Horas después de que el ex vicepresidente de la Nación Amado Boudou obtuviera la prisión domiciliaria, el mismo beneficio le fue denegado a Marcos Córdoba quien manejaba el tren que el 22 de febrero de 2012 chocó contra el andén de la estación Once del Ferrocarril Sarmiento.
Boudou y Córdoba están en la misma condición judicial. Ambos condenados por un Tribunal Oral Federal con la condena confirmada por la Cámara de Casación y con presentaciones hechas a la Corte Suprema para que se revise la pena. Boudou fue condenado a cinco años y diez meses de prisión y Córdoba a tres y tres meses. Ambos de cumplimiento efectivo. A Boudou porque se comprobó la compra de la empresa Ciccone Calcográfica por parte de un grupo cercano a él mientras era ministro de Economía de Cristina Kirchner. A Córdoba por su responsabilidad en el caso conocido como la Tragedia de Once en el que hubo 51 muertos y más de 700 heridos. Los dos pidieron la prisión domiciliaria por la situación generada por el coronavirus y por cuestiones vinculadas con sus familias pesar de que no están entre los considerados grupo de riesgo.
El juez Daniel Obligado le otorgó la prisión domiciliaria al ex vicepresidente que es padre de mellizos de dos años. El juez Jorge Gorini le denegó esa posibilidad a Córdoba quien es padre de una niña de dos años.
La abogada de Córdoba, Valeria Corbacho, planteó ante el tribunal la situación de vulnerabilidad que atraviesa la hija del motorman. La defensa argumentó que la pequeña está al cuidado de la pareja de Córdoba, Johana Herrera, quien trabaja como aprendiz de banderillera en el ferrocarril y su ingreso es el único del hogar. Ella desempeña su trabajo seis días por semana en un turno de 8 horas.
Durante su jornada laboral la niña es cuidada por la madre de Córdoba. Según la presentación de la defensa, la abuela de la niña tiene un grave problema de salud que no le permite cuidarla. En la presentación la pareja de Córdoba manifestó la situación dificultosa por la que está pasando y contó algunos problemas que tiene la niña.
La prisión domiciliaria por Córdoba fue aconsejada por una psicóloga que colabora con las Defensorías Públicas Oficiales ante los Tribunales Orales, debido que es necesaria la presencia paterna para la crianza de la niña.
La fiscal de Ejecución Penal Guillermina García Padín se opuso al pedido de la defensa de Córdoba porque consideró que la niña no está en una situación de vulnerabilidad completa. El juez Gorini compartió los argumentos de la representante del Ministerio Público Fiscal.
El rechazo de la domiciliaria de Córdoba no contempló la situación generada por la pandemia de coronavirus porque según el fallo “se han dictado e implementado protocolos y directivas con el objetivo de asegurar el acatamiento de los estándares fijados por las disposiciones internacionales y nacionales para la prevención de la pandemia, como así también que no existe entre la población carcelaria ningún caso de contagio ni de los catalogados como sospechoso”.
“El Servicio Penitenciario Federal realizó una nómina de internos que poseen riesgos de salud y Marcos Antonio Córdoba no se encuentra dentro de dicho listado”, resumió el fallo. En cambio el juez Obligado al darle la prisión domiciliaria a Boudou consideró que el ex vicepresidente sí podía ser afectado.
El juez Gorini en representación del Tribunal Oral Federal 2 intervino luego de que la Casación abriera un recurso de apelación presentado por la defensa.
En estos últimos días la Casación había rechazado recursos de otros imputados en la Tragedia de Once que cumplen penas efectivas que habían pedido salir de la cárcel por el temor a la pandemia de coronavirus. Los empresarios Claudio Cirigliano y Jorge Álvarez sufrieron el rechazo del recurso por parte de la Sala de Feria del máximo tribunal penal federal del país.