Al menos 21 músicas, que forman parte de la Orquesta Filarmónica de Mendoza, decidieron no participar del espectáculo previsto para este lunes por la noche y no tocarán sus instrumentos al lado de la legendaria banda de cumbia en la segunda noche del evento más importante de la provincia.
Los Palmeras, agotaron entradas en la venta online en pocos días, y se convirtieron en una de las esperadas presentaciones, pero cuando las mujeres de la orquesta provincial leyeron sobre sus atriles las letras de las canciones de la banda se sintieron incómodas por el contenido misógino y en repudio a éstas optaron por no formar parte del espectáculo.
“No vamos a tocar, pero no se trata del estilo. Es la letra, es abrir la carpeta y que te estén diciendo perra, asesina y sentirte interpelada por eso", expresó una de las mujeres que forma parte de la Filarmónica de la provincia a Sitio Andino. "No tenemos problema en tocar cumbia, no tenemos drama con ningún género. La Orquesta Filarmónica ha tocado muchísimos géneros populares, ha acompañado a muchísimos artistas y nos encanta porque nos enriquece como artistas. Cuando lo hacemos, se generan arreglos propios que luego pueden ser usados por otras orquestas, nos hace crecer. Por eso decimos que esta decisión no tiene nada que ver la cumbia”.
La situación de incomodidad que vivieron las músicas ocurrió el pasado viernes 6 de marzo cuando tomaron contacto con las partituras para conocer la música que interpretarían en la noche de este lunes y entre los títulos de algunas canciones leyeron: “perra”, “asesina”, “la cola” y otras palabras que les causaron incomodidad.
Pese a ese sentir, para no dejarse impresionar con el primer contacto con cada canción, analizaron las letras del repertorio completo y “era peor", opinaron las mujeres que decidieron no relavar su identidad.
"Había un título que no era violento, pero en la letra relataba la historia de una niña y un hombre que le pide que vuelva a ser su amor. A una nena de 12 años, que vuelva a ser su mujer. ¡Fue de terror! Y empezamos a sentirnos mal. Nos organizamos y consensuamos algunas medidas como repudiar estos mensajes y enviar una nota de reflexión a la ministra de Cultura y Turismo, Mariana Juri”, agregaron.
“Apenas se enteró de nuestro desacuerdo, la gestión se acercó a conversar con nosotras. En ese sentido, han entendido y acompañado, pero desde lo personal, me causa mucho repudio poner mi cuerpo y mi instrumento a disposición de un mensaje misógino. El mismo Estado que nos manda a la capacitación de la Ley Micaela, nos quiere obligar a tocar esta música. Por supuesto, que nos han dicho que esto ha sido un error, que no sabían de estas letras, y repetían que había sido un error”, explicó otra de las artistas que pidió no se difundiera su nombre.
“Por nuestra parte, insistimos en que nos sentíamos violentadas. Independientemente, en el grupo de mujeres hay distintos pensamientos y sentimientos, cada mujer atraviesa su propio proceso frente a este y otros temas. Algunas explicaron que interpretarían algunos temas y otros no mientras que varias expresamos que no lo íbamos a hacer", sostuvieron.
La sensación que vivieron algunas de ellas fue extrema: "Hubo algunas con presión baja durante el ensayo del sábado. Yo, por ejemplo, no podía estar ahí porque es una contradicción muy profunda y violenta. Es poner mi cuerpo a disposición de este mensaje que rechazo con cada célula de mi ser y como yo, hubo varias más”, argumentó.
No obstante, las artistas remarcaron que cada una de las integrantes de la Orquesta “tiene libertad de decisión y de acción”.
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