Oscar Vallejos (59), padre de uno de los tripulantes del ARA San Juan, falleció este jueves tras darle una dura batalla a un cáncer que se le despertó mientras buscaba respuestas y justicia por la tragedia que le costó la vida a su hijo.
Al ser ex integrante de la Armada y ex combatiente de Malvinas, sus restos fueron despedidos como el héroe que fue. Tras ser velado en la cochería San Pietro, en Mar del Plata, su ataúd fue trasladado al cementerio por la Guardia de Honor de dicha fuerza y de la ceremonia participó Gabriel Attis, jefe de la Base Naval de esa ciudad.
A su hija Marta le obsequiaron una espada, a su mujer una bandera y a su otra hija, Malvina, una gorra de la Armada. “Mi papá tenía muy buena relación con Attis y en varias oportunidades lo había ido a visitar al hospital donde estaba internado”, contó Marta a Infobae.
Vallejos se desempeñaba como suboficial primero general de Comunicaciones y al igual que su hijo Celso (38), uno de los submarinistas fallecidos, había arrancado como flotero.
Los Vallejos, que eran oriundos de Chaco, estaban residiendo en “La Feliz” cuando recibieron la triste noticia de la desaparición del submarino. A Celso, Oscar lo vio por última vez justo antes de que zarpara. En ese momento su hijo se desempeñaba como suboficial segundo sonarista y era todo un orgullo para la familia. Y ese recuerdo fue el que se llevó a la tumba.
“El cáncer de páncreas que tuvo mi papá se le despertó después de la muerte de mi hermano. Fue consecuencia de toda la mala sangre y la angustia que padeció”, contó Marta.
La noticia sobre la desaparición del ARA San Juan, dada a conocer el 5 de noviembre de 2017, recorrió el mundo en cuestión de minutos. El submarino copó las portadas de los principales diarios y los rostros de los 44 tripulantes llegaron a tener un lugar protagónico en las señales de TV y las redes sociales.
Pero la insistencia de todos los familiares para que la investigación no naufragara también se convirtió en un símbolo de lucha contra la desidia política. Su reclamo llegó hasta la Plaza de Mayo, donde padres, madres, esposas e hijos de los submarinistas acamparon por más de 50 días. Entre ellos estuvo Oscar, quien al menos pudo conocer el lugar donde yacen los restos de su hijo.
Al hombre le diagnosticaron la enfermedad el 11 de agosto de 2018. “Lo operaron, le sacaron parte del páncreas, el estómago, el duodeno y la vesícula. Le hicieron quimio hasta mayo de 2019 y parecía que había mejorado”, recordó su hija.
Pero en agosto de ese año experimentó una recaída y permaneció varios meses internado en el Hospital de la Comunidad. Tras ser dado de alta, Oscar volvió a ser ingresado la semana pasada. “El cuadro ya era irreversible y los médicos no pudieron hacer nada”, contó.
La noticia de su muerte fue dada a conocer por la doctora Lorena Arias, abogada que representó a varios familiares de víctimas del ARA San Juan. “Marta me contó de la muerte de Oscar esta mañana y me pidió que lo difundiera. Para mí no eran clientes, yo los sentía como familiares por todo lo que compartimos en estos dos últimos años. Todo lo que le pasó a este hombre fue un daño colateral de la muerte de su propio hijo”, señaló la letrada a Infobae, quien utilizó su cuenta de Twitter para enviar un sentido pésame.
blockquote class="twitter-tweet">#arasanjuan pic.twitter.com/4Boo637B4r
— Dra. LORENA ARIAS ⚓️ (@SoylorenaArias) January 24, 2020
“Ayer despedimos a Oscar, el papá de Celso. Ayer despedimos a un esposo, a un padre, a un abuelo. Su orgullo era su familia. Su único hijo varón siguió sus pasos. Las Fuerzas Armadas eran su casa, pero los suyos eran su hogar. Era veterano de guerra, estaba preparado para dar la vida por la patria pero no para despedirse de su hijo, no así”, tuiteó Arias. Y concluyó: “Cuando el dolor atraviesa el alma, el cuerpo no resiste. Le debemos la verdad y la justicia”.
Al igual que Celso Vallejos, su hermana Malvina decidió seguir los pasos de su padre y actualmente trabaja en la Base de Mar del Plata, pero como personal civil, donde también lo hicieron ellos. “Con Celso éramos tres hermanos. Él y yo nacimos en Chaco pero Malvina en la Base Naval de Puerto Belgrano. Y como mi papá sobrevivió a la guerra decidió llamarla de esa forma. Ella ahora trabaja en la obra social IOSFA, donde solo trabajan los hijos de los militares”, detalló Marta, quien señaló que hoy su hermana es la única integrante de la familia que sigue ligada a la fuerza.
Con los hombres de la famillia Vallejos ya fallecidos, el encargado de continuar –o no el legado masculino será Thiago Valentín, hijo de Celso y nieto de Oscar.
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