Otra vez, representantes de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) y Policía de la Provincia de Buenos Aires protagonizaron un violento enfrentamiento en las inmediaciones de una destilería de YPF en la ciudad de La Plata.
Poco después de las 7 de la mañana del jueves, empleados de una obra en construcción dentro de la compañía petrolera, que no pudieron ingresar a sus puestos de trabajo, se cruzaron con las fuerzas de seguridad. Hubo numerosos disparos de balas de goma, lanzamientos de piedras y hasta el momento no se precisó el número de heridos.
El hecho se produjo en la Puerta 4 de la planta de YPF, donde desde hace casi un mes se venía concentrando el grupo de manifestantes de la UOCRA, a causa de los despidos de la empresa contratista AESA en una obra dentro de la destilería, y ya habían registrado incidentes similares.
La obra se había mantenido detenida durante unos 24 días debido al despido de 32 empleados, a la suspensión de otros 74 y a un reclamo de desajustes salariales a causa del incremento de la inflación en el último año.
El miércoles, desde AESA se informó que hoy, jueves, se reanudarían los trabajos en las obras. Sin embargo, se indicó que de los 780 obreros responsables del trabajo, sólo podrían ingresar a la obra unos 650.
Fue por eso que las Fuerzas de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires desplegaron desde la madrugada de hoy un importante operativo en las inmediaciones de la destilería, debido al riesgo de que hoy se produjeran incidentes al momento del ingreso a los puestos de trabajo.
Así, un grupo de representantes de la UOCRA denunció que en la mañana de hoy, jueves, se le impidió el ingreso a nada menos que 200 empleados. Eso incrementó la tensión en el lugar y abrió la puerta para que se produjeran los incidentes: los empleados a los que se le impedía el ingreso trataron de acceder a la obra y la Policía tomó las medidas necesarias para impedirlo. El choque fue inevitable.
"Estábamos en la Puerta 4 reclamando por nuestros puestos de trabajo, como todos los días, cuando la Policía reprimió porque empezamos a quemar gomas", contó un manifestante llamado David al diario El Día, de La Plata. El mismo empleado aseguró haber recibido un disparo de goma en el ojo y acudió al Hospital Rossi para ser atendido.
A lo largo de las últimas semanas, el clima en el lugar era cada vez más tenso. Dos facciones diferentes de la UOCRA se habían enfrentado a causa de los despidos y suspensiones de los empleados de AESA y la presencia de la Policía ya se había convertido en algo habitual de la escenografía de la Puerta 4.
De hecho, un sector de los empleados de la compañía contratista que defendía la medida de la empresa había advertido que desde la UOCRA "nunca se denunció el conflicto ante el Ministerio, como se había convenido en las reuniones previas con la CGT regional".
SEGUÍ LEYENDO: