Al menos dos grandes sismos de hasta 6,8 grados de intensidad se originaron en el océano Pacífico y se sintieron en varias provincias de la Argentina, aunque afectaron principalmente a diferentes regiones de Chile, pero sin que se reportaran daños ni víctimas en los informes preliminares, según detallaron autoridades locales.
El primero de ellos ocurrió cerca de las 00:09 y se percibió con más fuerza en las ciudades trasandinas de Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso y Metropolitana, pero no reunió “las condiciones necesarias para generar un tsunami” en las costas del país trasandino.
“Según el Centro Sismológico Nacional la magnitud del sismo fue de 6,8, localizado a 60 km al Norte de Huasco”, detalló un informe de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública chileno (ONEMI).
El organismo detalló que “preliminarmente no se reportan daños a personas, alteración a servicios básicos o infraestructura” producto de este fenómeno, el cual estuvo seguido de varias réplicas de intensidad media que se sintieron “levemente por algunas personas en reposo o en edificios” en las provincias argentinas de La Rioja y San Juan, de acuerdo con lo que detalló el Instituto argentino de Prevención Sísmica (INPRES).
En Chile varias rutas se vieron afectadas, por lo que los Carabineros se encuentran trabajando en esos lugares para controlar el tránsito, mientras que las empresas eléctricas informaron de cortes menores en las diversas comunas, además de uno prolongado en la comuna de Tierra Amarilla, que perjudicó a un total de 28 personas que se quedaron sin servicio.
En las redes sociales aparecieron varios videos de residentes tanto argentinos como chilenos, en el que mostraban los temblores. Los ciudadanos del país vecino mostraron vidrios de ventanales agitándose y la caída al suelo de varios objetos.
Más tarde, a las 03:02 horas, se registró el segundo de los sismos, aunque este fue de menor escala, el cual se sintió principalmente en las regiones chilenas de Atacama y Coquimbo.
El domingo pasado, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la Argentina detalló que la estación científica Base Carlini, en la Antártida, registró un sismo de 5,2, el mayor registrado en el área en los últimos años.
La estación sismográfica JUBA, de la Base Carlini -base científica permanente de la República Argentina en la Antártida, que se halla en la península Potter de la isla 25 de Mayo, perteneciente al archipiélago de las Shetland del Sur- reconoció un nivel de sismicidad similar en cuanto a magnitud a la registrada en 1980 y 2019. En esta ocasión, la secuencia se inició el viernes 28 de agosto por la noche y aún continúa. “Se trató del segundo evento que ocurre en el año, de mayor magnitud y fue percibido por las personas que habitan la Base”, detallaron desde Cancillería.
La jefa científica de la Base Carlini, Jazmín Fogel, quien se encuentra realizando tareas científico-técnicas para el Instituto Antártico Argentino (IAA), informó en el comunicado que “el sismo detectado no ha provocado daños en la Base y que todo el personal se encuentra en óptimas condiciones”.
Asimismo, desde el organismo añadieron en el comunicado que están en permanente comunicación con los geólogos del Instituto Antártico Argentino (IAA) y el personal de la Base Científica Carlini, quienes siguen la evolución de la sismicidad.
También precisaron que el primer temblor de la tierra fuerte sucedió a las 12:47 UTC del viernes 28 de agosto, con epicentro 62.432º S, 58.238º W (Base Carlini), con una magnitud de 5,0 y con una profundidad de 4,2 km.
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