Las persistentes lluvias que afectan a las provincias de Salta y Tucumán desde hace varios días mantienen en alerta a las autoridades, ya que la situación de las zonas inundadas sigue siendo crítica, aunque los pronósticos indican que el clima mejorará en las próximas horas.
Si bien las lluvias continuarán hasta mañana por la noche, la intensidad será mínima y no habrá tormentas como las registradas el fin de semana, que provocaron daños en rutas y dejaron varias localidades aisladas.
“Tuvimos un acumulado de más de 100 milímetros en las últimas 24 horas”, comentó el director de Defensa Civil de Tucumán, Fernando Torres, quien explicó que durante el fin de semana las lluvias superaron los 200 milímetros en la zona de Pedemonte, en el sector de la Sierra de Medina, donde el agua escurre superficialmente porque no hay ríos que canalicen y orienten los grandes caudales de agua.
Según medios locales, actualmente hay alrededor de 100 familias evacuadas en toda la provincia, aunque muchos no quieren dejar sus hogares por temor, y casi un centenar de familias están aisladas en Pampa Pozo y Puerta Alegre.
Las zonas más afectadas por el fenómeno climático fueron las del este: Ranchillos, Garmendia, Las Cejas, Los Pérez, Los Pereyra, Los Ralos, Estación Aráoz, Agua Dulce, La Ramada, Los Puestos, Santa Rosa de Leales, Yerba Buena (Simoca), Atahona, San Pedro y San Antonio, Chicligasta, Monteagudo, Santa Cruz y La Tuna, Buena Vista, 7 de abril, Pampa Mayo, Pampa Pozo y algunos sectores de Simoca.
El lunes por la tarde se produjo el desborde del arroyo Tacuarú, que dejó aislada la Colonia 8 de Bella Vista, al sur de nuestra provincia, ya que el agua tapó parte de la ruta 323, en el acceso oeste de esa localidad.
En Salta la situación también es compleja y las inclemencias climáticas durante el período estival afectan principalmente a los parajes y comunidades del Chaco salteño. Los mayores daños se registran donde desembocan los cursos de agua y cuyos caminos se encuentran totalmente intransitables.
Rolando Álvarez, director de Defensa Civil de Tartagal, informó que como “consecuencia de los 200 milímetros que cayeron durante todo el fin de semana, hasta la mañana de ayer, la situación se tornó muy delicada, lo que ya fue informado a Defensa Civil de Salta”.
Los Bomberos Voluntarios de la ciudad de Joaquín V. González y personal municipal, trabajaron en la asistencia y el traslado de las familias que resultaron afectadas. Estas familias, cuyas viviendas están inundadas, se encuentran en el Complejo Deportivo Municipal, lugar elegido como centro de evacuación.
El informe meteorológico precisa que si bien las lluvias continuarán hasta el miércoles, en Tucumán la intensidad será mínima y no habrá tormentas, lo que permite ser optimista a las autoridades. En Salta, las autoridades siguen alertas porque las condiciones de las zonas inundadas por el momento es crítica.
Seguí leyendo: