10 frases estremecedoras: cuando Videla dijo que dormía tranquilo, sin remordimiento por las personas asesinadas y desaparecidas

Asumió la presidencia de facto el 29 de marzo de 1976, cinco días después del golpe de Estado que derrocó a Isabel Perón. Años después, ya condenado a perpetua, en nueve entrevistas a solas con el autor admitió por primera vez que la dictadura que él había encabezado elaboró y ejecutó un plan sistemático para “eliminar a un conjunto grande de personas”

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Jorge Rafael Videla asumió la presidencia del país el 29 de marzo de 1976, cinco días después del golpe de Estado que derrocó a la presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón, Isabelita (NA)
Jorge Rafael Videla asumió la presidencia del país el 29 de marzo de 1976, cinco días después del golpe de Estado que derrocó a la presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón, Isabelita (NA)

Son diez frases del ex dictador Jorge Rafael Videla, que asumió la presidencia del país el 29 de marzo de 1976, cinco días después del golpe de Estado que derrocó a la presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón, Isabelita. Diez párrafos que describen la dictadura por dentro, desde las primeras reuniones con civiles hasta el respaldo -según Videla- de los factores de poder, entre ellos los medios de comunicación, pasando por la “Disposición Final”: la captura, las torturas, el asesinato y la desaparición de los cuerpos de miles de personas.

El Videla que recuerdo es un anciano muy delgado, levemente encorvado, que rezaba el rosario todas las tardes y comulgaba todos los domingos, y que afirmaba que dormía muy tranquilo, sin ningún tipo de remordimientos por las miles de personas que habían sido asesinadas y desaparecidas durante su dictadura.

“Pongamos que eran siete mil y ocho mil las personas que debían morir para ganar la guerra contra la subversión; no podíamos fusilarlas. Tampoco podíamos llevarlas ante la justicia”. Es una de las frases que puedo citar de memoria, entre las muchas que me impactaron durante las nueve entrevistas que le realicé entre octubre de 2011 y marzo de 2012 para el libro Disposición Final. También las reveladoras frases del dictador están en mi último libro Los 70, la década que siempre vuelve

Los integrantes de la junta militar Jorge Rafael Videla,  Eduardo Emilio Massera y Ramon Agosti, en un acto protocolar luego de tomar el poder en 1976 (NA)
Los integrantes de la junta militar Jorge Rafael Videla, Eduardo Emilio Massera y Ramon Agosti, en un acto protocolar luego de tomar el poder en 1976 (NA)

El ex dictador estaba en su celda en el penal de Campo de Mayo: había sido condenado varias veces a prisión perpetua. Muy lúcido, parecía detenido en el tiempo en el que fue la persona más poderosa del país y contaba los hechos que había protagonizado como si hubieran sido realizados por otra persona, con una precisión y una frialdad llamativas.

A Videla no le gustó Disposición Final. Cuarenta días después de su publicación, envió una carta a La Nación desmintiendo dos de los dichos que yo le atribuía: que los militares habían llegado a la conclusión de que debían matar a 7 mil u 8 mil personas, y que no estuviera arrepentido por su responsabilidad en ese plan de exterminio. Le contesté mostrando las notas con sus declaraciones, que en un exceso de formalismo que me favoreció habían sido firmadas por él con sus iniciales.

De acuerdo con Videla, los generales llegaron al 24 de marzo de 1976 con un consenso básico: tenían que matar a todas las personas que ellos consideraban “irrecuperables”. Fue el golpe de Estado más organizado y previsible de la historia; en los cafés y los bares se hacían apuestas sobre cuándo los militares se levantarían contra el gobierno constitucional de Isabel Perón.

Videla en su celda del penal de Campo de Mayo
Videla en su celda del penal de Campo de Mayo

En las conversaciones el ex dictador preso admitió por primera vez que la dictadura que él había encabezado elaboró y ejecutó un plan sistemático para “eliminar a un conjunto grande de personas”, que estaban detenidas, a merced de los militares, tal como los familiares y amigos de las víctimas y los organismos de derechos humanos siempre denunciaron.

De las nueve entrevistas, estas son las diez frases que rescato para recordar que hace 45 años Videla asumió el poder en la Argentina como presidente de facto y comenzó a ejecutar ese sangriento plan de desapariciones y muertes.

10 frases estremecedoras de un dictador

* “En forma inorgánica, la planificación (del golpe de Estado) comenzó cuando asumo como jefe del Estado Mayor Conjunto (el 4 de julio de 1975) y empiezo a recibir visitas de gente que está interesada en verme. Me enteré después de que también estaban en contacto con la Armada”.

* “No era una situación aguantable: los políticos incitaban, los empresarios también; los diarios predecían el golpe. La Presidente no estaba en condiciones de gobernar, había un enjambre de intereses privados y corporativos que no la dejaban. El gobierno estaba muerto”.

*Nuestro objetivo era disciplinar una sociedad anarquizada; volverla a sus principios, a sus cauces naturales. Con respecto al peronismo, salir de una visión populista, demagógica, que impregnaba a vastos sectores; con relación a la economía, ir a una economía de mercado, liberal”.

*Pongamos que eran siete mil u ocho mil las personas que debían morir para ganar la guerra contra la subversión; no podíamos fusilarlas. Tampoco podían ser condenadas judicialmente. Pasaban a ´Disposición Final´”.

* “Para no generar protestas dentro y fuera del país, sobre la marcha se llegó a la decisión de que esa gente desapareciera; cada desaparición puede ser entendida ciertamente como el enmascaramiento, el disimulo, de una muerte”.

Videla fue encontrado muerto sentado en el inodoro de su celda el 17 de mayo de 2013. Tenía 87 años
Videla fue encontrado muerto sentado en el inodoro de su celda el 17 de mayo de 2013. Tenía 87 años

* “No era que esa decisión sobre el destino de una persona la tomaba un cabo. No: había responsables en cada zona, subzona, área y subárea. Pero, por encima de ello, existía la responsabilidad del comandante en jefe del Ejército, tomada en la más absoluta soledad del mando”.

* “Tuvimos indicios importantes, no probados, del encuentro entre (el almirante Emilio Eduardo) Massera y (el jefe de Montoneros, Mario) Firmenich en París”.

* “Promediando 1978, con sus matices en más o en menos, el objetivo fundamental del Proceso de Reorganización Nacional estaba logrado. El orden había sido recuperado en todos los niveles: militar, político, gremial, económico y social”.

* “No supimos aprovechar esa oportunidad. Los políticos no demostraban mayor prisa por recuperar el poder porque persistía el temor a la guerrilla. Nosotros sabíamos que estaba derrotada y que, en términos militares, había sido aniquilada, pero los políticos no lo sabían con certeza”.

* “Los medios de comunicación fueron favorables al Proceso, sobre todo al inicio. No había problemas con la prensa: no podemos decir que la acción de los diarios impidiera hacer la guerra contra la subversión. Yo diría que no solo los medios sino todos los factores de poder estaban alineados en la guerra contra la subversión”.

Videla fue encontrado muerto sentado en el inodoro de su celda el 17 de mayo de 2013. Tenía 87 años.

*Periodista y escritor, extraído de su último libro “Los 70, la década que siempre vuelve”.

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