A pesar del pedido del hijo de la víctima para que los asesinos no accedieran al beneficio, este lunes un tribunal le redujo a casi la mitad la pena a dos criminales condenados por matar a tiros en el 2015 a un comerciante en una isla del Delta, en el partido bonaerense de Tigre.
De acuerdo con lo que informaron fuentes judiciales, el Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil 1 de Pilar decidió bajar de 28 a 14 años y diez meses el tiempo que deberán pasar detenidos los dos responsables del hecho, cumpliendo así con lo dispuesto por la Cámara de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires, que había ordenado revisar la sentencia.
El hecho ocurrió el 1 de marzo de 2015, cuando Norberto Machado fue a pescar junto a su hijo Maximiliano y dos amigos, Jorge Valenci (58) y Eduardo Lorenzo (60). En un momento, los cuatro hombres decidieron parar a almorzar en una isla pero, de manera inesperada, recibieron una balacera desde una lancha.
Como resultado del ataque, Valenci resultó herido, mientras que Machado cayó inconsciente y luego murió. En tanto, los agresores escaparon del lugar en la misma embarcación, en la que luego se descubrió que transportaban escopetas y carabinas con las que efectuaron unos 30 disparos contra sus víctimas.
“Es una vergüenza, se nos siguen cagando de risa en la cara, esta es la respuesta del Estado ante el crimen de mi papá. En nueve años pueden salir y volver a cometer otro homicidio”, expresó Maximiliano, el hijo del hombre asesinado, en declaraciones a la agencia de noticias Télam.
Además, el joven criticó al Tribunal presidido por el juez Alejandro Fiori por haberle dado a los asesinos 14 años y diez meses, superando así la mitad de lo que habían recibido en primera instancia, por lo que de esta manera la fiscal María Angélica Sayago no podrá seguir apelando la medida.
“Es una burla de la supuesta Justicia, esto te quita las ganas de seguir peleándola y le doy la razón a los que dicen que hay que irse del país”, sostuvo el hijo de Machado, que ya había advertido sobre la posibilidad de que esto pasara cuando Casación ordenó revisar la causa.
Esa decisión había sido tomada a fines de 2019, tras la apelación de las defensas de los acusados que fue aceptada de forma“parcial”, ya que el tribunal superior aceptó las críticas respecto a la escala de la pena, pero no de las autorías, que quedaron “totalmente acreditadas”.
Para Casación, la Justicia de primera instancia debió haber impuesto a los entonces menores de edad el monto de la condena prevista por el delito de “tentativa de homicidio”, que va de 10 a 15 años de prisión, tal como contempla la Ley de Responsabilidad Penal Juvenil, y no la sentencia a 28 años.
“Pedimos justicia y que no se olviden de mi papá”, reclamó Maximiliano en ese entonces, quien aseguró que a su padre le sacaron 33 fragmentos de plomo del cuerpo y que quedó comprobado que quienes lo mataron fueron estas dos personas que actualmente están detenidas
Al respecto, Carlos Caruso, el abogado de la familia Machado, dijo que los dos jóvenes y otro llamado Julio Isla (26), el único mayor de edad al momento del ataque y que en 2016 fue condenado a prisión perpetua por el crimen, “trabajaban para un jefe del narcotráfico del Delta”.
Al igual que el letrado, la fiscal Sayago, quien impulsó la acusación en el juicio a los entonces adolescentes, había pedido que se mantuvieran las penas de 28 años de prisión por el delito de “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y uso de armas en concurso real con tentativa de homicidio”.
“Ahora me dejaron sin la Fiscalía porque no puede volver a apelar, acá se olvidaron de quién fue la víctima y solo pensaron en el beneficio de los asesinos”, lamentó el hijo del comerciante y fabricante de calzados.
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