Cuando todo debía ser alegría y festejo por la clasificación del seleccionado argentino a semifinales del Mundial Qatar 2022, luego de la infartante definición por penales ante Países Bajos, el pasado viernes 9 de diciembre la tragedia tocó la puerta de la familia Ventura, muy conocida en la ciudad bonaerense de Zárate. En el marco de la celebración por el triunfo del equipo nacional, un grupo de inadaptados que se había convocado por redes sociales para destrozar la heladería Real, ubicada en pleno centro de dicha ciudad, llevó a cabo el brutal ataque contra el comercio y Miguel Ventura, su dueño, murió de un infarto pocas horas después de intentar que los violentos descendieran de la costosa cartelería ubicada en la marquesina del local. A siete días de ese fatal episodio, Ariel, hijo de la víctima, dio su versión de los hechos y lamentó la repentina muerte de su padre. “Es algo totalmente injusto y desagradable lo que pasó. Esto se podría haber evitado con un operativo de seguridad. El encargado de bajar a la gente de ahí era la policía, no mi viejo”, aseguró hoy durante una entrevista radial.
El descontrol se desató cerca de las 18.30 de aquella calurosa -y emotiva- jornada, después de que Lautaro Martínez convirtiera el penal decisivo frente al equipo neerlandés. Si bien hasta ese entonces era habitual que los vecinos de Zárate se congregaran en el cruce de Rómulo Noya y Justa Lima para celebrar victorias de la albiceleste, o bien de partidos con trascendencia nacional, la familia Ventura jamás imaginó que su comercio sería el blanco elegido para provocar destrozos en pleno festejo.
“Mi viejo estaba hace 30 años en la heladería, y cuando terminan los partidos siempre se bajan las persianas. Menos un ventanal fijo, que se cierra a medias para testear que esté todo bien afuera. En este caso estaban más agresivos. Pateaban la persiana de metal. Hasta que un empleado del local se percata de que se estaban empezando a subir a la marquesina, donde se encuentra la cartelería, la cual es muy costosa, y no se puede romper”, contó hoy por la mañana Ariel Ventura, en diálogo con radio Mitre.
Al notar que la situación se estaba yendo de las manos, y ante la falta de presencia policial en el lugar, el empleado de turno dio aviso a Miguel para que interviniera con los agresores. Pero el intento por calmar las aguas terminó de la peor manera. “El empleado le avisa a mi papá, y él se sube para bajarlos del establecimiento que pertenece a la heladería. Se cree que una discusión lo terminó de descompensar. Empezó a acusar dolor de pecho y falta de aire. Le avisa al empleado, que ya sabía que mi papá tenía problemas del corazón”, recordó el joven, que en ese momento no se encontraba en la heladería familiar.
Miguel no presentaba mejorías y se solicitó la presencia de una ambulancia, pero el servicio de emergencias tardó más de lo pensado y el clima, según contó Ariel a la citada señal radial, “no ayudó”. “Hacía mucho calor, llovía a cántaros y se había cortado la luz”, relató, con la voz entrecortada.
Si bien Miguel llegó a ser trasladado al hospital Virgen del Carmen, horas más tarde murió de un infarto. “Mi papá era un hombre muy querido y honrado. Era devoto del trabajo. Nunca se tomó un feriado. La única vez que mi viejo deja la heladería en pleno verano fue para irme a buscar tanto a mi, yo soy adoptado, como a mi hermano”, aseguró el hijo de la víctima.
Por último, Ariel criticó con dureza a las fuerzas de seguridad por la falta de presencia de efectivos en los festejos que derivaron en la muerte de su padre. “Es algo totalmente injusto y desagradable lo que pasó. Esto se podría haber evitado con un operativo de seguridad. El encargado de bajar a la gente de ahí era la policía, no mi viejo”, apuntó con evidente tristeza.
Tras confirmarse la muerte de Ventura, desde el Centro del Comercio e Industrias de Zárate emitieron un comunicado en el que repudiaron “los actos vandálicos realizados a comercios de la ciudad consecuencia de los festejos por el partido disputado por la selección”. Asimismo, enviaron las “condolencias a familiares y amigos del vecino comerciante que perdiera la vida consecuencia de esta barbarie”.
Por su parte, la municipalidad de Zárate, a través de su cuenta oficial de YouTube, compartió un video en el que el secretario de Gobierno, Juan Manuel Arroquigaray,, el director del Servicio de Emergencias Municipal (SEMU), Dr. Pablo Terrens, y el director general operativo de la Secretaría de Seguridad, Sebastián Retamozo, dieron sus explicaciones sobre lo ocurrido e hicieron “un llamado a la reflexión” para toda la comunidad.
“Si bien está correcto que podamos expresar nuestra alegría, no es correcto que eso sea motivo de destrozos o vandalismo como lamentablemente se registró ayer. Si bien se encontraba previsto un operativo de seguridad como es habitual en estos casos, estando la policía como responsable de la seguridad local, acompañada por la DPU y las fuerzas federales, la cantidad de gente desbordó cualquier tipo de operativo, y es ahí cuando tiene que primar la racionalidad y el respeto hacia el otro por parte de nuestros vecinos”, expresó Arroquigaray en relación a los hechos de público conocimiento.
Cabe destacar que los hechos de vandalismo en la heladería Real se produjeron a raíz de una convocatoria por redes sociales en las que algunos usuarios apuntaban contra dicho comercio por considerarla “una empresa capitalista”. Y en ese sentido, algunos publicaron: “Hay que romper la heladería Real que sea nuestro equivalente al McDonald’s del Obelisco”.
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