En la Justicia se comenzaron a tomar algunas medidas de prevención por el coronavirus. Fue desinfectado el edificio donde funciona una fiscalía especializada que ayer fue cerrada porque una empleada presentó síntomas gripales después de volver del exterior. También se ordenó que en las audiencias orales con mucha gente se mantenga una “distancia suficiente” y se dispuso una partida especial de presupuesto para que en todas las mesas de entrada de juzgados, cámaras y tribunales orales haya alcohol en gel para el personal y el público y lavandina para una limpieza más profunda.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que las medidas las tomaron la Procuración General de la Nación, la Cámara Federal de Casación Penal y el Consejo de la Magistratura de la Nación. Se suman a las resoluciones de la Procuración, la Corte Suprema de Justicia de la Nación y la Defensoría General de la Nación para que los empleados que volvieron del exterior tengan una licencia de 14 días, tal como dispuso el Gobierno para todos los empleados públicos y privados.
La Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja (UFECRI) fue cerrada ayer cuando se conoció que una empleada había estado con síntomas compatibles con el coronavirus tras regresar de un viaje a la India durante el que pasó por cinco aeropuertos. La mujer fue sometida a tests para descartar la enfermedad y a los casi 60 empleados de la dependencia se les ordenó que se queden en sus casas a la espera de conocer el resultado de los estudios.
La fiscalía quedó cerrada y la Procuración ordenó una desinfección y una limpieza del edificio donde funciona el organismo, en la calle Tucumán 966, en el centro porteño. Es un edificio de 12 pisos en el que funcionan 24 fiscalías de instrucción. Además la Procuración dispuso que en el edificio haya dos médicos de guardia, una infectóloga del SAME y el director médico de la Procuración, Luis Pérez, para atender las consultas de las personas que allí trabajan. Todo a la espera del resultado de la mujer de la fiscalía especializada.
La Cámara de Casación emitió hoy una acordada. Allí dispuso e informó a todos los juzgados, cámara y tribunales orales que están bajo su dependencia una serie de recomendaciones. Una es que “se arbitren medidas para evitar la aglomeración de personas en las salas, procurando guardar distancia suficiente entre cada uno de ellos”. Para evitar la circulación de personas, Casación pidió que se le dé prioridad al uso de medios tecnológicos, como las videoconferencias. Lo mismo con las personas detenidas para evitar su traslado desde las cárceles.
El Consejo de la Magistratura de la Nación, el órgano encargado de la administración del Poder Judicial, también tomó medidas. Lo hizo luego de que el lunes el presidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, Eduardo Awad, enviara una nota en la que expuso “la falta de medidas de prevención en las dependencias del Poder Judicial de la Nación, ante la expansión del virus COVID-19 en nuestro país”.
“Recibimos comentarios y reclamos a diario de nuestros matriculados señalando el faltante de elementos de higiene personal en los sanitarios de los edificios del Poder Judicial", agrega la nota, y pide “papel higiénico, jabón liquido y alcohol en gel en todos los sanitarios de los edificios del Poder Judicial de la Nación”. El mismo día un abogado en el juicio oral por la causa de la obra pública pidió esos elementos en los baños de los tribunales de Comodoro Py. “Si uno va a los baños, no solo no hay jabón ni papel higiénico, sino que la situación higiénica es deplorable”, dijo el letrado.
Ante el pedido del Colegio de Abogados, el presidente del Consejo, Alberto Lugones, ordenó una partida presupuestaria especial para la compra de alcohol en gel y lavandina para todos los juzgados, cámaras y tribunales orales nacionales y federales del país como medida de prevención.
También se ordenó a la Administración General del Poder Judicial de la Nación “adoptar las medidas necesarias para restablecer las condiciones y elementos de higiene que el caso demanda”. Eso es, le dijeron a Infobae, que haya papel higiénico y jabón en todos los baños.
Por la expansión del coronavirus, el Gobierno dispuso una licencia laboral de 14 días para todas las personas que hayan vuelto de Italia, España, Francia, Alemania, China, Japón, Corea del Sur e Irán, los países donde más se propagó el virus. “Licencia excepcional, con goce de haberes, para todos aquellos magistrados, funcionarios y empleados que regresen al país de áreas con circulación y transmisión de coronavirus", acompañó la Corte Suprema en una acordada. Lo mismo hicieron esta semana la Procuración General, la Defensoría General y hoy el Consejo de la Magistratura de la ciudad de Buenos Aires, para toda la Justicia porteña. Y también lo hará el Consejo Nacional.
Bajo esa licencia quedaron el juez de la Cámara Federal de Casación Penal Juan Carlos Gemignani, quien el domingo volvió de Italia, y el fiscal federal Carlos Rívolo, que regresó de España.
La Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires también adhirió a la licencia de los 14 días para quienes estuvieron en el exterior, pero les aclararon a los jueces bonaerenses y los funcionarios judiciales que “deberán prestar servicios desde sus domicilios utilizando la tecnología apropiada” siempre que no estén enfermos. El objetivo de la medida es “evitar mayores perjuicios a la prestación del servicio de justicia”.
Críticas a la limpieza en Tribunales
No solo los abogados se quejan de la situación higiénica en Tribunales. También los jueces. Esta semana y por la suma de casos de coronavirus en el país, varios magistrados y funcionarios volvieron a exponer una situación que viven en algunos edificios judiciales. Y es la falta de personal de limpieza. “Eso lo hacemos nosotros”, le dijo un juez de instrucción a Infobae.
El problema es porque el servicio de limpieza está tercerizado y cuando vencen los contratos lleva tiempo hacer uno nuevo. “En mi juzgado estamos sin servicio desde enero”, contó otro magistrado. Y un camarista dijo: “En mi tribunal nunca tuvimos una empresa de limpieza”. “Mandamos oficios pidiendo el servicio pero nunca nadie nos contestó”, se queja otro.
¿Hay temor por la falta de un servicio de limpieza ante el coronavirus?, les preguntó este medio a dos jueces de tribunales orales. “No todavía y no hemos alterado el ritmo habitual de trabajo”, contestó uno. Y el otro señaló que “es un tema que preocupa más allá de la limpieza por la cantidad de personas que circulan por el tribunal y por el edificio, y si bien nos estamos cuidando, pero no hay una sensación de riesgo inmediato”.
En el Consejo reconocen el problema con las empresas de limpieza. “Se trabaja con distintas contrataciones de servicios de limpieza y a veces puede haber un tiempo sin servicio entre que el contrato se cae y se hace uno nuevo. Siempre se trata de hacer lo más rápido posible”, explicó un consejero. El presidente Lugones pidió un informe sobre el estado de la limpieza en todos los edificios judiciales y los contratos.
Le preocupación higiénica excede al coronavirus. A principio de año hubo en Tribunales casos de tuberculosis. Y en los baños del edificio de Comodoro Py se encontraron murciélagos, ratas y cucarachas.