Eduardo Eurnekian fue galardonado con la Medalla de Oro por la Americas Society

El fundador de Corporación América recibió la máxima distinción de la influyente organización con sede en Nueva York. En su discurso, agradeció el reconocimiento y señaló su mirada sobre los principales desafíos que enfrenta la región

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Eduardo Eurnekian, uno de los galardonados por la Americas Society en la noche de Nueva York, pronuncia su discurso de agradecimiento (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
Eduardo Eurnekian, uno de los galardonados por la Americas Society en la noche de Nueva York, pronuncia su discurso de agradecimiento (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)

El empresario argentino Eduardo Eurnekian fue galardonado este martes por la Americas Society, una de las organizaciones más influyentes de Estados Unidos y el continente, en un encuentro que contó con la presencia de importantes referentes del ámbito empresarial, funcionarios, diplomáticos y referentes sociales. El reconocimiento fue entregado a su aporte como un hombre fundamental en el empresariado latinoamericano y por su reconocida filantropía tanto en la región como en el mundo.

Eurnekian recibió la Medalla de Oro por parte de la institución fundada en 1965 por David Rockefeller “en mérito a su trayectoria empresarial y filantrópica”, según señalaron desde la organización. El acto de premiación estuvo encabezado por Susan L. Segal, presidenta y CEO de Americas Society y del Council of the Americas y tuvo lugar en uno de los lugares más icónicos de Nueva York: Tavern on the Green, en pleno Central Park.

El presidente colombiano, Iván Duque, uno de los galardonados por la Americas Society en la noche de Nueva York (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
El presidente colombiano, Iván Duque, uno de los galardonados por la Americas Society en la noche de Nueva York (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)

El presidente y fundador de Corporación América -uno de los conglomerados económicos más importantes de América Latina- fue una de las tres personalidades que recibieron una distinción en la noche de Nueva York: los otros dos fueron el presidente de Colombia, Iván Duque y Pilar Arosemena de Alemán, fundadora de Biomuseo, en Panamá.

La Medalla de Oro constituye el galardón más importante de la Americas Society, una entidad fundada hace 55 años por Rockefeller y que reúne cada año a los más poderosos e influyentes empresarios de todo el continente. Al momento de explicar las razones que condujeron a decidir distinguir al empresario argentino, Segal señaló: “Eduardo Eurnekian es una persona extraordinaria. Y cuanto más uno conoce a esta persona tan celosa de su privacidad, más conoce cuán profundo es. Es un emprendedor serial. Su éxito como empresario es indiscutible, pero esa no es su esencia. Eduardo es un pensador global, un visionario y, por sobre todo, un estadista del sector privado”.

La CEO de Americas Society explicó además, lo que para ella es la base del éxito de Eurnekian: “Entiende que la innovación es al mismo tiempo disrupción y construcción del futuro”. “Pero lo que mejor puede definir a Eduardo Eurnekian como empresario es que siempre tiene en cuenta que para generar un verdadero impacto con sus negocios antes hay que tener en cuenta cuánto puede ese negocio devolverle a la sociedad, a la gente”, remarcó Segal.

Eduardo Eurnekian, presidente y fundador de Corporación América, recibe la Medalla de Oro de la Americas Society de manos de Susan L. Segal, CEO de la institución (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
Eduardo Eurnekian, presidente y fundador de Corporación América, recibe la Medalla de Oro de la Americas Society de manos de Susan L. Segal, CEO de la institución (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
Pilar Arosemena de Alemán recibe su Medalla de Oro (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
Pilar Arosemena de Alemán recibe su Medalla de Oro (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)

Americas Society es una institución dedicada a la educación, el debate y el diálogo los distintos países que componen el continente. Su tradicional sede se encuentra emplazada en el número 680 de Park Avenue, en el Upper East Side de Manhattan. La organización promueve la comprensión y el debate sobre los problemas económicos, políticos y sociales comunes de América Latina, el Caribe y Canadá.

