Mensajes satánicos y pacto con el diablo: la campaña que casi hunde la carrera de Xuxa

La leyenda nació en 1991, en un pequeño estudio de radio de Antofagasta, Chile. El conductor del programa Los cariñositos, Félix Acorio Gómez, recibió un extraño mensaje de una oyente. “Tengo miedo, con mi hijo estábamos escuchando a Xuxa hasta que la cinta se enrolló y la canción se escuchó al revés… y apareció un mensaje satánico”. El locutor le pidió al operador que pasara el tema Todo el mundo está feliz al revés. Y en la radio se quedaron sorprendidos cuando les pareció escuchar la frase: “El diablo es magnífico”.

Ese día llamaron más de veinte madres y padres para decir que habían roto los casettes de Xuxa y que habían decidido prohibirles a sus hijos que vean su programa, que se transmitía en 17 países. Si bien no era una época de redes sociales, la noticia se viralizó. Primero fue difundida en un informe por la Radio Nacional de Santiago de Chile y trascendió las fronteras.

“Esto empezó en Chile”, reconoció Xuxa en una entrevista exclusiva que le dio a la revista Gente, cuya edición 1359, del 8 de agosto de 1991, le dedicó un informe pormenorizado al tema. Es más: en la tapa aparece una foto de Xuxa dada vuelta y el título “Xuxa y el diablo”. Por entonces no fue una noticia pintoresca o bizarra.

Lo que pareció ser una campaña contra Xuxa, impulsada en Chile, Brasil y Argentina, afectó a miles de sus fans, provocó una caída en las ventas de sus discos y la amenaza de prohibir su programa.

Y, por supuesto, afectó a la cantante.

Los “expertos en satanalogía” dijeron que el saludo que hacía con tres dedos (lenguaje para sordomudos que significa amor) era el tridente de Lucifer, que sus dorados alamares de sus chaquetas eran una versión del 666, el anticristo, y que la reiteración en una de sus canciones de la palabra “indios” quería decir “sin Dios”. No sólo eso: afirmaron que Xu y Xa son dos entidades maléficas del umbandismo.

Ante la periodista Renee Salas, Xuxa lloró y se refirió al tema: “Esto es una locura. En el nordeste de mi país dijeron que una muñeca mía había llorado sangre. Y también dijeron que una chica que escuchaba mis canciones al revés con un walkman cayó muerta. Todo esto es una porquería. Es una obra de enfermos, de fanáticos. Pero hay más: en Chile llegaron a decir que en mis trajes hay símbolos satánicos. Sacaron una foto donde yo tenía bordadas unas uvas. Otro de mis trajes tiene un corte en la cintura y dijeron que eran las puntas de un cuerno y que el nombre Xuxa, que me lo puso mi hermano cuando yo tenía dos años, era una cruz al revés. ¿Cómo es posible que se invente todo esto?”

Además dijo que iba a la Iglesia, que creía en Dios, que toda su familia era católica. Y que ella, “desesperadamente”, había escuchado las canciones al revés con su maestra de castellano y su coreógrafo. “No entendimos nada. Yo en Brasil tengo un juego en mi programa: la música al revés. Se les pasa a los chicos un pedacito de una canción al revés y tienen que adivinar qué canción es. Es muy divertido para ellos. Pero la campaña no empezó ahí. Empezó en Chile dos años después”, dijo Xuxa.

En las calles de Chile, Brasil, Uruguay y Argentina -sobre todo en el microcentro porteño- llegaron a repartirse panfletos titulados “Cuidado con Xuxa” con este texto: “Se ha constatado la existencia de mensajes satánicos en el reverso de la cinta de su cassette de mayor éxito, con frases como ‘Adoren al diablo’, ‘Condenado Jesucristo’, ‘El que yo conozco me ha dado el privilegio de ser mujer suceso’, y ‘Jesús, el mundo te condena’”.

Lo que le pasó a la artista le ha ocurrido a grandes estrellas o bandas de la música mundial. Llegó a instalarse la teoría de que los Beatles contenían mensajes satánicos. Como ejemplo ponían al asesino de John Lennon, Mark Chapman, y a Charles Manson, el líder de la secta asesina, quien confesó que inspiró sus matanzas escuchando Helter Skelter.

