Este martes, los alumnos de sexto año del colegio “Cristo Rey” de Córdoba Capital atravesaron un episodio que probablemente no olvidarán jamás. Sucedió durante una clase práctica de Química: tres de ellos sufrieron quemaduras por la combustión que se provocó durante un experimento fallido. Dos ya están fuera de peligro, pero hay una adolescente de 17 años que permanece en la terapia intensiva del Instituto del Quemado. Está grave.
Según supo Infobae, todo comenzó esta mañana, cerca de las 10.30. En medio de gritos y pedidos desesperados de ayuda, un llamado al 911 alertó a los bomberos acerca de un principio de incendio en el laboratorio de una escuela, ubicada en el barrio General Bustos de la capital provincial.
Al llegar al lugar, según explicó a este medio Fabián Tissera, jefe de la Brigada de Materiales Peligrosos de la Dirección de Bomberos de la Policía, la dotación solo tuvo que realizar una inspección y ventilar el lugar, porque uno de los alumnos había controlado el fuego con un extintor.
En diálogo con los medios locales, la directora de la institución, Alejandra Olmos, explicó que, mientras realizaba el experimento, el curso estaba siendo supervisado por una docente. “Era una actividad controlada: esto tuvo que ver con la imprudencia de un estudiante que no acató las normas de seguridad que la profesora había planteado y generó una combustión de mayor nivel que la que se esperaba”, dijo la mujer y destacó el trabajo en equipo de la comunidad educativa tras el incidente.
La joven que está en estado grave tiene quemaduras del 15%, según informó el jefe de Guardia del Instituto del Quemado, Martín Rapetti. La chica es hija de Daniel Cuello, un camarógrafo del El Doce TV, quien, después del incidente, brindó una pequeña declaración en la que contó acerca del estado de salud de su hija. “Tiene la cara destruida. Está en terapia, intubada, hay que esperar que se desinflamen las vías respiratorias”, sostuvo.
Luego apuntó contra las autoridades de la Institución: “Los chicos tenían que hacer un trabajo y el colegio no estuvo presente en esto. Mi hija no produjo el accidente, pero la ‘ligó' porque estaba cerca de la mesa de ensayo. Se quemó la cara, los brazos, los hombros, la garganta. El colegio un desastre: no había una profesora prestando atención”.
De los otros dos alumnos, uno quedó internado en sala común con 4% de quemaduras. El tercero, que solo tenía heridas superficiales, fue dado de alta.
En comunicación con Infobae, el papá del joven que aun está en observación contó su hijo “está bien”. “Ya pasó el susto y se encuentra de buen ánimo y humor. Queda en observación hasta mañana por disposición médica”, explicó a este medio Rodrigo Antona.
Una mujer, mamá de alumnos de otros cursos, fue testigo del hecho y le contó a El Doce TV que estando a metros de la sala del laboratorio no escuchó la explosión, pero sí los gritos de los alumnos. “Salió un varón con el suéter todo prendido fuego. Se lo sacó y con la secretaria lo ayudamos a apagarlo con la mano, tenía fuego en la cabeza”, dijo.
Segundos después la mujer vio salir entre llamas a la estudiante que permanece en terapia intensiva del Instituto del Quemado. “Fue impresionante porque estaba prendida fuego de la cintura para arriba. Gritaba de miedo, dolor y desesperación. Fue al patio y salieron los compañeros con el matafuegos, otro nene también estaba herido. Estaban todos conmocionados y en shock”, graficó.
Luego, siempre según el relato de la mujer, directivos y profesores llegaron para ayudar y llamaron a la ambulancia y a los Bomberos. “Todos se movieron para auxiliar a los chicos, sobre todo a la criatura que ya le faltaba el aire, estaba descompuesta”, agregó.
Según contó la agencia Télam, tras el siniestro, las clases del turno mañana fueron suspendidas, aunque por la tarde se desarrollaron con normalidad, ya que los bomberos inspeccionaron la escuela y determinaron que no había riesgos.
A su vez, la institución envió un comunicado a las familias de los alumnos afectados, en el que calificó el hecho como un “incidente” e indicó cómo continuaría la actividad en el establecimiento educativo.
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