El lunes 30 de noviembre se conocieron viejos tuits publicados por el capitán de la selección nacional de rugby, Pablo Matera, con un fuerte contenido xenófobo, misógino y antisemita. El repudio social fue unánime y el tercera línea de Los Pumas tuvo que dar de baja su cuenta en la red social. No fue el único: Guido Petti, segunda línea, y Santiago Socino, hooker, tuvieron que hacer lo mismo.
Se sumaron los casos de la influencer y periodista, Nati Jota, y del conductor de “Últimos cartuchos”, Migue Granados quienes también fueron cuestionados por haber realizado publicaciones con frases racistas, misóginas, gordofóbicas y homófobas.
En este contexto, la red social Twitter decidió actualizar sus reglas contra la conducta de odio. En un extenso comunicado que publicaron en la cuenta @TwitterSeguro sostienen que, si bien alientan a las personas a expresarse libremente, el abuso, el acoso y la conducta de odio continúan sin tener cabida en su servicio.
“En julio de 2019, ampliamos nuestras reglas contra la conducta de odio para incluir el lenguaje que deshumanice a otros con base en su religión o casta. En marzo de 2020, extendimos la regla para incluir un lenguaje que deshumanice por motivos de edad, discapacidad o enfermedad. Hoy, ampliamos aún más nuestra política de conducta de odio para prohibir el lenguaje que deshumanice a las personas por motivos de raza, etnia o lugar de origen”, dice el comunicado.
Para que no queden dudas, se tomaron el trabajo de ejemplificar qué tipo de tuits podrían ser reportados. “Todos los [nacionalidad] son cucarachas que viven del gobierno y tendrían que ser expulsados del país”, sería un caso. “Si una cuenta infringe repetidamente las reglas de Twitter, podríamos bloquearla o suspenderla temporalmente”, advierten.
Infobae se puso en contacto la red social para preguntar qué motivó el cambio en la política. Desde la empresa sostuvieron que la actualización de las reglas “no tiene nada que ver” con los antiguos tuits del capitán de Los Pumas y que el hecho de que lo hayan comunicado unos días después del escándalo es “mera coincidencia”. “Twitter trabaja de forma permanente para mejorar sus reglas y políticas porque su propósito es servir a la salud de la conversación publica”, dijeron a este medio.
Desde la red social dicen que buscan expandir su comprensión de los matices culturales y asegurarse de hacer cumplir las reglas de manera consistente. Asimismo cuentan que, para ampliar sus políticas, se han beneficiado de los comentarios de varias comunidades y culturas que usan Twitter en todo el mundo.
“Muchas personas expresaron inquietudes acerca de nuestra capacidad para hacer cumplir nuestras reglas de manera justa y coherente, por lo que desarrollamos un proceso de capacitación más profundo con nuestros equipos para asegurarnos de que estuvieran mejor informados al revisar los reportes”, explican.
Hacia el final del comunicado, la empresa hace un mea culpa y reconoce que puede haber cometido errores. “Estamos comprometidos a continuar trabajando para fortalecer aún más tanto nuestro proceso de aplicación, como nuestro proceso de apelaciones para corregir nuestros errores y evitar que otros similares continúen”, dicen.
“Sabemos que no tenemos todas las respuestas, por lo que, además de la retroalimentación de las personas, trabajamos en conjunto con nuestro Consejo de Confianza y Seguridad, así como otras organizaciones de todo el mundo para profundizar en su experiencia en esta área”, agregan.
Finalmente, blanquean que, como parte de esta actualización, reunieron a un grupo de trabajo global de expertos externos para que los ayudara a pensar cómo podrían abordar adecuadamente el discurso deshumanizante en torno a categorías complejas como la raza, etnia y lugar de origen.
“Seguiremos construyendo Twitter para la comunidad global a la que sirve y aseguraremos que sus voces ayuden a moldear nuestras reglas, nuestros productos y la forma en la que trabajamos. A medida que buscamos nuevas oportunidades para evolucionar y expandir nuestras políticas para optimizar el manejo de los retos a los que nos enfrentamos, mantendremos al tanto a nuestros usuario sobre lo que aprendemos y cómo planeamos abordarlo en el marco de nuestras reglas. También continuaremos brindando actualizaciones periódicas sobre el resto del trabajo que realizamos para hacer de Twitter un lugar más seguro para todos a través de @TwitterSeguro”, concluyen.
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