Xuxa había logrado superar el rol de pareja de dos celebridades del deporte: el piloto de Fórmula 1 Ayrton Senna y del astro del fútbol Pelé. Su popularidad en Brasil como reina de los programas infantiles la llevó a tener su propio Show de Xuxa en la Argentina. Se emitió por Telefé desde el 6 de mayo de 1991 al 31 de diciembre de 1993. En la misma nota con Gente, Xuxa dijo que la habían amenazado con secuestrarla. Vivía con miedo, custodiada. “No quiero que paguen el rescate. Si me secuestran, prefiero no volver porque ya no sería la misma”, reveló.

Sobre el “diablo-gate” dijo: “Estoy decepcionada. No quise hablar de esto, pero no me gustaría que siguiera creciendo esta ola. ¿Sabés por qué? Porque si las madres y los padres empiezan a hablar, si la Iglesia empieza a creer, si las personas lo repiten, mi público, el único que me interesa, los chicos pueden llegar a pensar también que todo esto es cierto. Y para mí eso sería terrible. Porque yo trabajo para los niños. Los adultos no me importan”.

En algunas escuelas católicas se les dijo a los alumnos que no la escucharan porque ella había hecho un pacto con el diablo. Xuxa lloró varias veces en la nota.

El veredicto religioso

Cuando el tema salió a la luz, en Brasil hubo voces dispares. El pastor Josue Yrion Anastasia se dedicó en un sermón a despedazar la integridad de Xuxa. Mientras sostenía en su mano unos panfletos contra la proclamada “Reina de los bajitos”, dijo a los gritos a sus fieles desde un escenario: “Xuxa es el demonio. Comía pedazos de cadáveres de niños y cada vez que ponía su mano en la cabeza de un niño los consagraba al demonio. Era la hechicera. La satanista. La diabólica. Vendió el alma al diablo por 100 millones de dólares. Todo lo que tenga el maldito nombre de esta mujer sáquenlo y quémenlo en la hoguera para la gloria de Dios”. Luego de ese discurso, se escuchaban aplausos.

En cambio, el padre Eduardo García -encargado del Equipo Arquidiocesano de Pastoral Infantil de Capital Federal- salió en respaldo de la cantante y actriz. Destacó que el mensaje de Xuxa contra la droga y la explotación infantil es muy positivo. Y que en Brasil su campaña por la vacunación tuvo un 90% de recepción. Y que todo lo que hace con los chicos y chicas con síndrome de Down, con niños ciegos o en silla de ruedas, “es maravilloso”.

“En los medios de comunicación -dijo el sacerdote- existen campañas. De la misma forma que levantan a alguien, lo pueden hundir. Con Xuya están haciendo esto último. Creo que todo este caso es una mezcla de envidia por el éxito de un extranjero y algo más grave: hacer que la gente no mire donde debe mirar. Lo diabólico es meter miedo. Pablo VI dijo que la primera victoria del demonio es hacernos creer que no existe. Yo agrego que la segunda victoria es hacernos buscar lo demoníaco donde no está. ‘El que no está conmigo, está contra mí’, dijo Jesús. Nadie puede estar con Dios y contra Dios al mismo tiempo. Hay que buscar lo demoníaco donde está: en la droga, en la injusticia social y en la hipocresía. No en Xuxa”.

El escritor Víctor Sueiro también acudió en defensa de Xuxa. Considerado católico, destacó que Xuxa cree en Dios, que maneja en Brasil una fundación que ayuda a los niños, en su programa ataca a la droga y ha donado considerables cantidades de dinero a instituciones infantiles argentinas, como por ejemplo Cáritas. “El demonio está en los asesinos, en los violadores, en los corruptos, en los hipócritas. El Cardenal Antonio Quarracino, hablando del Día del Niño, recordó aquello del Señor: ‘Aquel que escandalizare a un niño más le valdría atarse al cuello una rueda de molino y arrojarse al mar´. Una de las más duras frases del Evangelio. ¿No serán los que acusan a Xuxa los que están escandalizando a los niños”.

