“La situación de los femicidios es gravísima", advirtió la Ministra de Mujeres, Género y Diversidad de la Nación, Elizabeth Gómez Alcorta. "Los femicidios, transfemicidios y travesticidios son la expresión más lesiva de un problema estructural. Por eso, estamos trabajando en un Plan de Acción contra las Violencias Extremas conjuntamente con los ministerios de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos”, anunció a Infobae.
La primera Ministra de las Mujeres (el organismo anterior a que ella asumiera tenía el estatus de Instituto y dependía del Ministerio de Desarrollo Social) relativizó la efectividad de aprobar la emergencia en violencia de género durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Y delegó esa función en el Congreso de la Nación. Además recalcó la creación de un de un plan federal, con un modo participativo (ahora de forma virtual) de un Plan de Acción contra las Violencias por Motivos de Género.
Por otro lado, afirmó que se articuló con organizaciones sindicales y universitarias para que las víctimas de violencias extremas puedan ir a hoteles sindicales o estudiantiles si tienen que salir de sus hogares durante la cuarentena.
Las mujeres que necesiten salir de sus casas tienen que llamar al 144. Hasta ahora no hubo difusión masiva de la posibilidad de pasar la cuarentena fuera del hogar y sin ir a refugios. Tampoco hubo derivaciones a los hoteles sindicales, ya que, desde fuentes oficiales, se indica que no hubo necesidad de recurrir a esta alternativa y que alcanzan las plazas disponibles en los 120 Hogares de Protección Integral.
Los convenios se hicieron con ocho sindicatos que ya acordaron prestar sus instalaciones (igual que para los viajeros que llegaban del exterior y necesitaban permanecer aislados en cuarentena y para quienes se contagien de Coronavirus sin necesitar cuidados intensivos o atención hospitalaria) para que las víctimas de violencia puedan tener un lugar donde permanecer durante el aislamiento sin estar en peligro o sometidas a maltrato.
Un gran número de gremios (de los que se reservan los nombres por seguridad para las víctimas que podrían ocupar sus instalaciones) ofrecieron habitaciones de sus hoteles para el caso que desde la Línea 144 se requieran plazas para hacer derivaciones. Hasta ahora no se comenzó a poner en práctica el Plan H (por los hoteles sindicales) que habla de la fuerte impronta feminista que tomaron muchos sindicatos.
Sin embargo, muchas víctimas no piden esta posibilidad porque no fue suficientemente difundido (no se toca una puerta si no se conoce el timbre para que alguien la abra). Además, se podría flexibilizar el criterio para aceptar la necesidad de salir de la casa donde se sufre maltrato (no es necesario que una mujer, trans o joven esté en peligro de vida para que necesite salir de un hogar donde tiene que estar 24 horas en una situación de incomunicación y confinamiento).
Por lo tanto, si se acepta que los hoteles sindicales pueden ser una alternativa transitoria no es necesario que solo quienes padecen violencias extremas puedan recurrir a esa alternativa sino quienes sufren todo tipo de violencias contenidas en la Ley 24.685 para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres.
Aunque no se trate de violencia extrema (lesiones, tentativa de femicidio, violación) muchas mujeres, trans y adolescentes que están soportando maltrato, insultos, abusos, sexo forzado, tocamientos o sienten miedo y humillación durante la cuarentena, sin otro lugar a donde ir y con el encierro como amenaza, podrían usar este recurso para no tener que soportar ningún tipo de violencia machista.
Otro punto es que, en general, se intente que las víctimas de violencia busquen redes familiares o personales para salir de su casa y no un refugio (porque es mejor que no estén institucionalizadas) pero, en este contexto, puede ser que sus familias estén más reticentes, que las convivencias sean más complejas con toda la familia en casa las 24 horas, que haya madres o padres mayores de 65 años o con cuadros de riesgo o que no logren encontrar otras vías alternativas (de familiares y amigas) durante la cuarentena y que pedir un lugar, solicitar un favor y estar en contacto con compañeras de trabajo, vecinas o amigas sea más complejo después de un mes de aislamiento.
La emergencia a la que se llega es una deuda del macrismo con una promesa incumplida de la anterior gestión. El (ex) Concejo Nacional de las Mujeres (que ahora es el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad) presentó, el 26 de julio del 2016, el Plan Nacional de Acción contra la Violencia -para llevar adelante del 2017 y el 2019- con un presupuesto de 750 millones de pesos. En el documento oficial se comprometían a levantar treinta y seis Hogares de Protección Integral. Ese compromiso no se cumplió. Los treinta y seis hogares no están.
“Solo se inició la construcción de tres, todos ellos en la provincia de Buenos Aires (Junín, Quilmes y La Plata). Hasta el 10 de diciembre de 2019 el hogar de Junín contaba con un 68,30 por ciento de avance de la obra mientras que los de Quilmes y La Plata no llegaban ni a un 3 tres por ciento de la construcción prometida”, informan fuentes oficiales.
La falta de cumplimiento del Plan de Acción de Violencia contra las Mujeres -con la coordinación del Ministerio de Obras Públicas- debe investigarse. Y es mucho más grave porque el 80 por ciento del presupuesto estaba destinado a construir refugios. Hoy no están y el aislamiento obligatorio desnuda la urgencia para tener lugares en donde las víctimas que necesiten irse de su casa cuenten con un techo alternativo.
De todas maneras, si en el Plan de Acción de hace cuatro años se visualizaba la necesidad de treinta y seis hogares más (sin cuarentena) es difícil que hoy alcancen las plazas disponibles en la actual red de refugios que no es muy extendida en el país y, por eso, es importante difundir y poner a disposición de las víctimas de violencia de género (con criterios más flexibles) las plazas alternativas ofrecidas por los sindicatos.
El gobierno anunció la elaboración de un programa para prevenir femicidios en el contexto del aislamiento social preventivo y obligatorio a raíz del Covid-19. “Nuestra concepción de un Estado presente es la de un Estado que genera políticas públicas integrales. Por eso, desde el inicio del aislamiento social, preventivo y obligatorio, reforzamos todos los dispositivos de atención, creamos nuevos canales de comunicación y lanzamos una campaña de difusión masiva”, apuntó Alcorta.
“Estamos trabajando en articulación con los gobiernos provinciales y locales, con los poderes judiciales, con organizaciones de la sociedad civil y con la sensibilización para que, más allá de la asistencia del Estado, todas, todos y todes nos comprometamos y si vemos una situación en la que una persona en situación de violencia requiere asistencia no seamos indiferentes”, pidió la Ministra.
Mientras que Cecilia Merchán, Secretaria de Políticas de Igualdad y Diversidad, destacó: “Hoy, más que nunca, en este contexto de aislamiento, es fundamental que todas, todos y todes seamos conscientes de los distintos tipos de violencias que existen, que son un delito, que el Estado está presente y que más allá de las situaciones que puedan ocurrir al interior de un hogar, estamos para acompañar y brindar asistencia a quien lo necesite. El compromiso comunitario es indispensable junto con la acción del Estado para evitar y frenar las situaciones de violencias”.
Por otra parte, distintas legisladoras reclaman la aprobación de una ley que contemple la emergencia por violencia de género. Sin embargo, Alcorta relativiza: “La declaración de la emergencia depende del Congreso de la Nación que debe aprobar una ley en ese sentido. Hay varios proyectos presentados y cada uno tiene distintas finalidades y alcances”.
“La declaración de la emergencia por sí sola y de forma aislada no resuelve el problema. Es clave considerar qué medidas la acompañan y que alcances concretos tendrán”, subraya la Ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad.
Por otra parte, desde la oposición presentaron un proyecto legislativo para que el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad integre el Comité de Crisis frente al Coronavirus. Desde el gobierno aseguran que Alcorta trabaja diariamente con el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. Pero el proyecto de la diputada Adriana Cáceres (PRO) fue apoyado por ONU Mujeres porque ven con preocupación que en las conferencias de prensa desde la Quinta de Olivos y en la comunicación oficial el protagonismo es de los funcionarios varones y queda relegada la visibilización de las funcionarias y la perspectiva de género.
“El proyecto de ley busca que el Ministerio de las Mujeres participe de todas las reuniones del Comité de Crisis por la emergencia sanitaria, económica y social por el Coronavirus. Es importante que las decisiones que se tomen tengan en cuenta el impacto diferenciado de las políticas públicas entre mujeres y varones”, asegura Cáceres que pide institucionalizar la perspectiva de género en relación a las medidas tomadas a partir de la pandemia.
"En ONU Mujeres creemos que en los momentos de crisis, en los que las mujeres ocupan un papel fundamental en la primera línea, sus aportes y necesidades deben ser tenidas en cuenta. Es por este motivo que apoyamos este proyecto que promueve que los comités de crisis transversalicen la perspectiva de género, no sólo en su respuestas, sino también en su composición", subrayó Florence Raes, Representante de ONU Mujeres Argentina.
El impacto de la violencia de género en cuarentena es federal
El impacto del Coronavirus y la cuarentena es federal. Y las dificultades para poder denunciar violencia de género también. Por eso es importante ver la realidad en todo el territorio nacional cuando las mujeres no pueden salir de sus casas y, en muchos casos, quedan rehenes de agresores y abusadores.
En Salta hay cinco refugios para mujeres víctimas de violencia: dos en la Capital, uno en Orán, uno en Tartagal y otro en Rosario de la Frontera. Se brinda alojamiento, contención y asistencia psicológica a partir de la derivación del Poder Judicial o el Polo Integral de las Mujeres. Hasta el 21 de marzo se dio refugio a 20 personas.
