Nieve, bajas temperaturas y viento, en resumen condiciones inestables, son las razones por las que el paso internacional Cristo Redentor, que comunica la Argentina con Chile a través de la provincia de Mendoza por la ruta 7, fue cerrado al tránsito.
La decisión, que fue provocada por el mal tiempo en alta montaña, es de carácter preventiva y está sujeta a las condiciones climáticas que afecten el área, según lo informaron fuentes oficiales. La información precisa que, a partir de las 17 horas, quedó suspendido el tránsito para todo tipo de vehículos por el corredor internacional.
Por su parte, autoridades trasandinas detallaron en un comunicado, que la suspensión se debe a “la condición climática pronosticada que afecta este sector cordillerano con nevadas y bajas temperaturas que imposibilitan el tránsito seguro” en esta ruta internacional.
Según lo pronosticado, se espera que la temperatura mínima sea de -9°C y que las nevadas se extiendan durante todo el día. Las expectativas están puestas recién en que la temperatura y las condiciones mejoren en las próximas 24 horas.
Las imágenes lo dicen todo, apenas se ve unos metros más adelante y ni siquiera llega a distinguirse la diferencia entre el cielo y la tierra, todo es blanco. Dentro de un auto el panorama parece inquietante, el parabrisas se mueve de un lado a otro barriendo los copos de nieve que no dejan de caer del cielo.
Meses atrás, en pleno invierno, la situación era similar, el paso internacional permanecía cerrado pese a que habían logrado desbloquear la calzada. En aquella situación el drama estaba de por medio, más de 400 personas que habían quedado atrapadas por el temporal.
La noche había sido dura para todos a unos pocos kilómetros del Paso Internacional Cristo Redentor, donde debieron afrontar hasta temperaturas cercanas a los -20 °C. “No era bueno el panorama”, reconocieron las fuentes consultadas por este medio.
Sin embargo, tras dos días de intensa nevada, la misma amainó y todo empezó a despejarse. Así, una máquina de Vialidad Nacional logró liberar la calzada y abrir una brecha para que salieran los camiones que bloqueaban la ruta internacional 7 en el sector de la Curva de la Soberanía.
En aquel momento, Néstor Majul, subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad de Mendoza decía: “Fue una tarea que pensábamos que nos iba a demandar muchas horas y se logró en muy poco tiempo”. Y contó que la “prioridad era sacar a la gente con los camiones del Ejército y la oruga de Gendarmería, pero después se pudieron también movilizar los vehículos”.
Así, decenas de camiones, micros y autos particulares que habían que quedado varados en la ruta internacional que une Argentina con Chile por Mendoza, tras un intenso temporal de nieve y viento blanco que se registró en ambos lados de la cordillera de Los Andes y que produjo el cierre del paso internacional Cristo Redentor ayer al mediodía, lograron continuar camino.
Tras esa dura experiencia, una joven estudiante argentina, que viajaba de Mendoza a Santiago de Chile junto a su madre en micro, había relatado a Infobae cómo fue la noche ante los -20°C.
Para asistir a la gente, un comité de crisis, integrado por distintos organismos junto a la patrulla de rescate, trabajó para evacuar a los varados y despejar la ruta internacional luego de que las adversas condiciones climáticas provocaran que decenas de camiones, micros, trafics y autos quedaran atrapados en la alta montaña ante situaciones meteorológicas extremas.
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