El veredicto técnico

En el mismo informe, se recurrió a dos expertos en sonido: Osvaldo Acevedo, gerente de la mítica ION, y Luis Alberto Sarmiento, de BMG-RCA. Ambos fueron concluyentes: el supuesto mensaje satánico de la canción de la Danza de Xuxa no era más que una coincidencia fonética. Comprobaron que no fue grabado con intención.

“Si las palabras ‘el diablo es magnífico’ estuvieran grabadas al revés con premeditación, esa parte de la canción al derecho deberían sonar como un montón de sonidos indescifrables, sin embargo se entiende que pasado normalmente, Xuxa pregunta a su público: ‘Entonces, ¿qué vamos a bailar?’ Por lo tanto, no hay mensaje grabado intencionalmente”, dictaminó Acevedo.

Para el especialista, que ha escuchado miles de canciones de manera profesional y técnica, todo no es más que una funesta casualidad fonética. “Es una cuestión de escuchar lo que se quiere escuchar. Si en lugar de magnífico quisiéramos oír malísimo, sería lo mismo. Es un asunto de sugestión”.

Y el análisis fue pormenorizado. “Entonces, ¿qué vamos a bailar?”, pregunta Xuxa. En su fonética textual quedaría de este modo: “Intonces que vamos a bailaaar”. Al revés sería: “Raaaliab a somav ec sesnotni”. Que con el pasaje invertido, y siguiendo la fonética, coincide con el mensaje.

1) Raaaliab a somav ec sesnotni

2) Eee liab o sun/ma g ni

3) El diablo es un mag ni

Para el hombre cuyo oficio es escuchar temas una y otra vez, había que tener en cuenta que Xuxa cantaba y hablaba con un fuerte acento portugués, por lo que los sonidos no son puros, las “a” se confunden con las “e” y lo mismo las “e” con las “i”, como “intonces”.

El mismo Acevedo grabó la frase de la canción. Y al pasarla al revés reprodujo casi la misma oración “diabólica”, salvo que no le salió el “nifico” de “magnífico” porque no pudo reproducir el portugués de la cantante brasileña. Luis Alberto Sarmiento, director del sello que edita los discos de Xuxa, le encomendó a un técnico, sin decirle de qué se trata que escuchara 25 veces esa canción al revés: “No pudo entender nada”.

De ese estudio sacó tres conclusiones:

1) El mensaje no es tal ni fue grabado al revés adrede ni nada que se le parezca.

2) La interpretación “El diablo es magnífico” no se entiende si no se le dice al que escucha qué es lo que exactamente va a escuchar.

3) Cualquier persona que se grabe y pase al revés la frase “entonces qué vamos a bailar” imitando el tono y la fonética de Xuxa sonará igual.

“Esto es absurdo. Se han vendido 600 mil discos de Xuxa y nunca recibimos una queja. Esto no tiene ningún sentido”, afirmó Sarmiento.

El affaire “satanás” se terminó por diluir como una leyenda que sólo intentó causar daño a Xuxa, pero terminó por fortalecerla. Nada pudo con su éxito internacional. En 1992 realizó tres shows en simultáneo en Argentina, Brasil y España para una audiencia de 200 millones de personas. La revista People la eligió como una de las 50 personas más bellas del mundo (fue la primera artista latina en aparecer) y entre las más adineradas de Forbes. Hasta Michael Jackson le propuso matrimonio. Pero ella lo rechazó. De buena relación con el por entonces presidente argentino Carlos Menem, quien la invitaba a ver películas, la bella actriz y cantante admitió que le gustaba Marcelo Tinelli, pero el romance nunca se concretó.

A 30 años del incidente que amenazó con hundir la carrera de Xuxa, la cantante tiene 58 años y no se dedica más al público infantil. En una de las últimas entrevistas que dio, como si fuera una manera de despejar las dudas sobre sus creencias, contó un suceso místico.

El día de su nacimiento, el 27 de marzo de 1963, en Santa Rosa, Río Grande del Sur, su vida y la de su madre corrieron peligro. Es por eso que Luis Floriano Meneghel, su padre, se encomendó a la Virgen de Gracia para pedirle que ellas sobrevivan. Y prometió llamar a esa niña con el nombre de esa santidad. Y fue así que Xuxa se llamó Marí de Gracia. La mujer que fue acusada falsamente de hacer un pacto con el diablo lleva el nombre de una Virgen.

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