Después de dos meses de una intensa actividad y de una destrucción masiva en decenas de miles de hectáreas, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego indicó que ya fueron controlados los dos focos de incendios que quedaban activos en la provincia de Corrientes.
El organismo correspondiente al Ministerio de Ambiente de la Nación comunicó en su informe diario del domingo 20 de marzo que tanto los focos que estaban activos en las localidades de Ituzaingó y de Caá Catí (Estero de las Maloyas) fueron controlados y no hizo más menciones a otros posibles focos activos.
De acuerdo a sus propias referencias, el organismo hace mención a un fuego controlado cuando “La línea de control ha quedado establecida definitivamente, anclada y asegurada. Se considera que no hay posibilidad de rebrotes. Esta situación tendría que ser irreversible”.
De acuerdo al mismo SNMF, la superficie afectada por los incendios en la provincia de Corrientes entre el 1º de enero y el 15 de marzo fue de 81.204 hectáreas. Esas cifras, chocan con las que reportaron algunos especialistas de la zona, que indicaban que la zona afectada era de cientos de miles de hectáreas.
En el resto del país, la provincia de Chubut registró unas cifras similares, con 80.165 hectáreas arrasadas mientras que luego, los que siguen en la lista se encuentran a una diferencia abismal: San Luis fue la tercera provincia más afectada en ese período, con 36.574 hectáreas quemadas.
Asimismo, el SNMF informó en su reporte que el Ministerio de Ambiente realizará una fuerte inversión la recuperación de bosques de suma importancia para la biodiversidad de la provincia.
“Tras los incendios forestales en Corrientes, se vieron afectados varios bosques de gran valor para la biodiversidad del macrosistema Iberá, cuya recuperación se da de manera más pausada que pastizales y humedales. Dicho fortalecimiento a los viveros incluye la compra de insumos y bienes, la articulación con organizaciones vecinales y ONG de la zona, y acciones de educación ambiental. La inversión del Estado nacional para esta iniciativa alcanzaría los 40 millones de pesos”, informó el organismo en el reporte.
A principio de marzo, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, había informado que la lluvia había logrado apagar todos los incendios existentes en la provincia desde mediados de enero.
“¡Excelentes noticias!”, anunció Valdés en el inicio de su comunicado a través de un posteo en su cuenta oficial en Twitter. “Tras más de dos meses de sequía, volvió a llover en Corrientes y la provincia ya no cuenta con NINGÚN foco de incendio activo”, aseguró el gobernador local.
Sin embargo, desde el propio Ministerio de Ambiente lo contradijeron en su momento: “Muchos focos están activos, aunque controlados, pero no podemos decir que la cuestión terminó definitivamente”, afirmó el secretario de Control y Monitoreo Ambiental del Ministerio, Sergio Federovisky.
Así y todo, algunos medios locales indicaron en la noche del sábado que había focos de incendios cada vez más grandes en la zona norte de Corrientes, más precisamente en la región de Cerrudo Cue. Las autoridades provinciales indicaron que esos fuegos están contenidos pero todavía no controlados.
En tanto, en el informe gubernamental nacional aún no se hizo referencia al problema suscitado en esa zona de la provincia.
Según el reporte, el organismo agregó que fueron contenidos los incendios en la localidad santafesina de Vera y en el departamento de Fray Mamerto Esquiú, Catamarca.
Asimismo, las llamas localizadas en el Complejo Lago Martín, ubicado en la ciudad rionegrina de Bariloche, fue contenido. Allí, el ente envió 32 brigadistas y personal de apoyo, 5 aviones (4 hidrantes y 1 observador) y 3 helicópteros que operan desde las bases de Bariloche y El Bolsón, 2 embarcaciones y móviles de apoyo.
También en la localidad de Aluminé, Neuquén, los focos ígneos fueron contenidos, con la ayuda de helicóptero para combatir el fuego enviado por el SNMF.
Con información de Télam
SEGUIR LEYENDO: