El titular de la Cámara Federal de la Seguridad Social, Luis Herrero, presentó su renuncia ante el ministro de Justicia de la nación, Germán Garavano, por lo que dejará su cargo a partir de enero de 2020.
Integrante de la Cámara Federal de la Seguridad Social desde 1989, Herrero es conocido por su rol en las decenas de miles de juicios iniciados por jubilados y pensionados contra el Estado Nacional en los que reclamaban por el ajuste en sus haberes.
“Tengo el honor de dirigirme a V.E. a fin de presentarle mi renuncia al cargo de Juez de la Sala II de la Cámara Federal de la Seguridad Social que vengo desempeñando desde el 14 de febrero de 1989 a partir del 1° de enero de 2020; en atención en que me ha sido concedido el beneficio jubilatorio”, sostiene la misiva que Herrera le envió a Garavano este jueves.
En 2011, se registró uno de los momentos más tensos entre Herrera y el entonces gobierno de Cristina Kirchner. Es que en julio de ese año, la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSeS) anunció que llevaría a la Corte Suprema de Justicia de la Nación la recusación “sin causa” contra el juez de la Cámara de Seguridad Social.
El organismo que en ese momento dirigía Diego Bossio había recusado al camarista Herrero en casi 100 causas sólo en un día debido a que el magistrado jugaba un rol clave en el ingreso de unas 1.500 apelaciones por mes en juicios iniciados por jubilados contra la ANSeS, en su mayoría por reajustes por movilidad previsional.
El embate del organismo previsional contra Herrera escaló hasta llegar al Consejo de la Magistratura, que en noviembre de 2014 archivó el pedido de juicio político contra Herrero y otro juez del fuero de la Seguridad Social, Emilio Fernández, los dos acusados de hacer lugar a varias medidas cautelares a favor de reclamos de reajustes de haberes de jubilados y pensionados. La acusación había sido por presuntas irregularidades en dos expedientes que terminaron favoreciendo a los jubilados.
En el plenario se sometió a votación el dictamen del juez Ricardo Recondo, quien aconsejaba desestimar la denuncia; y otro del viceministro de Justicia, Julián Alvarez, que proponía el archivo del expediente por el transcurso del tiempo. Por mayoría, el organismo votó por archivar la denuncia contra Herrero y Fernández, y así ambos siguieron integrando la sala II de la Cámara de la Seguridad Social.
El año pasado, en una entrevista con el sitio Parlamentario, Herrero aseguró que lo que sucedió en 2011 empezó “una nueva ofensiva del Poder Ejecutivo justo cuando la ex presidenta Cristina Fernández obtuvo más del 50% de los votos en su segundo mandato y en junio de 2011 se tomó la decisión de ‘excluirme’ del Poder Judicial en una campaña durísima que soporté durante cinco años que cesó en noviembre de 2015, cuando el Consejo de la Magistratura en el plenario rechazó en forma unánime todas la denuncias que quedaban pendientes en mi contra”.
Además, Herrero explicó que sus decisiones no eran “contra la ANSeS”, sino que “le hacíamos lugar a medidas cautelares que obligaban al director ejecutivo, Diego Bossio, a cumplir con fallo Badaro en el plazo de 30 días bajo apercibimiento de una multa personal a él”.
“El propósito de la medida era evitar que los jubilados realizaran miles de juicios en perjuicio del Estado que somos todos, perdiendo el tiempo y los pocos dineros de sus haberes míseros y llenando los juzgados de trabajo infructífero. Las cautelares eran medidas protectorias que apuntaban al cumplimiento del fallo de la Corte y generó la reacción política de parte de ANSeS y del Poder Ejecutivo que explica la persecución que sufrí”, detalló.
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