El Hospital General de Agudos “Dr. Abel Zubizarreta”, ubicado en el barrio porteño de Villa Devoto, cerró preventivamente la terapia intensiva del lugar luego de que la jefa de este sector contrajera coronavirus, por lo que se sumó así a otros centros de la Ciudad y de la provincia de Buenos Aires que se encuentran en la misma situación.
Así lo dispuso el Ministerio de Salud local luego de que la médica diera positivo en el test que se le realizó cuando comenzó a presentar síntomas compatibles con esta enfermedad. Además, las autoridades sanitarias establecieron también el aislamiento de otros 20 profesionales que pudieron haber estado en contacto con el caso confirmado.
Por otra parte, la dirección del Hospital Ramos Mejía, en el barrio de Balvanera, también decidió interrumpir los servicios de Neonatología y de Obstetricia desde este viernes por tres enfermeras y 38 agentes infectados, según confirmaron diferentes fuentes a Infobae.
El Ministerio de Salud porteño emitió un comunicado en el que explicó que se “dispuso el cierre temporario de la terapia intensiva del Hospital Zubizarreta, luego de que se confirmara que la jefa de dicha área le diera positivo el test de COVID-19”.
La cartera que dirige Fernán Quirós explicó que “de acuerdo con la investigación epidemiológica que se llevó a cabo, se estima que la médica se contagió en una clínica privada, donde también trabaja y asiste pacientes de COVID-19 positivos”.
Según precisaron, la profesional estuvo un tiempo sin tener síntomas, hasta que el jueves comenzó a presentar fiebre alta, por lo que se le realizó un hisopado para saber si estaba contagiada, y fue derivarla a su domicilio, donde comenzó su aislamiento. Finalmente, unas horas más tarde ese test dio positivo.
Por esta razón, algunos de los pacientes que estaban internados en la terapia intensiva de este establecimiento fueron trasladados al área de terapia intermedia, mientras que otros dos enfermos que necesitan de un respirador artificial fueron derivados a los hospitales Santojanni y Muñiz, respectivamente.
Por su parte, la médica contagiada “se encuentra internada y estable”, mientras que los compañeros de trabajo que pudieron haber tenido contacto con ella deberán cumplir con la cuarentena prevista para este tipo de situaciones.
De esta manera, tanto el Hospital Zubizarreta como el Ramos Mejía se sumaron a los casos del Sanatorio de la Providencia, del barrio porteño de Balvanera; el Hospital Italiano, en Almagro, el Centro de Salud Norte, de Villa Adelina, en el partido de Vicente López, y otra clínica privada de San Martín, que también tuvieron que cerrar por diferentes contagios.
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