El partido de Villa Gesell experimentó a comienzos de esta temporada lo mismo que le sucedió a otros de los destinos turísticos más elegidos por los turistas: el atraso de reservas. Una serie de situaciones confluyeron e hicieron que la llegada de visitantes se demorara, en comparación con el último verano. Pero el panorama cambió rápidamente: entre Navidad y Año Nuevo el porcentaje de ocupación escaló 14 puntos y para este fin de semana las autoridades locales proyectan que ese número se eleve hasta el 92%, con localidades como Mar de las Pampas, Las Gaviotas o Mar Azul prácticamente a tope.
Un informe de la Secretaría de Turismo local, a cargo de Marcelo Iglesias, precisó el movimiento turístico entre el 31 de diciembre y el 3 de enero. En ese periodo ingresaron un total de 93.341 personas (registradas mediante lector de patentes en los accesos). El mismo relevamiento detalló que la ocupación hotelera, a partir de las mediciones internas y lo informado por los establecimientos, promedió el 75% en el casco urbano de Villa Gesell, el 95% en Mar de las Pampas, el 94% en Las Gaviotas y el 91% en Mar Azul. El arribo de veraneantes representó un gasto de más de 3 mil millones de pesos que se inyectaron en la economía geselina, ya que, según los cálculos, cada turista gastó unos $8.000 por día.
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El informe consideró tres segmentos definidos como “premium, medio y económico”; en función a los tres perfiles de turistas que recibe el distrito costero. Respecto de la primera clasificación, el valor de referencia del alquiler de una cabaña o departamento con servicio para dos personas fue de $25.000. Dos comidas diarias (en el centro de Villa Gesell una milanesa napolitana cuesta $2.500, una hamburguesa $1.500 y la parrilla libre, $2700) se promediaron en torno a los $11.500 y una excursión a los $5.000, que se sumaron a otros $5.500 bajo el concepto de “ocio”. Eso dio un total de $47.000 (el valor individual es, lógicamente, de $23.500).
En el segmento medio, la estadía en un hotel dos estrellas se ubicó en $15.000, dos comidas en $9.000, una excursión en $5.000 y el ocio en $5.500. El total resultó $34.500 ($17.250 el gasto individual). En tanto, entre los más gasoleros un departamento de alquiler tuvo un costo promedio de $10.000, una comida $4.200 y el ocio $3.000, lo que dio $17.200 por cada dos personas. Todos estos números llevaron a la siguiente conclusión: el valor del gasto promedio individual del turista es de $16.450 con alojamiento y de $8.117 sin considerar ese ítem.
Para establecer los precios promedio en todos los rubros de hospedaje se tomaron datos recabados por las Oficinas de Información Turística. Lo mismo con las excursiones, cuyos valores provienen de distintos prestadores que ofrecen actividades como cabalgatas, visitas al faro, recorridos en cuatriciclos, bicicletas y el trencito histórico, entre otros. En relación al ocio se tomó como referencia el precio de cajas de alfajores.
Las actividades de esparcimiento
Esta temporada, Villa Gesell recibe a los turistas con las propuestas clásicas y otras nuevas. La peatonal de Avenida 3, que se extiende desde 104 hasta 108 y es el principal punto de concentración de turistas, tiene un horario de funcionamiento desde las 18.30, exceptuando los días de lluvia. En este año, en los Paseo 106 y 108 y Av. 3 se presentan diferentes solistas, dúos y bandas. Además, todos los martes y jueves del verano, la Orquesta Municipal brindará conciertos a partir de las 18, en Paseo 106 y Av. 3. Y en la Plaza Primera Junta (Paseo 104 y Av. 3) de jueves a domingos hay espectáculos musicales, en su mayoría de agrupaciones locales, abiertos al público.
El parador REcreo, ubicado en Paseo 112 y playa, es un espacio generado por la Provincia de Buenos Aires y la Municipalidad. Funciona todos los días de 10 a 20 y allí hay clases de yoga, ritmos latinos, campeonatos deportivos, diferentes talleres para niños, espectáculos infantiles y shows musicales con la participación de destacados artistas nacionales y locales.
En tanto, en la Playa Deportiva Inclusiva, en paseo 112, se pueden practicar disciplinas de forma libre y sin ningún tipo de costo, de 8 a 20. Villa Gesell tiene una política destacada en inclusividad, con el parador Nocticula como pionero. En diálogo con Infobae, Iglesias comentó que se distribuyeron “ocho sillas anfibias a diferentes paradores, cada 800 metros entre sí”. Esta iniciativa surgió con el objetivo de que las familias no deban realizar grandes desplazamientos hasta ese balneario que es ejemplo de la Costa Atlántica, y así acortar distancias para disponer del servicio. “Las mismas se pueden utilizar libremente: si no le estás alquilando al parador donde se ubican, te las tiene que brindar igual”, explicó el funcionario.
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Los museos del Pinar Norte de Villa Gesell reciben al público todos los días, de 10 a 18, con muestras permanentes en cada espacio y nuevas exposiciones temporales. El teatro municipal tiene una extensa programación a la que se puede acceder en detalle en el sitio web y las redes sociales del Municipio; lo mismo con la agenda del Polo Cultural Sur Ex Terminal, localizado en Avenida 4 y Paseo 141. Además, en medio del bosque, la cafetería El Tinglado (Alameda 202 al 150) invita a diferentes show acústicos y espectáculos musicales que se desarrollan con un ambiente natural muy tranquilo.
Mar de las Pampas en Concierto es otro que regresará este verano. En esa localidad otro recomendado son las recorridas guiadas por el sendero botánico “Mónica García”, una actividad gratuita que se desarrolla todos los martes (desde las 10) y jueves (desde las 18) durante enero y febrero. Mar Azul tiene su propia peatonal y en Las Gaviotas también se pueden disfrutar de excursiones, travesías, cabalgatas y paseos. Otro atractivo es la Reserva Natural Municipal Faro Querandí, situada a unos 5 kilómetros del sur de Mar Azul –a 22 km de la peatonal de Villa Gesell–. Se trata de lugar de más de 5.000 hectáreas junto a la costa que atrapa por la flora y fauna que conviven con las dunas.
En resumen, Iglesias finalizó destacando que cuando el turista llegue a Villa Gesell “se va a encontrar con lo que se les prometió” en los canales oficiales de comunicación. Esa, subrayó, es una clave para que los veraneantes regresen al verano siguiente.
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