Pese a que rige el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio para frenar el avance del COVID-19, la jornada de este jueves se vio afectada por protestas en dos puntos estratégicos del AMBA. La primera se llevo adelante sobre la autopista Riccheri y General Paz, donde vecinos de la zona de Villa Madero reclaman por seguridad luego de que balearan ayer a un vecino que quedó en medio de un enfrentamiento de bandas narco.
En medio del piquete, apareció en su moto el ministro de Seguridad Sergio Berni, quien fue abordado inmediatamente por los vecinos que se manifestaban desde las primeras horas de la mañana. El funcionario dialogó con algunos, los escuchó y les hizo una propuesta para tratar de que levanten la medida sobre autopista. “Dijo que iba a venir el Ministerio de Ecología a fumigar. No necesitamos que nos fumiguen. Queremos una garita y Gendarmería, nada más", dijo una vecina.
Finalmente, el ministro les prometió más seguridad, logró que el tránsito se liberara en segundo pero el episodio no terminó ahí. Fiel a su estilo, Berni cruzó la autovía y entró por uno de los pasillos de la villa rodeado de vecinos y de todos los medios de comunicación que fueron a cubrir el piquete. Su objetivo era hablar con los referentes del barrio y calmar las aguas con su promesa de más efectivos policiales.
Al quedar en medio del tumulto, el ministro se detuvo unos segundos y apeló a su pelea con el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta por el tema de los runners para pedir que se respetara el distanciamiento. “Esto no es el maratón de la Ciudad”, lanzó. Los periodistas salieron del lugar y Berni pudo continuar con su camino dentro de la villa.
“Es lo compresible que quieran seguridad. Lo que la gente necesita, sentirse cuidada. Estamos preparando una policía que está entrenada para actuar en situaciones de estrés policial. De actuar de manera intempestiva ante el narcotráfico. Vamos trabajar desde una mirada policial y una mirada integral. La gente confía en lo que le digo porque nunca los defraudé”, dijo el funcionario luego de salir del barrio, algunos minutos después.
“Vamos a implementar más seguridad desde las cinco de la tarde”, prometió Berni. Para eso propuso más presencia de la policía de la Provincia desde hoy mismo y anticipó que volverá al lugar él mismo para darle solución al problema. La situación de la zona es compleja, tal como detallaron los testimonios de los vecinos. Hablan de peleas entre bandas narco, falta de presencia estatal e inseguridad por doquier. “No podemos vivir así, no somos animales”, dijo otra de las vecinas luego de que funcionario se fue.
Minutos antes del insólito momento vivido por el ministro, la periodista Cecilia Insinga -del canal TN-, sufrió un intento de asalto cuando se dirigía a la intersección de Riccheri y General Paz. De acuerdo con el relato de la comunicadora, un hombre la amenazó con un cuchillo para quitarle las pertenencias. Insinga y sus compañeros lograron evitar el robo.
Villa Madero no es el único lugar en el que se llevó adelante una protesta. En la zona del Obelisco y algunos puntos del centro porteño, distintas organizaciones sociales, el Polo Obrero, médicos y comedores realizan cortes para reclamar por más ayuda estatal en medio de la crisis ocasionada por la pandemia y la cuarentena. Bajo su consigna “cuarentena sin hambre”, su objetivo es luego movilizarse frente a la sede del Ministerio de Desarrollo Social, donde llevarán a cabo una olla popular.
“Vamos a realizar ollas populares, cortes de ruta y concentraciones en diferentes puntos del país, ante la grave situación que atraviesa la clase trabajadora y en particular el sector precarizado. Los trabajadores organizados en cooperativas y cuadrillas seguimos cobrando un salario por debajo de la línea de indigencia, hoy se espera que podamos vivir con $8500 cuando la canasta básica es de 60mil pesos. Es urgente una actualización salarial que recomponga la situación y que se respete los aumentos para los jubilado", dijo un comunicado del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL).
Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie, dijo: “La situación social y económica es muy grave. Los alimentos aumentaron un 20% en promedio a lo largo de este cuatrimestre. Por eso planteamos que el gobierno debe disponer de manera urgente un 20% de incremento del Salario Social Complementario. Por otro lado, los despidos, suspensiones y rebajas salariales están a la orden del día y hay 800.000 nuevos desocupados: es necesaria la reapertura de los programas sociales y la ampliación del cupo de beneficiarios del IFE".
Las manifestaciones en reclamo de mayor ayuda estatal, además del AMBA, se realizaron también en Córdoba, Tucumán, Mendoza, Salta y Mar del Plata.