La cooperativa que funciona en el CEAMSE y recicla 15 toneladas de residuos por día: “La basura recupera a muchos chicos de la droga”

La organización tiene más de 15 años. De ella participan 100 trabajadores que van todos los días a al predio de José León Suárez y aseguran ganar 12 mil pesos por mes. Se acaba de estrenar un documental que cuenta su historia

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La cooperativa Bella Flor funciona en el predio del CEAMSE, en la localidad de José León Suárez

Diego Duarte estaba parado en la montaña cuando el camión lo enterró. Era el 15 de marzo de 2004 en plena noche, a eso de las once. Junto a su hermano Federico, Diego entró de manera clandestina al predio del Ceamse para encontrar materiales para vender. Ya lo había hecho otras veces. A la noche, decían, llegaban los mejores camiones, los que tenían basura de mejor calidad. Pero esa noche fue la última. No lo vieron, y en una de las descargas de basura, lo taparon para siempre. Quince años después, su cuerpo nunca apareció.

Era otro tiempo, la cantidad de gente que acudía a la montaña desde la crisis del 2001 superaba a las mil personas por día. La desaparición de Diego Duarte fue un antes y un después. A partir de entonces, quienes acudían a diario decidieron cambiar sus condiciones, dejar de exponerse a ese peligro.

La cooperativa emplea a cerca de 100 personas que llevan adelante el reciclaje
La cooperativa emplea a cerca de 100 personas que llevan adelante el reciclaje

Nora Rodríguez por ese entonces también subía a la montaña. Hoy, es una de las creadoras de la cooperativa Bella Flor, una iniciativa de la gente de la zona de José León Suárez que logró reemplazar aquellas incursiones llenas de peligro por un oficio que ya emplea a 100 personas. "La cooperativa está pensada para generar puestos de trabajo y reciclar las vida de los jóvenes. Uno acá los trae perdidos en la droga. Y al tiempito vos los ves y son ellos, y son felices porque aprendieron un montón de cosas", dice Nora.

-¿La basura los recupera?

-La basura recupera a muchos chicos de la droga, sí. Porque aprenden responsabilidades. Aprenden a que tienen que cumplir, a que tienen que respetar al otro, que la droga los lleva a terminar en dos caminos: la muerte o la cárcel.

Nora camina de acá para allá con un cuchillo Tramontina en el bolsillo. Lo usa con el filo para afuera, de modo que el vaivén de sus manos al caminar es un juego peligroso. Cada vez que su muñeca pasa junto a su cadera parece que se va a cortar, pero no sucede.

“La cooperativa está pensada para generar puestos de trabajo y reciclar las vida de los jóvenes. Uno acá los trae perdidos en la droga. Y al tiempito vos los ves y son ellos, y son felices porque aprendieron un montón de cosas”, dice una de las personas a cargo de Bella Flor
“La cooperativa está pensada para generar puestos de trabajo y reciclar las vida de los jóvenes. Uno acá los trae perdidos en la droga. Y al tiempito vos los ves y son ellos, y son felices porque aprendieron un montón de cosas”, dice una de las personas a cargo de Bella Flor

"El cuchillo acá es una herramienta de trabajo en la cooperativa, porque si vos vas a romper bolsas con la mano puede pasar que enganches vidrio o latas y ahí te cortás. El cuchillo disminuye el riesgo porque das el tajo sin la mano y ahí das vuelta la bolsa", explica.

La cantidad de gente que acudía a la montaña desde la crisis del 2001 superaba a las mil personas por día. La desaparición de Diego Duarte fue un antes y un después. A partir de entonces, quienes acudían a diario decidieron cambiar sus condiciones, dejar de exponerse a ese peligro

Dentro del predio del Ceamse hay una planta que está a cargo de la Cooperativa. Cerca dela entrada hay varias montañas de basura, bolsas negras y verdes agolpadas en una esquina. Del otro lado, una parrilla prepara chorizos que se repartirán más tarde. Hay un galpón gigante del que sobresale una especie de tobogán naranja que va a dar en un enorme volquete. Ese volquete se llama tolva y es donde los camiones depositan la basura que llega a la planta para que ahí se clasifique y se separe el material que sirve para vender, y se deseche el resto.

Por día, pasan por la tolva más de 15 toneladas de basura. Una cinta sube las bolsas desde la tolva hasta una pasarela donde los trabajadores de la cooperativa, distribuidos de un lado y del otro, van separando los residuos. Lo que sirve -principalmente botellas de plástico, pero también de vidrio y cartones- lo sacan de la cinta y lo tiran por un tubo a un contenedor. Luego llevarán el contenido a una prensa y se armarán los "fardos" de material. Dicho en criollo, separan la basura que se puede reciclar de la inservible.

Por día, pasan por la tolva de la cooperativa más de 15 toneladas de basura
Por día, pasan por la tolva de la cooperativa más de 15 toneladas de basura

-Después de 20 años trabajando en la basura, ¿hay algo que hayas aprendido de eso, de este oficio?

-Sinceramente la basura me ayudó muchísimo a mí. Primero, en lo social. Me enseñó a ver al otro. Cuando uno trabaja solo, no ve la necesidad del otro. Y acá aprendí que hay mucha gente que necesita mucho. Que no solamente yo estoy mal, sino que hay muchos que están hasta peor que yo incluso. Mi marido murió de cáncer. El año pasado murió mi hijo de un infarto. Pero hay mujeres que viven solas o son abandonadas por los maridos, con hijos, cuatro, cinco, y hay chicas que son golpeadas… Entonces son problemáticas más graves que las que tengo yo. Y esto me enseñó a verlo. Antes a mí no me importaba nada. Era yo y nada más que yo. Y sin embargo la cooperativa expresa todo lo contrario: primero es el otro, después yo. Y hoy peleo y la remo por los chicos.

Se acaba de estrenar el documental “Nueva Mente”, del cineasta Ulises de la Orden, que cuenta la historia del Ceamse y la creación de Bella Flor
Se acaba de estrenar el documental “Nueva Mente”, del cineasta Ulises de la Orden, que cuenta la historia del Ceamse y la creación de Bella Flor

Por estos días la cooperativa está de fiesta por el estreno del documental Nueva Mente, de Ulises de la Orden, que cuenta la historia del Ceamse, de las carreras a la montaña, y fundamentalmente del trabajo de Bella Flor. "Los que vivimos en Buenos Aires, hacia finales de la década del noventa comenzamos a ver a miles de personas y familias enteras que recorrían las calles hurgando en la basura en busca de alimento. (…) Urge solucionar el problema de la basura. Y la solución nos la están brindando (al menos el ejemplo) estas personas organizadas en cooperativas, que han reciclado su vida con dignidad, personas que estaban al margen de todo", escribe el director de la película, que se estrenó esta semana en el cine Gaumont.

Cuando uno trabaja solo, no ve la necesidad del otro. Y acá aprendí que hay mucha gente que necesita mucho. Que no solamente yo estoy mal, sino que hay muchos que están hasta peor que yo incluso. Mi marido murió de cáncer. El año pasado murió mi hijo de un infarto. Pero hay mujeres que viven solas o son abandonadas por los maridos, con hijos, cuatro, cinco, y hay chicas que son golpeadas… Entonces son problemáticas más graves que las que tengo yo. Y esto me enseñó a verlo. Antes a mí no me importaba nada

Brian tiene una mirada seria, como si nada lo entusiasmara. Mientras proyectan el largometraje en un segundo galpón acondicionado para la ocasión, él sale a tomar aire y mira silenciosamente cómo sus compañeros van de acá para allá. Lo acompaña a todos lados Rodrigo, un amigo más silencioso que él incluso, solo sonríe. Brian tienes 26 años, vive en el Barrio Independencia. Es la segunda vez que trabaja en la planta. Lo hizo de joven, luego probó un tiempo trabajando como empleado de limpieza en un supermercado, y hoy volvió a la basura. Dice que no reniega de su oficio, de "cirujear", que así lo crió la madre: "no importa el laburo que tengas, sea revisar basura o trabajar en la mugre, es un trabajo, y mi mamá me enseñó que lo importante es trabajar".

Los trabajadores de la cooperativa van separando los residuos. Lo que sirve -principalmente botellas de plástico, pero también de vidrio y cartones- lo sacan de la cinta y lo tiran por un tubo a un contenedor
Los trabajadores de la cooperativa van separando los residuos. Lo que sirve -principalmente botellas de plástico, pero también de vidrio y cartones- lo sacan de la cinta y lo tiran por un tubo a un contenedor

-¿Cómo es trabajar con la basura?

-Yo con la basura me siento cómodo. Es como trabajar en una panadería… