Los seis turistas ingleses no tuvieron tiempo de anunciarse en la recepción del hotel Faena el sábado 14, a las 11 de la mañana. Fueron atacados por un grupo de asaltantes cuando se disponían a descender de la combi que los había llevado del aeropuerto de Ezeiza hasta Puerto Madero. Tampoco pudo hacer el check-in un ciudadano canadiense de 46 años en la tarde del 12 de noviembre en la entrada del hotel Intercontinental. Dos hombres armados, a cara descubierta, le robaron un bolso Louis Vuitton con una laptop y un cargador: había llegado de Miami un par de horas antes. Cuatro días después, huéspedes del hotel Palacio Duhau - Park Hyatt sufrieron un intento de asalto en la rampa vehicular: el delincuente armado, que finalmente no pudo sustraer elementos de valor, huyó en moto. El 5 de diciembre, en el hotel Mío del barrio de Recoleta, ocurrió otro robo descarado: un turista griego debió entregar su reloj cuando a punta de pistola un ladrón lo amedrentaba en la sala de recepción (video).
La mecánica repetida supone un modus operandi. Ataques violentos, audaces, temerarios, intempestivos, a turistas en una situación similar: pasajeros asaltados antes de ingresar al hotel, y después de haber aterrizado en el aeropuerto de Ezeiza. En noviembre, la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT) ya había advertido acerca de la repetición de estos casos. En un comunicado dirigido al presidente del Ente de Turismo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Gonzalo Robredo, la AHT expresaba “la profunda preocupación” de sus miembros por estos hechos en los que “no sólo se han visto en peligro los pasajeros alojados en estos establecimientos, sino también sus empleados”.
El documento precisa que los asaltos en los hoteles “no sólo no han disminuido, sino que cada vez denotan un rasgo más agresivo, con la utilización de armas de fuego como principal característica”.
Por otra parte, fuentes de la filial Buenos Aires de la Asociación también manifestaron, en diálogo con Infobae, su inquietud ante la escalada de violencia y la audacia de estos sucesos, cuando hasta hace pocos meses los hechos de inseguridad se reducían a meros arrebatos. “Estamos más que preocupados por lo que está ocurriendo. Es muy importante que se tomen las medidas necesarias, que interactúen todos los integrantes de las fuerzas de seguridad para evitar este tipo de hechos y que no se vuelvan repetir”, pidió.
En la nota dirigida a Robredo, la filial señala: “El arrebato, descuidismo y mostaceo están dando paso a asaltos a mano armada, ya no en las inmediaciones de los hoteles, sino en los accesos e incluso en el interior de los mismos”.
“El caso de mayor trascendencia fue el ocurrido el pasado 12 de noviembre en el Hotel Intercontinental -denuncian en el texto-, donde cuatro delincuentes que se trasladaban en moto atacaron a golpes y a fuerza de pistola a un pasajero en la puerta de acceso al hotel, apuntando al mismo tiempo a empleados y otros huéspedes alojados”.
“Es un problema que viene de hace bastante tiempo pero que curiosamente se ha acentuado en los últimos meses”, dijo, por su parte, Roberto Amengual, presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina. El titular de la entidad reveló que elevaron la misiva a nivel nacional porque son sucesos que comprometen al país como destino turístico: “Más allá del factor coyuntural y de la desgracia de la familia inglesa, a nivel turístico repercute en todos los aspectos, en el posicionamiento, en la mente de aquellos que quieren venir al país. Por eso entendemos que no es sólo un problema a nivel local sino a nivel destino: la seguridad es parte de lo que conforma el atractivo de un país y atenta con lo que venimos trabajando en la promoción de Argentina como destino turístico de calidad”.
En la misma línea, se pronunció la Cámara Argentina de Turismo. Además de repudiar los hechos de violencia y robo, de dedicar condolencias a los familiares, de exigir la instrumentación de medidas que velen por la seguridad de todos los habitantes porteños, expresó: “La actividad turística en la Argentina se ha consolidado como el cuarto complejo exportador y es motor de la economía nacional. La gravedad de los incidentes ocasionados significa un retroceso para la imagen, la hospitalidad y la promoción de nuestro país ante el mundo”. Los representantes del sector consultados por Infobae destacaron que la industria del turismo es la cuarta generación de divisas que ingresan al país por detrás de los oleaginosos, los cereales y las automotrices.
Percibimos que existe una correlación con pasajeros que aterrizaron en Ezeiza, que se dirigen a hoteles reconocidos y son atacados antes de entrar (Roberto Amengual, presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina)
Amengual precisó que están trabajando conjuntamente con la Ciudad de Buenos Aires en procura de hallar mecanismos de prevención para evitar estas circunstancias. “Evidentemente los esfuerzos no han sido suficientes”, graficó. Desde su interpretación de las situaciones, considera una situación común en los robos a turistas: “Percibimos que existe una correlación con pasajeros que aterrizaron en Ezeiza y son atacados antes de entrar al hotel. Muchas veces son pasajeros que vienen acompañados por un grupo, que son buscados de manera particular en Ezeiza y que se dirigen a hoteles reconocidos”.
Por eso, el vocero de la filial de Buenos Aires solicita que participen todas las fuerzas de seguridad en la investigación de estos sucesos al advertir que, en teoría, son hechos que comienzan en una jurisdicción y terminan en otra. En los próximos días anunció que volverán a reunirse con autoridades de los organismos de seguridad y con el ente de turismo de la Ciudad para coordinar acciones tendientes a solucionar esta problemática.
<b>La carta de la Asociación de Hoteles de Turismo de la Rep. Arg. al Presidente del Ente de Turismo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires</b>
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