En el primer fin de semana de las vacaciones de invierno, varios de los vuelos internacionales se vieron afectados en el Aeropuerto de Ezeiza a raíz de la caída de un radar que dejó de funcionar por la mañana de este domingo. El servicio recién se pudo normalizar en la tarde.
Como consecuencia de este desperfecto, hubo demoras en la salida de algunos de los aviones que estaban en esta terminal, así como también en Aeroparque y San Fernando, hasta que pasadas las 18.00 la empresa que está a cargo del sistema informó que el problema se solucionó.
Como el radar dejó de mandar información a la pantalla de los controladores aéreos alrededor de las 9.30, los operadores comenzaron a elaborar una grilla de manera manual para separar los arribos y las partidas con 15 minutos de diferencia.
Debido a que las pantallas permiten ver la ubicación exacta y la proximidad de los aviones al aeropuerto, al no contar con esa información, los controladores tuvieron que dar las órdenes para que los aviones permanecieran en el aire a la espera de sus correspondientes habilitaciones para aterrizar. Esto no sólo hizo que las llegadas se vieran retrasadas, sino también que los vuelos partieran con demoras.
La situación de Ezeiza también afectó las operaciones en Aeroparque y en el aeropuerto de San Fernando, que también comenzaron a mostrar en sus sistemas las alertas por los vuelos retrasados.
Fuentes del sector aeroportuario confirmaron a Infobae que un corte de energía registrado en la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) fue la causa de este trastorno, que se produjo justo en el segundo día del receso invernal.
Y una hora después, cerca de las 13, EANA explicó un su Twitter que “debido a la disrupción energético en el Centro de Control de Área de Ezeiza los aeropuertos del Terminal BAIRES presentan en estos momentos demoras en los despegues”.
Aunque las mismas fuentes confirmaron a este medio que cerca de las 11.30 el radar comenzó a funcionar con normalidad, las demoras en los despegues siguieron hasta unas horas después.
Al mediodía, por ejemplo, uno de los vuelos que tenía que salir para Salta a las 11.45 desde Aeroparque todavía no había despegado. Lo mismo sucedió en Ezeiza con las aeronaves que se dirigían hacia Santiago de Chile y San Juan cerca de esa misma hora.
Finalmente, pasadas las 18.00 EANA informó que se solucionaron “los inconvenientes energéticos en el Centro de Control de Área (ACC) de Ezeiza” y aseguró que “todos los aeropuertos del Terminal BAIRES” ya estaban brindando “servicio con normalidad”.
El inconveniente con el radar se produjo apenas dos días después de que una niebla afectara, este viernes, los vuelos en Ezeiza.
En esa oportunidad, la mayoría tuvo que ser desviada a otros aeropuertos de alternativa como Aeroparque, Rosario, Córdoba o Montevideo. Afectó a usuarios de Aerolíneas Argentinas, Latam, American Airlines, KLM, Iberia y Air France, entre otros. En total, fueron 21 los servicios afectados.
La semana pasada también hubo que desviar los vuelos desde Aeroparque hacia Ezeiza porque no funcionaban las camionetas de la ANAC que operan para dirigir a los aviones cuando hay niebla. Se trata de los vehículos llamados “Follow Me” que señalizan el camino de las aeronaves para que lleguen correctamente al hangar cuando hay baja visibilidad.
Tras dos años de pandemia donde que los viajes fueron restringidos al máximo, el avance de la vacunación y las flexibilizaciones implementadas en los vuelos hicieron que haya una alta demanda en esta temporada invernal
Aerolíneas Argentinas, por ejemplo, tiene previsto un movimiento diario de 250 vuelos, con un promedio de 38.000 pasajeros transportados cada día, y una ocupación plena hacia los principales destinos turísticos del país.
Las ciudades más elegidas por los turistas son Bariloche, con más de 100 vuelos semanales y llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Mendoza, Salta, Viedma y San Pablo; y Mendoza con 80 vuelos semanales con llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Iguazú, Bariloche, Jujuy, Neuquén, Mar del Plata y Santiago de Chile.
Le siguen Ushuaia con 40 vuelos semanales y llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, El Calafate y San Pablo; El Calafate con 30 vuelos semanales y llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Ushuaia y San Pablo; y Salta, con 65 y llegadas desde Buenos Aires, Bariloche, Córdoba, Mendoza, Iguazú, Tucumán, Neuquén, Resistencia y San Pablo.
Luego están Iguazú que cuenta con 53 vuelos semanales con llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Mendoza, Jujuy y Tucumán; Neuquén, que tiene 53 vuelos semanales con llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Salta y Comodoro Rivadavia; y San Martín de Los Andes, que posee 27 vuelos semanales con llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Rosario y San Pablo.
Finalmente, entre los destinos más solicitados está Mar del Plata, con 27 vuelos semanales y llegadas desde Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Bahía Blanca, conectando además con las rutas del recientemente inaugurado “Corredor Atlántico” que une Mar del Plata, Bahía Blanca, Trelew, Comodoro Rivadavia y Rio Gallegos.
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