Una masa de denso humo tóxico proveniente de la quema de pastizales en el Delta del Río Paraná envuelve a la ciudad de Rosario desde hace semanas. Durante los últimos tres días, sin embargo, la situación empeoró debido a la dirección del viento y el aire se volvió “irrespirable”.
“No es neblina, no son nubes, es humo”, coinciden los habitantes de la capital de Santa Fe que, a través de fotos y videos, exponen su realidad en las redes sociales.
En este contexto, al comienzo de la semana, el Ministerio de Salud de dicha provincia recomendó a la población mantener las puertas y ventanas cerradas, retomar el hábito de colocarse barbijo y evitar actividades físicas al aire libre. “No solo es el humo, sino que estamos teniendo cenizas. Realmente afecta. Es como estar fumando las 24 horas del día”, aseguró la titular de la cartera sanitaria, Sonia Martorano.
Según la funcionaria, se registró un aumento de las consultas por dificultades respiratorias. “Los primeros afectados son los asmáticos, los que tienen EPOC e hipersensibilidad bronquial. Pero quienes no presentan ninguna de estas enfermedades, también se ven afectados por esto. De ahí la recomendación de usar el barbijo. Y, cuando hay mucho humo, evitar la actividad física en lugares abiertos”, agregó en diálogo con radio LT9 de Santa Fe.
En sintonía, el Colegio de Farmacéuticos reveló que hubo un incremento del 40% en la venta de barbijos, en comparación con la semana anterior. “El lunes y el martes sufrimos terriblemente el humo. Por la toxicidad del aire, muchas personas se acercaron a comprar barbijos N95, que son los que filtran el 90% de las partículas, y que no se vendían desde el momento más crítico de la pandemia”, contó Leonardo Jurado, integrante de la institución, a Infobae.
Otro dato preocupante: de 2021 a 2022 aumentaron un 35% las prescripciones médicas de antialérgicos, spray nasales y gotas oculares, que suelen usarse para la sequedad y picazón de los ojos. “Es un número altísimo que deja en evidencia que los habitantes de Rosario ya no pueden solucionar este problema con medicamentos de venta libre. Necesitan ir al médico porque el humo les afecta”, agregó Jurado.
Este miércoles, dos personas se intoxicaron por la inhalación del humo en la ciudad de San Lorenzo, ubicada al sur de la provincia de Santa Fe. Según informaron los medios locales, tras someterse a un análisis, se determinó que los damnificados tenían “carboxihemoglobina” en sangre por la inhalación de humo. “Nos están intoxicando”, denunció el secretario de Salud de esa ciudad, Mariano Soria.
Por su parte, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, anunció que se va a manifestar este jueves junto a otros líderes municipales de la región del Paraná en el Obelisco porteño, para reclamar que se adopten medidas para evitar las quemas.
“Desde hace años estamos respirando humo. Lo que queda claro es que si el tema no llega al Obelisco, no se habla”, dijo Javkin.
Hasta el sábado pasado, los soldados del Ejército Argentino estuvieron en Rosario trabajando para combatir los focos de incendio. Tras su retirada, el fuego volvió a percibirse frente a la costanera rosarina y el humo invadió de nuevo la ciudad. Así que, este miércoles, regresaron a las islas para seguir brindando apoyo logístico y brigadistas en el territorio.
Como consecuencia de la reaparición del humo, la organización Multisectorial Humedales comunicó que el sábado 17 y el domingo 18 se realizará un corte total del Puente Rosario-Victoria para exigir “el fin de las quemas, basta de ecocidio y el tratamiento a la ley de Humedales, con el proyecto consensuado”.
La convocatoria es a las 14 y se espera una presencia en conjunto de unas 450 organizaciones ambientales. “Hay manos humanas que inician los incendios e instituciones que no las detienen y que resultan cómplices del ecocidio. Desde la ruta Rosario-Victoria se observa a simple vista cómo están ingresando ganado vacuno a los terrenos que fueron quemados. ¿Coincidencia?”, denunciaron desde la organización ambientalista.
En lo que va del año, según un análisis del Museo Scasso, se registraron 16.494 focos de calor en el territorio PIECAS Delta del Paraná. La cifra (alarmante) supera los valores de 2021 y 2020.
Para Leonel Mingo, coordinador de la campaña de humedales de Greenpeace, el hecho de que los incendios en esta zona se repitan año tras año se debe, en gran parte, a una responsabilidad humana.
En comunicación con Infobae, Mingo hizo hincapié en la necesidad de sancionar una Ley de Humedales que incluya un inventario nacional y una moratoria para impedir que los sigan destruyendo.
“Los humedales, que abarcan aproximadamente el 21% del territorio nacional, se encuentran bajo un total desamparo legal. Necesitamos de forma urgente una normativa que contemple la figura del delito penal para quienes cometan un daño a estos ecosistemas y para quienes provoquen incendios intencionales”, concluyó.
Fotos: Gentileza de Sebastián López Brachs/Greenpeace
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