Un andinista oriundo de Córdoba fue hallado sin vida a casi seis mil metros de altura en el volcán Ojos del Salado, en Catamarca. El hombre de 37 años había ascendido con cuatros amigos el último fin de semana, se descompensó y desistió de llegar hasta la cima. El grupo con el que viajó lo encontró muerto. Este miércoles comenzó el operativo para descender el cuerpo.
Identificado como Emilio Sella, tras descompensarse el pasado martes, se quedó en una carpa que fue montada a 5.900 metros de altura. El volcán Ojos del Salado se encuentra en el límite entre Argentina y Chile, y su pico más elevado está a 6.891 metros sobre el nivel del mar. Según informó el medio local El Ancasti, pese al cuadro de salud que presentaba el hombre de 37 años, sus compañeros avanzaron en busca de la cumbre.
Al regresar de la expedición, lo encontraron muerto en el interior de su carpa. Inmediatamente el grupo dio aviso al personal de la comisaría de Fiambalá y a Gendarmería Nacional, quienes desplegaron el operativo para descender el cuerpo. El Subcomisario Oscar Barrionuevo, tres guías baqueanos y el jefe de Bomberos Voluntarios comenzaron este miércoles a bajar en camilla al fallecido hasta el campamento base para luego trasladarlo a Fiambalá. Si bien la fuerza de seguridad provincial cuanta con un grupo especial de “Rescate en Alta Montaña”, el mismo tiene base en la localidad de El Peñón, departamento de Antofagasta de la Sierra, por lo que el rescate de los restos podría demorar unas 60 horas en condiciones óptimas.
Tras la muerte de Sella, quedó en la mira el guía de la expedición. A Sebastián García, oriundo también de Córdoba, podría caberle alguna responsabilidad penal ya que ascendió junto a los cuatro andinistas dejando solo al hombre que estaba descompensado. Según fuentes de investigación que hablaron con La Unión, correspondía que el guía se quedará con Sella en el campamento o bien descendieran en busca de ayuda.
Además del personal de seguridad, ayer por la madrugada viajó al lugar una comisión médica desde la capital para examinar el cuerpo, y determinar, una vez que sea rescatado, las causas del deceso. La autopsia se realizará en la morgue del Hospital Dr. Luis Agote.
En redes sociales, familiares y seres queridos, despidieron con emotivos mensajes a “el flaco Sella”. “Gran persona, solidario, compañero”, “te vamos a recordar siempre con lágrimas en los ojos”, fueron algunas de las publicaciones a raíz de su fallecimiento. Sin embargo, hay una que resume su pasión por la actividad en la que perdió la vida: “Abrazo al cielo, donde vos siempre querías tocarlo de alguna manera haciendo lo que tanto te gustaba”.
El año pasado, a fines de noviembre, otro andinista murió cuando escalaba un cerro en Vallecitos a unos cuatro mil metros de altura. Sergio Cano, oriundo de la localidad de San Rafael, al igual que Sella comenzó la expedición junto a otras cuatro personas en el cerro San Bernardo, en Las Heras. El hombre de 50 años también se descompensó: se quedó sin oxígeno, cayó y perdió la vida.
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