Por las mesas del Café Tortoni pasaron Jorge Luis Borges, Federico García Lorca y artistas de la talla de Carlos Gardel. Este sábado, los empleados del mítico local gastronómico se vieron sorprendidos ante el hurto de una de sus piezas fundamentales: la placa conmemorativa que refleja su nombre y la fecha de su fundación, el año 1856.
“Era la placa insignia que está desde que se habilitó el café. Por entonces era obligatorio tener una placa con el nombre de la sociedad a cargo del negocio y a qué se dedicaba el establecimiento. Decía Gran Café Tortoni. Casa fundada en 1858, venta de helados S.R.L”, indicó a Infobae Miguel González, encargado del emprendimiento gastronómico.
La noticia empezó a correr por las redes sociales. Los propios empleados lo informaron, aún acongojados por el robo. “En el día de hoy, a punto de iniciar otro día de trabajo, nos dimos cuenta que la placa fundamental del Tortoni, la más antigua y original, fue robada. El dolor que nos provoca este hurto es inmenso, y más aún luego de un 2020 muy difícil y con un 2021 que tampoco augura un buen pronóstico”, señalaron en un comunicado oficial. “No solemos publicar este tipo de situaciones, pero la verdad que para aquellos que intentamos mantener el Café Tortoni en pie todos los días es un golpe muy difícil de asimilar y nos toca el corazón de manera directa”, agregó el staff del local ubicado en avenida de Mayo 825.
Según cuenta la historia, el primer propietario del negocio fue un inmigrante francés de apellido Touan, quien lo bautizó en honor a un célebre Café Tortoni de París. La fachada que da a la Avenida de Mayo fue obra del arquitecto Alejandro Christophersen, realizada en 1898. El estilo de atención también era europeo, con servicio a la calle como se hacía en París.
Toda la estructura, así como la placa inaugural, es un testimonio histórico de otra Buenos Aires y un paradigma de las cafeterías notables, un símbolo de la gastronomía porteña.
“La placa no tiene valor. Tiene más de 100 años y es irremplazable, como el café mismo. Pensamos encargar una placa nueva pero nunca representaría la tradición del Café Tortoni”, sostuvo Miguel González.
En el equipo del local difundieron rápidamente el hurto. Es que, conociéndose el robo, creen que a quien se haya llevado el objeto le costará revender la pieza patrimonial. Por el momento, se radicó una denuncia en la comisaría de la zona y quedará por delante una investigación criminal que, en principio, revise las cámaras de seguridad para encontrar alguna pista sobre los responsables.
“Es un golpe muy duro, sobre todo para la gente que trabaja acá desde hace muchísimos años. Es como que te corten una parte. Ya nos habían robado una placa otra vez, pero no representaba el valor cultural que tiene ésta”, lamentó González.
Después de un año jaqueado por la pandemia y la caída de las ventas por las restricciones de circulación por el COVID-19, el mítico local sufre un nuevo golpe. Pero resiste, con o sin placa conmemorativa. En 1995, el Café Tortoni fue ungido como un sitio de interés cultural por la Ciudad de Buenos Aires y permanece, fiel al texto conmemorativo, como “el café más antiguo del país, concurrido por destacados artistas, hombres de letras y parlamentarios”.
Seguí leyendo: