Un hombre obsesionado con una joven, luego de asediarla por redes sociales, investigó dónde trabaja, se metió en su oficina y le dejó un regalo acompañado de una carta: “No quiero que pienses que soy un loco acosador”.
“Gente yo creía que ‘You’ era una serie pero un enfermo entró a mi oficina a dejarme esto en el escritorio cuando yo estaba en una reunión”. Haciendo referencia a la serie que se transmite por Netlfix, Juana describió en su cuenta de Twitter que encontró en su despacho golosinas de una reconocida marca de chocolates de Bariloche, acompañadas de una carta. La publicación se volvió viral con más de 700 comentarios y 3.500 retuits.
El autor del hecho vio el perfil de la chica en Tinder, luego comenzó a seguirla en Instagram y a comentarle fotos, stories y mandarle mensajes privados en exceso. Ante la falta de respuesta de Juana, investigó dónde trabaja y decidió “pasar lo virtual, para poder llegar a lo real”, definió en la misiva para justificar la decisión de pasar del ciberacoso al asedio en el lugar de trabajo de la víctima.
En You, el protagonista, Joe (Penn Badgley), se obsesiona con Beck (Elizabeth Lail), la coprotagonista, a quien empieza a espiar y perseguir para luego intentar conquistar. Con el éxito de la serie, el debate osciló entre diversos matices que culminaron en una sola discusión: ¿se puede hablar de romanticismo en una historia repleta de acosos y acciones machistas? El mismo Bagdley discutió por Twitter con varios de sus seguidores por la fascinación que generó su personaje acosador y psicópata.
“Él es completamente obsesivo, compulsivo, y cree que opera con la lógica de un verdadero romántico. Lo que hace es tomar los tópicos que hemos visto en las comedias románticas y subvertirlos completamente”, había dicho en el programa Today, lo que desencadenó una catarata de tuits de sus fans.
Pero You era ficción, aunque dejaba en claro cuán vulnerables somos frente a los riesgos –incluso mortales– a los que estamos expuestos por los datos que entregamos, queriendo y sin querer, al ecosistema digital. Desde un momento de Instagram a una foto en Facebook o un comentario en Twitter. El mensaje viral de Juana en su cuenta de Twitter, en cambio, hablaba de algo real. Y todo empezó en las redes.
“Qué difícil romper el hielo, ¿Cómo estás? Si estás leyendo esto es porque me animé a enviarte esta carta y algún presente que acompañe la situación. Antes que nada, no quiero que pienses que soy un loco acosador. Soy un poco tímido, normal de barrio, al que le parecés muy bella”, se presentó “Her”. “Me pareciste muy linda desde que vi tus fotos en Tinder, te agregué a Instagram, y te fui siguiendo en las historias y las publicaciones. A medida que pasaba el tiempo, cada vez más linda me parecés, mujer sencilla y elegante, de buen gusto, carismática, graciosa, independiente, y poco de sarcasmo en sus palabras. Mirada desafiante que habla por sí sola”, la describió como si la conociera de toda la vida pese a que su único contacto con ella fue a través de la pantalla de un celular y encima nunca hubo reciprocidad por parte de Juana, que nunca le contestó. Ni siquiera lo agregó.
“No soy una persona muy ‘amiga’ de las redes diría, no tengo el mejor perfil de Instragram, ni las mejores fotos. Ni tampoco soy Neruda como escritor. Entonces preferí pasar lo virtual, para poder llegar a lo real. En alguna de tus historias vi dónde trabajás, así pude enviarte esta carta”, confesó su método.
En su obsesión, el individuo manifestó que “idealizó muchas películas en su cabeza” antes de escribir el texto, “pero me di cuenta, que lo mejor es ser sincero con lo que sentimos y que sea lo más sencillo para que no pienses que soy más freak de lo que parece”, agregó.
“Te he escrito por mensaje directo, pero no sé si los leés. No he tenido respuestas tuyas salvo en una publicación”. Juana publicó en su Twitter esos mensajes que el acosador le envió y ella no respondió. Entre ellos se puede leer: “Sé dar muy buenos abrazos...”; “¿Qué día podés y te invito a degustar hamburguesas?”; “Cómo se hace para que LA mujer más preciosa que hayas visto te conteste los mensajes... Sabes que siento que me enamoré en más de una vida de vos... no puede ser sino lo mucho que me gustas...”. La joven de 24 años no emitía respuesta, pero el usuario herseiliko insistía: “Hola Juani, perdón por haber sido tan molesto. Prometo no enviarte más mensajes románticos ni empalagosos...Solo voy a generarte más rechazo. Gracias por dejar que mi corazón te escriba. Que seas recontra feliz, yo ya conocí a la mujer de mi vida, ojalá te encuentre alguna vez”. Cuando parecía reconocer su asedio, los mensajes siguieron circulando: “Lo bueno de que no me leas es que puedo decirte todo lo que siento, ojalá te encuentre y te guste tanto como vos a mí. No quiero enamorarte con un mensaje, se enamora con acciones. Solo quiero ser sincero. Aunque no existe la perfección, para mí lo sos”. Estas frases son algunas de las decenas que le enviaba a Juana.
“Solo te quiero pedir dos cosas: que no me bloquees, y que cuando lo sientas me respondas, te voy a dejar mis datos para que sepas que soy un chico de verdad”, continuó en su carta. En efecto, el hombre en cuestión le dejó su usuario de Instagram, su número de celular, un mail de contacto, y le aclaró que es de la localidad de Haedo, en zona Oeste del conurbano bonaerense.
El acosador concluyó la misiva definiendo su gesto como “un acto de valentía”. “Estaría bueno que pudiéramos hablar y conocer nuestras historias, si no es así soy un caballero y acepto lo que vos sientas”, agregó quien firmó el texto como “Her”.
Luego de que la publicación se viralizara, el hombre borró su usuario de Instagram.
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