alternativas para los pasajeros afectados.
Por esta amenaza de bomba intervino el Juzgado Federal N°3 a cargo del doctor Daniel Rafecas.
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