Este martes, Cruz Roja Argentina presentó el proyecto de su museo propio, que buscará ser un espacio para el intercambio de experiencias y cuyo fin será que la gente, a través de distintas experiencias, conozca el trabajo humanitario que se realiza día a día. El mismo estará ubicado en un predio de 1000 metros cuadrados del barrio porteño de Almagro y será el segundo de la organización a nivel mundial, después del Museo Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, localizado en Ginebra, Suiza.
Según adelantaron desde Cruz Roja Argentina, el museo “será un espacio interactivo, proactivo y convocante”, que se va a integrar a programas de visitas de estudiantes de todo el país y a diversos circuitos como, por ejemplo, la clásica Noche de Los Museos organizada por el gobierno porteño. Allí, los visitantes se encontrarán con “instalaciones originales y recursos expresivos, piezas históricas, propuestas interactivas, actividades para todos los públicos y un espacio audiovisual”.
Habrá, por ejemplo, una ambulancia de la década del 20, botiquines de 1890 y otros objetos icónicos. Y se ofrecerán, entre otras cosas, la posibilidad de armar un kit de ayuda o de adentrarse en el proceso de potabilización de agua.
“Son experiencias para entender lo que es la vida de un voluntario”, dijo a Infobae el presidente de la Cruz Roja Argentina, Diego Tipping, y agregó que también habrá “un capitulo especial referido al conflicto del Atlántico Sur” y a la intervención de la institución en el proceso de identificación de soldados caídos en Malvinas.
Hasta el momento, no hay fecha de inauguración. Podría ser este año; podría ser en 2023. “Queremos que sea lo más rápido posible, ojalá sea este año”, anheló el presidente de la organización.
El principal objetivo de esta propuesta es “transmitir el valor de la solidaridad y la vocación de ayuda a todas las personas que lo visiten”. Para ello, el enfoque estará puesto en “promover y difundir los principios de Cruz Roja, la importancia de la solidaridad, la empatía, la acción humanitaria y el esfuerzo desinteresado por los demás; evocar la historia de la institución a través de un recorrido interactivo por los principales acontecimientos del país en los que Cruz Roja Argentina estuvo presente; vincularse con la comunidad educativa, mediante propuestas didácticas y pedagógicas para niños y niñas; proyectar acciones colectivas y solidarias a futuro, para los próximos 30 años”.
“Será un centro de interpretación para promover una cultura de la paz, para entender los legados comunitarios que tenemos que dejar y para subrayar la importancia de generar empatía y pensar en el otro”, definió Tipping, que aspira a que el espacio “sea un lugar icónico en la Ciudad de Buenos Aires”.
El proyecto fue presentado esta mañana en un acto celebrado en el Hotel Alvear Palace y que contó con invitados especiales. Entre los asistentes se destacaron las presencias del historiador Felipe Pigna y del ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, quienes realizaron, junto a Tipping, un recorrido por la historia argentina y la actualidad.
Ambos invitados tienen un vínculo especial con Cruz Roja Argentina. Pigna será el autor de dos libros en los que narrará la historia de la organización en el mundo y en el país. “Contará cómo nació y lo mucho lo que hizo Argentina por el mundo y que no se conoce”, adelantó Tipping.
El funcionario porteño, por su parte, está ligado a la asociación desde hace mucho tiempo atrás: su madre, Julia Bernaldo de Quirós, fue enfermera y se graduó en 1946 en la Escuela Central de Enfermería y Especialidades Paramédicas de Cruz Roja Argentina, con el mejor promedio histórico de la institución.
Tras la presentación de Pigna y Quirós, durante el encuentro se conformaron paneles en los que representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja y de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, repasaron la historia de la organización alrededor del globo y su intervención ante catástrofes y conflictos bélicos.
Cruz Roja Argentina es una asociación civil, humanitaria y de carácter voluntario. Fue fundada el 10 de Junio de 1880 por iniciativa de los médicos Guillermo Rawson y Toribio Ayerza y tiene como misión contribuir a mejorar la vida de las personas, en especial de aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, mediante “programas que buscan que cada una sea el motor de su desarrollo”, destacó Tipping.
Para eso, la institución trabaja a través de 66 filiales, más de 30 servicios educativos -con capacitación en diferentes especialidades vinculadas a la salud- y su sede central, en conjunto con las comunidades.
Un ejemplo de ello es el programa “Juventud en movimiento: deporte e inclusión”, que se implementa en diferentes provincias con el fin de transformar las actitudes y comportamiento de las personas jóvenes a través de actividades lúdicas, educativas y deportivas.
La labor de la organización está orientada por los siete principios fundamentales del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja: humanidad, independencia, imparcialidad, neutralidad, unidad, voluntariado, unidad y universalidad.
SEGUIR LEYENDO: