La festividad de Sucot, Fiesta de las Cabañas, que comienza hoy por la noche y se celebra hasta el 28 de septiembre, recuerda las nubes de la gloria que rodearon y cubrieron a los judíos durante los 40 años en que atravesaron el desierto del Sinaí para llegar a la Tierra Santa. Se festeja esta protección de Di-s contra los peligros reafirmando la confianza en Él morando en una Sucá, una choza de construcción temporal cubierta con un techo de ramas. Por siete días y noches se comen todas las comidas en la cabaña y se vive como si fuera el hogar.
Otra tradición de Sucot es la de las cuatro especies: etrog, cidra, que es una fruta con fragancia que posee una gruesa cáscara blanca. La lulav, que es la rama de palmera. Tres hadasim, que es la rama de mirto, y dos aravot, que son las ramitas de sauce. Cada día de la festividad se toman con las manos las cuatro especies y se recita una bendición sobre ellas. Las especies representan a los varios tipos y personalidades del pueblo judío, acentuando así su unión.
Sucot también se llama la época de Nuestra Alegría. Durante cada noche, las gozosas celebraciones evocan los joviales festejos en el santo templo, en el que se llenan las sinagogas y las calles con canciones, música y bailes. El séptimo día de Sucot se llama Hoshaná Rabá o Gran Salvación, cerrando el período del juicio divino comenzado en Rosh Hashaná, el Año Nuevo Judío.
A partir de mañana, martes 21, y hasta el 28 de septiembre, habrá Sucot para visitar en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires. Toda la información sobre las direcciones y horarios se encuentra en shofarargentina.com
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