El Polo Integral de las Mujeres, de Salta, existe desde el 2018 y prevé la implementación de un móvil para que las políticas de género no se queden estancadas, ni centralizadas en los lugares de mayor población. Entre diciembre del 2019 y febrero del 2020 se asistió a 2.951 víctimas de violencia de género y 18 víctimas de trata.
En Córdoba, el Ministerio de la Mujer realizó 300 intervenciones diarias para ayudar a víctimas de violencia de género desde que empezó la cuarentena. Solo en la primera semana de confinamiento hubo 70 actuaciones policiales y 25 detenciones.
Desde que entró en vigencia el aislamiento social, preventivo y obligatorio ante la pandemia de coronavirus hubo más de 5 mil llamadas por consultas vinculadas a violencia de género y la policía provincial detuvo a 111 hombres acusados por agresiones.
El 66 por ciento de las denuncias son por violencia de género, abuso sexual y violencia familiar; el 23 por ciento por violaciones a las medidas de restricción y el 11 por ciento por situaciones de violencia contra vecinas, amigas o conocidas.
Un caso que demuestra cómo el aislamiento puede generar situaciones de mucho dolor es el de una adolescente trans, de 17 años, en Córdoba. El Juez de Bell Ville Eduardo Bruera ordenó la exclusión del hogar de su papá y que su mamá no pueda entrar a su cuarto, aunque conviven en la misma casa (incluso recomendó que circulen por las partes comunes en lo posible solo para ir al baño). La joven denunció violencia familiar por transfobia.
El padre fue expulsado del domicilio por sesenta días por ejercer violencia psicológica contra ella, por no aceptar su identidad y tratarla como un varón aunque ella se autopercibe trans. Sin embargo, después de esa medida, la madre continuó con episodios violentos. Y el Juez volvió a resolver mayores medidas de protección para la adolescente trans.
Por eso, el 14 de abril, en plena cuarentena, también ordenó que lxs progenitores vean videos para capacitarse sobre identidad de género. La tarea para el hogar no es libre sino explícita: una producción de la Universidad Nacional de Mar del Plata y otra serie sobre la inclusión laboral trans desarrollada por la TV Pública. Además deben proveer alimentos a la joven hasta los 21 años y sostener el hogar familiar.
Las denuncias judiciales e intervenciones son más difíciles en aislamiento. Pero, frente al pedido de ayuda de la joven, se lograron a través de llamadas telefónicas, vía WhatsApp y correos electrónicos entre el personal del juzgado, las autoridades locales y la joven denunciante.
Este caso no fue el único. Desde el 17 de marzo al 6 de abril, durante el aislamiento social para prevenir la propagación del Coronavirus, se excluyeron del hogar, en Córdoba, a 218 agresores, se dictaron 749 restricciones y prohibiciones de contacto. Además se entregaron 68 botones antipánico y se incautaron 41 armas.
Solo durante los primeros 16 días de la cuarentena judicial extraordinaria por razones sanitarias, ingresaron al Fuero de Niñez, Violencia Familiar y Género cordobés 929 denuncias. De ellas, 893 corresponden a causas iniciadas por episodios de violencia familiar y 36 a expedientes relacionados con la violencia de género.
En San Luis la Secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad implementó un Plan de Emergencia de atención por violencias de géneros y sumó un equipo que asesora telefónicamente los casos de urgencia conformado por ocho psicólogxs, cuatro abogadxs, dos trabajadoras sociales y tres técnicos para la colocación de botón de alerta temprana. También se implementó un plan de consejerías barriales con más de cien consejeras capacitadas en el territorio. Y otro grupo de mujeres que se llaman tejedoras que están preparadas para detectar personas que requieren acompañamiento por violencia de género.
La Defensoría General de la Nación lanzó la campaña #NoEstasSola con el objetivo de difundir que el aislamiento no suspende los derechos de las mujeres a vivir una vida libre de violencias. Además, pidieron que se prorroguen las medidas de protección para víctimas de violencia de género.
En todo el país la extensión de la cuarentena puede arrinconar a las mujeres y disidencias sexuales a situaciones de maltrato, abuso, golpes o amenazas que no tienen que soportar. Por eso, las políticas nacionales, locales, judiciales y sociales son una ventana abierta para que una vida libre de violencias sea, también, una medida sanitaria.
Por ayuda para casos de violencia de género
-Línea 144
-Para información de los foros federales escribir a forosfederales@mingeneros.gob.ar / www.argentina.gob.ar/generos/foroparticipativo.
-Polo Integral de las Mujeres (Salta): 387 5719316 (Whastsapp), de 8 a 20 horas / Correo electrónico polo.asistencia@gmail.com
-Ministerio de la Mujer (Córdoba): 0 800 888 9898 / 351 8141400 (Whatsapp)
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