Cómo es el duro entrenamiento del Grupo Especial de Rescate, la unidad de elite de los bomberos que actúa en las peores catástrofes

El curso para formar parte de Grupo Especial de Rescate (GER) dura siete semanas y se le enseña a los aspirantes rescates acuáticos, tácticos y de alturas como también en derrumbes, incendios e inundaciones. Así se preparan quienes dejan todo para salvar vidas

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Así es el entrenamiento del Grupo Especial de Rescate de Bomberos de la Ciudad.

Están en medio del riesgo, en siniestros y catástrofes, entran en acción cuando hay situaciones límites de rescate o cuando la fuerza que interviene necesita auxilio para poner vidas a salvo. Saben cuándo van a entrar en acción, pero no cuándo terminarán su tarea. Están listos cada vez que, como dicen, se enciende la “luz naranja” que alimenta la esperanza ante un momento crítico.

El Grupo Especial de Rescate fue creado en la década del ’80 cuando el cuerpo de Bomberos se vio superado en situaciones no convencionales. Desde entonces reúne en una unidad operativa todos los conocimientos y materiales necesarios para afrontar incendios y rescates en planos elevados, espacios confinados o búsquedas subacuáticas, entre otras tareas.

Ser miembro del Grupo Especial de Rescate de Bomberos de la Ciudad requiere de una exigente preparación, a tono de los riesgos que afrontarán. Siempre, en situaciones límites: consta de 35 clases en la que los postulantes deberán aprobar diferentes ejercicios para ganarse el prestigio de formar parte de una rama clave de la fuerza y poder así trabajar en situaciones límite de salvamento de personas.

El curso para ser parte
El curso para ser parte del G.E.R dura siete semanas y se le enseña a los aspirantes todo tipo de rescates tanto acuáticos, tácticos, técnicos y rescate de alturas como también en derrumbes, incendios e inundaciones, entre otras cosas. (Prensa GCBA)

El curso dura siete semanas y cada una tiene diferentes ejercicios. “Se arranca con pruebas básicas de cuerdas, los primeros nudos y el primer acercamiento a un rescate en altura. La segunda semana es de cuerdas avanzadas, donde ya se ven técnicas de rescate de suicidas, trabajo con péndulo y descenso con equipos respiratorios. Luego viene una semana de rescate técnico y se trabaja con sistema de trípode y canastos de rescate bajo normas internacionales de seguridad”, explicó el comandante Flavio Chiappetta, jefe de la Brigada de Rescate del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad.

Tras ese entrenamiento, sigue una semana en estructuras colapsadas. “Es una especialidad que tiene el Grupo de Rescate que asiste ante una situación de derrumbe y búsqueda de víctimas sepultadas”.

En la séptima semana, los aspirantes a integrar el GER deberán hacer distintas pruebas, un ejercicio grupal y otros individuales. También tendrán que hacer nado en largo en el Río de la Plata. “Aquí se trabaja con helicópteros de Policía de la Ciudad”, comentó Chiappetta.

En la séptima semana, deberán
En la séptima semana, deberán hacer distintas pruebas, un ejercicio grupal y otros individuales. También deberán hacer nado en largo en el Río de la Plata. (Prensa GCBA)

Pueden aspirar a ser miembros mujeres y hombres bomberos con un año de servicio o miembros de otras fuerzas. Se los evalúa por medio de exámenes físicos y pruebas técnicas, en las que los postulantes son exigidos al máximo. Solo 35 llegan a la prueba final y quienes la superen se convertirán en especialistas en rescates con cuerdas, acuáticos, técnicos y en estructuras colapsadas.

El GER entra en acción para salvamentos en altura, salvamentos acuáticos, estructuras colapsadas, derrumbes, incendios donde haya personas atrapadas y todo lo que tenga que ver con personas en peligro que no puedan ser rescatadas por fuerzas convencionales”, expresó el subteniente Cristian Damián Atampi, uno de los instructores del curso, que también aseguró que “para formar parte del GER, la persona tiene que ser completa: tiene que estar muy bien físicamente y mentalmente, donde el estrés no la afecte para realizar una tarea compleja. El GER es un estilo de vida, es algo muy complejo, para nosotros es orgullo, tenemos un sentido de pertenencia y exigencia constante”.

Lo mismo opinó el bombero e instructor Adrián Chiardi y contó que en el entrenamiento “se busca que los aspirantes se superen a sí mismo, que estén mentalizados en que no van a saber cuándo va a terminar una intervención sino solamente cuándo va empezar, porque es la propia la intervención la que dispondrá el tiempo. Y físicamente se los lleva más allá de lo que pueden dar”.

El curso para ser parte
El curso para ser parte del G.E.R dura siete semanas y se le enseña a los aspirantes todo tipo de rescates tanto acuáticos, tácticos, técnicos y rescate de alturas como también en derrumbes, incendios e inundaciones, entre otras cosas. (Prensa GCBA)

Respecto a las intervenciones que debieron tener en 2020, y especialmente en la cuarentena, Chiappetta dijo: “Durante el año de la pandemia se tuvo un promedio de un rescate por semana y el 95% de ellos fueron exitosos; es decir, que se pudo rescatar a la persona o reducir al suicida con las intervenciones”.

A la espera de ser uno de ellos, el subteniente Leonardo Falcón, miembro del cuerpo de Bomberos de la Ciudad en la Estación Novena de Versalles e integrante del curso, espera con gran ilusión ser parte del GER y vestir el traje naranja que identifica al Grupo Especial de Rescate, lo que ve más cerca luego de aprobar la prueba de cuerdas de la segunda semana de entrenamiento. “Pertenecer al GER significaría llegar a lo máximo en el cuerpo de Bomberos, es la mayor exigencia teórica-práctica que uno puede tener”, sostuvo emocionado.

”El GER es un estilo
”El GER es un estilo de vida, es algo muy complejo, para nosotros es orgullo, tenemos un sentido de pertenencia y exigencia constante”. Prensa GCBA)

“Lo más importante de este trabajo es el cariño que hay que tener por esta tarea, con eso se lo pasa bien y se trabaja con gusto, sino no se puede estar porque la exigencia que lleva es grande. Fijate que en el curso se escribieron 35 aspirante y de ellos quedaron nueve”, finalizó uno de los bomberos que participó de muchos accidentes y siniestros fatales, como el incendio de la perfumería de Villa Crespo.

La dificultad se palpa desde que entran: para quienes desean ser miembros, las pruebas son de una gran exigencia física. Y queda demostrado en que todos los días los alumnos deben ir corriendo desde el lugar de origen (Caballito) hacia los diferentes lugares de prácticas: Barracas, Parque de la Ciudad, Lanús y Ezeiza.

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