El tradicional edificio donde funciona la institución está inscrito en el Registro Nacional de Lugares Históricos. Antiguamente había sido propiedad del banquero y filántropo Percy Rivington Pyne antes de servir como Misión Soviética ante las Naciones Unidas hasta su uso actual. Junto con los edificios vecinos del Instituto Español Reina Sofía y del Consulado General de Italia, la casa constituye uno de los pocos conjuntos arquitectónicos unificados que quedan en Park Avenue.

Eduardo Eurnekian, presidente y fundador de Corporación America junto a Susan L. Segal, presidenta y CEO de Americas Society (Infobae)
Eduardo Eurnekian, presidente y fundador de Corporación America junto a Susan L. Segal, presidenta y CEO de Americas Society (Infobae)
Eduardo Eurnekian, Susan Segal, Iván Duque, Pilar Arosemena de Alemán y Paul Freedman (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)
Eduardo Eurnekian, Susan Segal, Iván Duque, Pilar Arosemena de Alemán y Paul Freedman (Paula Abreu Pita/Roey Yohai Photography)

El discurso completo de Eduardo Eurnekian

Señoras y señores, buenas noches.

Me siento profundamente honrado y agradecido por haber sido elegido como destinatario de la Medalla de Oro de la Americas Society. Con un agradecimiento especial a mi querida amiga Susan, por su amable presentación.

También deseo felicitar a los demás galardonados esta noche:

Pilar Arosemena de Alemán

El presidente Iván Duque

Recibir la Medalla de Oro de la Americas Society me inspira a continuar con los valores que comparto con esta distinguida organización: el desarrollo económico y social, los mercados abiertos, el Estado de Derecho y la democracia a lo largo del Hemisferio Occidental

Esta noche, juntos en esta sala, estamos unidos en la idea de quiénes somos como continente.

Hoy, hace exactamente quinientos veintinueve años, Cristóbal Colón introdujo a nuestro continente (el segundo más grande del planeta, con un 28% de la superficie terrestre) al resto del mundo, situándolo en el mapa. Hoy, ese mapa del continente americano incluye 35 países.

Quizás esta noche podríamos aprovechar para preguntarnos juntos cómo se relacionan efectivamente cada una de esas 35 naciones americanas con el resto de la región.

Y dentro de cada una de esas naciones, las preguntas que deberían hacerse son:

- ¿Son escuchadas las voces de las minorías?

- ¿Se tienen en cuenta sus intereses, con acuerdos basados en iniciativas que también puedan respaldar?

Más concretamente, Colón abrió la puerta a la llegada de la civilización europea, y muchos de nosotros estamos hoy aquí, porque esta tierra acogió a inmigrantes de Europa, pero también -y cada vez más- de muchos otros rincones del mundo.

Estos inmigrantes superaron fuertes diferencias y se asimilaron a las sociedades de acogida, al tiempo que dieron lugar a una nueva cultura.

“El hombre vive una vida realmente humana gracias a la cultura”, es algo que debemos salvaguardar constantemente y nunca dar por sentado.

Pero eso no es todo: también debemos consolidar nuestras democracias y modernizar nuestras economías. En ese sentido, debemos dar las gracias a las empresas, que traspasan las fronteras, y a los individuos, que marcan la diferencia en diversos ámbitos.

Pero la democracia está hoy amenazada por los estallidos de descontento social y las oleadas de ideologías populistas.

Los trágicos y repetidos conflictos del último siglo demuestran que tanto la acción como la reacción forman parte del proceso evolutivo de la historia.

Es esta tensión la que a menudo conduce al desarrollo y a la innovación y es también una expresión de las libertades que disfrutamos.

En este contexto, la capacidad de las naciones para actuar se ha visto desbordada, tanto desde dentro como desde fuera ante retos globales como:

- el cambio climático y la depredación de los océanos

- las enfermedades y pandemias

- las migraciones humanas masivas

- las amenazas a la ciberseguridad

- una nueva carrera armamentística

- el terrorismo

Como sabemos, la tecnología ha adquirido recientemente vida propia, por ejemplo, a través de la ingeniería genética.

Los Estados no son los únicos que influyen en este proceso evolutivo. Existe el riesgo de que cualquier individuo se haga con su control y multiplique cualquier amenaza potencial.

Esta falta de control puede significar una aceleración, en el camino, hacia la autodestrucción.

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