Mar del Plata a través de un crucero: un paseo íntimo para descubrir desde el mar la otra cara de La Feliz

A bordo del Anamora, un viaje de una hora y diez minutos se vuelve indispensable para aquel turista que desee observar la ciudad de una manera diferente y conocer sus secretos

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El crucero funciona desde 1990 en el puerto de Mar del Plata
El crucero funciona desde 1990 en el puerto de Mar del Plata

Eduardo Mayer se autodefine como un “marplatense nativo” que describe a su crucero Anamora “como lo que es: una propuesta que realmente entrega una experiencia diferente. No hay ningún otro plan que permita conocer la ciudad desde el mar”.

Y sucede que su propuesta, requerida cada verano por los turistas, se diferencia del resto por ser una opción que expone a La Feliz desde otro aspecto. “Una cara distinta; su parte rocosa, se ven los parques, mucho verde. Es todo realmente muy atractivo para la gente. Pueden ver las actividades en el puerto y todo lo que allí se genera”, explica Mayer a Infobae.

El crucero Anamora funciona desde 1990 y jamás se detuvo. “Para 1998 vivíamos épocas muy buenas, se daban muchos viajes en los cuales no había capacidad. Del 2000 hasta el 2002 fue todo muy malo. Comenzó a remontar en 2005 y tuvimos un crecimiento turístico notable hasta el 2014. Desde ahí comenzó a bajar la actividad”, revela.

El barco posee una capacidad para 300 personas y sale a mar abierto para entregarle al turista una visión diferente de Playa Grande, Varese, Playa Chica y Cabo Corrientes. Primero por el espejo de agua hacia la boca de ingreso formada entre la escollera Norte y la Sur. Luego, el buque se dirige en dirección noreste, en donde es posible ver el Casino Central y el Torreón del Monje.

El viaje tiene una duración de una hora y media
El viaje tiene una duración de una hora y media

“Tenemos tres cubiertas. La superior con solarium y bar tropical; la intermedia con un servicio de cafetería y bar; y la de abajo es una pista de baile con barra”, cuenta Mayer.

También agrega: “Aparte de las excursiones alquilamos el barco para empresas privadas y familiares, congresos y convenciones. Siempre es una alternativa diferente para hacer un evento en el mar, aparecen muchos interesados”.

Por el contexto pandémico el barco puede llevar a bordo hasta 170 personas. Zarpa todos los días a las 11.30, 14 y 16 desde el embarque en la dársena B del puerto (San Antonio Abate y Mariluz II). “Ofrecemos un servicio de bar a bordo. En la parte superior el bar tropical con jugos y licuados, tragos. Adentro hay cafetería, sándwiches, bebidas. Por supuesto que tenemos baños diferenciados y tomamos todos los recaudos sanitarios para cuidar a la gente”, explica el dueño del crucero.

El buque cuenta con tres espacios y permite albergar a 170 personas
El buque cuenta con tres espacios y permite albergar a 170 personas

Mayer continúa: “Cuando llegan tomamos sus datos y al momento de embarcar los sanitizamos. La entrada para los adultos es de $1.400 y para menores de 10 años $900. Lo que también ofrecemos es un traslado desde el centro de la ciudad, ida y vuelta, hasta el puerto. Ese servicio cuesta $100 por persona”.

El empresario indica que a pesar de la baja temporada logran tener días con mucha concurrencia. “Hasta la temporada pasada, que fue un poco mejor de lo que veníamos viviendo, estábamos bien. Pero luego cerrar la ciudad no fue una buena decisión, porque nos perdimos el 24 de marzo de cuatro días (venían 250 mil personas) y Semana Santa (siempre es muy interesante). Nos hubiera ayudado a pasar el invierno”.

El Anamora zarpa tres veces por día
El Anamora zarpa tres veces por día

Y sostuvo: “Ahora empezamos con expectativa en diciembre y estar trabajando nos da esperanzas. Podemos pagarle el sueldo a todos los empleados y eso es fundamental”.

El crucero -de 30 metros de largo y seis de ancho- puede modificar sus recorridos teniendo en cuenta el clima, el viento y el oleaje. El paseo sale con incluso con lluvia y a los turistas se les permite disfrutar del viaje en las distintas cubiertas.

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