El primer caso registrado de la muerte de un peatón en el marco de una situación de inseguridad vial se dió en 1897, cuando Bridget Driscoll, una ciudadana de Londres, muró atropellada por un automóvil.
La fecha fue adoptada por la Organización Mundial de la Salud para marcar el Día mundial del Peatón, el cual tiene como finalidad promover el respeto hacia el ellos y recordar los derechos y obligaciones que implica el circular a pie.
"El peatón es el usuario más vulnerable del tránsito en términos de protección porque, al igual que el motociclista, no tiene ninguna estructura que lo cubra más que su propio cuerpo. Pero no es el más vulnerable en términos de trasgresión", dijo Carlos Pérez, director Ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
Y agregó: "Todos los actores de tránsito somos responsables de nuestra vida y de la de los demás. Todos los días y en todas la situaciones debemos manejarnos siempre con el ejemplo".
Esa afirmación queda confirmada por los informes y sus impactantes cifras.
Las estadísticas
Las estadísticas mundiales indican que los peatones son los usuarios más vulnerables en el sistema del tránsito, sumando cada año más de 270.000 muertes. En Argentina, se estima, que durante el 2018 más de 1.600 peatones murieron en siniestros viales: 650 murieron en la ciudad de Buenos Aires, cifra que constituye el 44% del total de los muertos en el tránsito.
Las cifras fueron difundidas por la Asociación Civil Luchemos por la Vida que en un reflexivo informe, abre el interrogante: "¿Es dar la prioridad peatonal un favor u obligación? Cuando tenemos la suerte que un vehículo nos dé la prioridad peatonal en las esquinas, en general lo agradecemos con un gesto o una palabra, pero ¿es razonable agradecer que nos den la prioridad?"
A lo que responden: "Dar las gracias es algo positivo, pero en estos casos, más bien, pone de manifiesto que sentimos que nos están haciendo un favor y no que es el cumplimiento de una obligación por parte de los conductores y el ejercicio de un derecho como peatones".
En ese sentido, señalan que la legislación de tránsito establece que los vehículos deben darle la prioridad a los peatones que cruzan la calzada por las esquinas o sendas peatonales y con el semáforo a su favor, donde lo hay.
"Sin embargo, según un estudio de Luchemos por la Vida, solo el 10% de los conductores les da la prioridad en la ciudad de Buenos Aires. Esto estimula a los peatones a cruzar por cualquier parte. Sólo un 10% de estos cruzan correctamente", determinan.
Por su parte, Axel Dell`olio, titular de la Asociación para la Disminución de Siniestros Viales (ADISIV), aseguró que "cuando imaginamos una víctima por siniestro vial, el imaginario colectivo nos representa a un pibe en una moto, sin casco, a 200 kilómetros por hora; o un auto haciendo zigzag en una autopista congestionada. Pero la realidad es que cuando nos adentramos en los datos, encontramos que en las grandes ciudades del país más del 40 % de los muertos por inseguridad vial simplemente van caminando".
Además, asevera que "correspondería identificar la problemática para actuar en consecuencia", lo que considera "nos incluye a todos los que conformamos el ecosistema vial".
"Muchas veces como usuarios le demandamos al Estado que cambie normas pero luego son los mismos usuarios quienes las transgreden", determina Dell'olio.
A ello agregó: "Las víctimas por siniestro vial en la Argentina, no bajan de 5.000 al año, más de 10 fallecidos por día por causas evitables".
Desde Luchemos por la Vida llaman a re pensar la convivencia urbana: "Implementar cambios urbanísticos para favorecer que los peatones y los conductores se encuentren lo menos posible, incrementando las áreas peatones, con pasos peatonales bajo y sobre nivel, reductores de velocidad, chicanas, etc".
A ello suman la necesidad de "controlar y sancionar a los conductores transgresores de la prioridad peatonal (¡casi no se labran actas por esta grave infracción!) y de las velocidades máximas permitidas, para evitar que continúen estas muertes evitables".
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