La bella Medellín puede ser ejemplo de lo que se habla cuando se habla ciudades sustentables y futuro. Fue el polo industrial de Colombia en la primera mitad del siglo pasado, hasta que una crisis económica frenó el desarrollo en los ‘70 y sobre eso, encima, estalló la violencia urbana en las décadas siguientes con los carteles como principales derramadores de sangre sobre el territorio de la ciudad. Las tasas altas de homicidios y la falta de trabajo formal la pusieron al borde de la disolución y el caos. Pero a inicios del nuevo milenio las autoridades unificaron criterios para salir del pantano. La creación del comité Universidad, Empresa, Estado y la idea de “Ruta N”, una organización con actores de estos sectores atrajeron empresas y talentos con el objetivo de mejorar la calidad de vida a través de la innovación, la ciencia y la tecnología.
“En poco tiempo fuimos declarados como la ‘ciudad más innovadora del mundo’, creamos 17 mil empleos y se instalaron 400 empresas de 32 países, porque buscamos dinamizar ecosistemas locales para resolver problemas globales”, explicó ante un auditorio con un centenar de personas Carlos Andrés Londoño Zuluaga, gerente del Portafolio Transformar de la Corporación Ruta N Medellín.
Los “problemas globales”, los de siempre: falta de empleo, educación precaria y desigualdad. ¿Cómo se piensa una ciudad para el futuro? ¿Qué rol tienen la tecnología, el desarrollo sustentable y el cuidado del medioambiente? Sobre estas ideas circuló el contenido de la Smart City Expo, un evento internacional que por primera vez se realizó esta semana en Santiago del Estero: encuentro de personalidades de la política, las empresas y las organizaciones para recorrer las problemáticas y las soluciones de las ciudades del mundo.
Aplicaciones para llevar telemedicina a los pueblos, heladeras con energía solar, sistemas de alarmas y alertas para violencia de género, semáforos y paradas de colectivos inteligentes, fibra óptica en cada rincón de los territorios, educación del tercer milenio, automóviles eléctricos.
El Nodo Tecnológico de Santiago del Estero (concretamente ubicado en la ciudad de La Banda, vecina de la capital provincial, a metros del fantástico y futurista Estadio Único Madre de Ciudades) sirvió para exhibir los avances a los que los municipios y provincias del país pueden acceder para optimizar los recursos de la población. Y reunir, además, personalidades con poder decisión: desde el gobernador de la provincia, Gerardo Zamora, hasta el CEO de Aeropuertos Argentina 2000, Daniel Ketchibachian, el ministro de Turismo y Deporte, Matías Lammens, o los presidentes de YPF y Aerolíneas Argentinas, además de académicos y especialistas en innovación, inclusión y bienestar.
El evento, que normalmente y los lugares del mundo donde se hace dura dos días, pero aquí agregaron una jornada especialmente dedicada al debate de los jóvenes, buscó impulsar iniciativas con el objetivo de acelerar la transición latinoamericana hacia distritos urbanos y rurales inteligentes, productivos, sustentables y centrados en la calidad de vida de las personas.
La Smart City es menos una expo que un congreso. Al menos la versión fundacional de la etapa santiagueña, que tiene cerradas próximas dos ediciones (2023 y 2024): debates, análisis y experiencias sobre desarrollo económico, educación, sustentabilidad, protección social, innovación. Las palabras más pronunciadas en estas tres jornadas que arrancaron el miércoles y terminaron el viernes.
La característica de la modalidad congreso ofrece, además de la muestra de experiencias y la discusión pública un provechoso “detrás de escena”, donde los actores se conocen, intercambian ideas y cierran consensos para el futuro. En un mismo living VIP conviven entre masitas y cafés, ministros y CEOs.
Parte de eso se vio en los tres espacios donde se dieron las charlas públicas. “En la Smart City se genera diálogo entre sectores público, privado e institucional”, explica Andrés Mozzi, promotor de la versión local del evento, que ya organizó las ediciones 2017 y 2019 hechas en Buenos Aires. “A nivel político también. El desafío es que todos los municipios del país vengan en las próximas ediciones. Que sea bien federal. El evento es el lugar para exponer tus buenas prácticas o iniciativas. Es inspirador”, ofrece Mozzi.
Quizás la conferencia más convocante y de interés social (pero también político), no tanto hacia el futuro, sino sobre el presente inmediato pospandemia y la importancia de la conectividad para apuntalar el desarrollo, fue la que integraron Lammens, Ketchibachian, el presidente de Aerolíneas, Pablo Ceriani, y el vicegobernador local Carlos Roger Silva Neder.
“En plena pandemia cuando no teníamos pasajeros buscamos una forma sustentable de abordar la falta de ingresos”, comentó el CEO de Aeropuertos Argentina 2000, y contó: “Extendimos el contrato y nos comprometimos a hacer nuevas obras. Aeroparque tiene nueva pista y se convirtió en un punto regional. Eso mejoró la conectividad en todo el país. La infraestructura es la base de la pirámide”.
Sobre esto, Ceriani consideró que Aerolíneas busca tender una red federal de vuelos, “con muchas conexiones punto a punto sin pasar por Buenos Aires”. Y Silva Neder profundizó sobre la cuestión del desarrollo federal y la conectividad: reclamó que se active la obra del paso bioceánico en San Francisco, Catamarca. Como ejemplo contó que la exportación exitosa que hacen de la fibra de algodón a Asia sería un 30% más barata y tardaría en llegar casi 20 días menos si saliera por barco desde el Pacífico, en lugar de desde el Atlántico, como ahora.
Lammens aprovechó su momento para comunicar enfoques y resultados del abordaje público en la industria del turismo y sus satélites después del desastre de la pandemia. “Vimos que el Estado se volvió imprescindible para sostener la actividad privada, conservar el empleo. Es importante el estado presente. Pero también había que dar un pasito más, porque se habla del ‘Estado emprendedor’, y en ese marco nace el Pre Viaje, que tuvo un éxito absoluto y nos sorprendió a nosotros mismos, generó empleo en el interior”, se autocelebró el ministro y aportó datos del suceso: más de seis millones de argentinos lo usaron. “El Estado nacional invierte en Pre Viaje y recupera 8,3 de cada 10 pesos que pierde”, agregó.
Por entre los stands y las salas de conferencias, entre las aproximadamente 5.000 personas que visitaron el lugar, andaba gratamente sorprendido Ricard Zapatero, CEO de FIRA Barcelona Internacional, la organizadora de Smart City Expo World Congress, que en noviembre de este año celebrará su 11a edición en Barcelona y ya viene de hacer este mismo año eventos similares en México, Brasil, Qatar y Estados Unidos.
“El principal objetivo es juntar en un congreso gente que explique problemáticas y cómo las solucionó”, comentó. Zapatero recordó el origen de esta iniciativa, nacida en el gobierno de la ciudad catalana, una de las más innovadoras del planeta. “Hacíamos muchas cosas pero nos dimos cuenta que faltaba comunicarlas”, recuerda. De Santiago del Estero conocía la carrera del Moto GP.
Pero se lleva bastante más: “Hay mucha inversión, apuesta por la fibra óptica movilidad electrificada, educación tecnológica y voluntad y visión a cinco años para que Santiago sea un destino turístico inteligente, una capacidad de que ese destino inteligente se haga para que beneficie a todos los habitantes y con reivindicación del Norte Grande”. De hecho, el Nodo Tecnológico se conecta con el bellísimo Estadio Único Madre de Ciudades y el Centro de Convenciones Forum a través de un tren eléctrico público y gratuito.
A nivel político, la Smart Expo sirvió para la foto de los gobernadores de la liga del Norte Grande que incluye 10 provincias, la presencia del jefe de Gabinete nacional, Juan Manzur, y parte del equipo del Wado De Pedro, de Interior. Los administradores de las provincias visitaron el Nodo un rato antes de su reunión mensual, esta vez con sede, justamente en el Forum, a donde llegaron en llamado Tren al Desarrollo.
“Estamos trabajando desde el Norte Grande para discutir las cosas que rompan la asimetría porque los jóvenes de Santiago y del norte tienen que tener las mismas oportunidades, tenemos el potencial para estar a la altura de cualquier ciudad del mundo”, dijo Zamora, gobernador anfitrión.
“Este es un eje estratégico para fortalecer con la ciencia y tecnología el desarrollo social. Eso hace a una ciudad inteligente. O a un territorio inteligente. Fue transformador para todos. Cuando venís a estos lugares no te vas igual. Hay ideas inteligentes para llevarse”, comentó, satisfecha con la primera experiencia, María Soledad Delgado, coordinadora de Relaciones Internacionales de Santiago del Estero. Dado que la Smart City es un espacio para pensar en el futuro y la tecnología aplicada a la calidad de vida, es de esperar que en la edición 2023 les funcione correctamente el wifi.