La Unesco fijó el 17 de mayo como una jornada para recordar “el reducir, reutilizar y reciclar’', con vistas a mejorar el medio ambiente y lo catalogó como el Día Mundial del Reciclaje. En ese contexto, la Secretaría de Ambiente de la ciudad de Buenos Aires ofrece a los vecinos la posibilidad de dar un nuevo destino a los residuos de uso cotidiano que, si no son tratados en forma adecuada, pueden resultar nocivos para el ambiente.
Solo en los primeros meses de este año, se recuperó y dispuso de manera ambientalmente segura cerca de 1700 litros de aceite vegetal usado y más de 14 toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, pilas y “Botellas de Amor”.
“Desde 2007, llevamos adelante una fuerte política ambiental con foco en la economía circular que se sostiene en la ampliación y la mejora del sistema de reciclado. Tanto las pilas, como el aceite vegetal usado, los aparatos eléctricos y electrónicos y los CD impactan en el cambio climático. En la Ciudad son responsables del 14% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Por eso, adoptar los principios de la economía circular nos permite avanzar hacia el compromiso que tomamos en 2017: ser una ciudad carbono neutral, resiliente e inclusiva para 2050”, explicó Eduardo Macchiavelli, secretario de Ambiente de la CABA.
La propuesta es recuperar los desechos y, una vez logrado, son procesados y se transforman en materia prima de gran valor para la industria. Entre los distintos tipos de residuos domiciliarios están los considerados “especiales” ya que exigen un tratamiento específico y son un claro ejemplo de la economía circular.
Pilas
La recolección y tratamiento de pilas se llevan a cabo bajo el principio de la “Responsabilidad Extendida del Productor”, por el cual los productores e importadores deben hacerse responsables por sus productos hasta el final del ciclo de vida.
A su vez, la Ciudad se comprometió a disponer espacios de recolección de pilas, por lo que se las puede llevar a los puntos verdes fijos y móviles, a las estaciones de servicio Axion y farmacias del Dr. Ahorro. Los vecinos pueden acercar sus pilas a los centros de recepción incluidos en este listado de mapas de la web del Gobierno porteño, aquí.
En todos los puntos se reciben pilas comunes y recargables, cilíndricas, prismáticas 9v y botón de las siguientes marcas: Megalite, Energizer, Eveready, RayoVac, Varta, Duracell, Panasonic, Makao, Plus Makao, Sony, Fulltotal, Simplicity, Maxell, Murata, Sanyo, GP, Vapex, Safety Energy, Vinnic, Saft, Red Power, Arts, Euroenergy y Renata.
Las pilas son consideradas residuos de tratamiento especial porque contienen sustancias contaminantes para el ambiente. Por esto, es necesario retirarlas del circuito de disposición de residuos y tratarlas de manera segura. Durante lo que va de este año, se recuperaron 1,5 de toneladas de pilas.
Aceite vegetal usado
Los aceites vegetales usados (AVUs) provienen o se producen a partir de la cocción o preparación mediante fritura total o parcial de alimentos. Un litro de aceite usado contamina hasta mil litros de agua, lo que equivale a la cantidad de agua que consume una persona en 14 años.
De acuerdo con los registros de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), el consumo total de aceites por parte de los porteños supera los 61 millones de litros al año.
Los vecinos pueden llevar el aceite vegetal usado a los puntos verdes fijos y móviles para darles un adecuado tratamiento convirtiéndolo en biodiesel. El aceite debe ser entregado frío, en botellas de plástico limpias y secas con la tapa bien ajustada.
Además, la industria y los restaurantes deben disponer este producto de manera segura. Para eso, cuentan con un servicio de recepción y transporte diferenciado del circuito domiciliario. Durante el 2021, se recuperaron 1672 litros.
Aparatos eléctricos y electrónicos
Los aparatos eléctricos y electrónicos son los pequeños electrodomésticos hogareños como notebooks, celulares, cámaras, radios, teléfonos, teclados, mouse, relojes, controles remotos, reproductores de DVD, MP3, MP4 y MPGE, videojuegos, parlantes, auriculares, planchas, licuadoras, planchitas y secadores de pelo, entre otros.
Estos aparatos pueden ser tratados de manera tal que se logra recuperar cerca del 90% de sus componentes, entre estos: plásticos y metales como oro, plata, cobre, aluminio. Solo una pequeña fracción de estos equipos tiene componentes peligrosos que deben ser gestionados adecuadamente.
La Ciudad los recibe en los puntos verdes fijos y móviles, son tratados a través de organizaciones que se dedican a este rubro. Durante el 2021, se recuperaron 8,54 toneladas.
CDs, DvDs y paraguas
Hasta el 26 de junio, y solo en los puntos verdes móviles, la ciudad recibe CD, DvD y paraguas para acompañar el desarrollo de emprendimientos que le puedan dar un nuevo uso.
Esta iniciativa se lleva adelante con el Club Social de Costura que se encargará de reutilizar la tela de los paraguas haciendo prendas, mochilas y sombreros tipo “piluso”. En el caso de los CD y DvD, la artista plástica Mora Verón los incorporará en sus obras.
Esta iniciativa comenzó a principios del mayo y hasta el momento se recuperaron 15 paraguas y 371 CD´s.
“Botellas de amor”
La Ciudad colabora con el proyecto Botellas de Amor que reúne botellas PET rellenas de plásticos de un solo uso que luego la Fundación Regenerar utiliza para producir madera plástica que se destina a la construcción de bancos, mesas, composteras, juegos infantiles y cestos, entre otros productos.
A través de este proceso se recuperan y reciclan plásticos que actualmente no cuentan con una industria que los recicle, entre ellos, los empaques de comidas, snacks, golosinas, cepillos de dientes, sorbetes, etc. Durante el 2021 se recuperó 4,02 toneladas de este tipo de residuos.
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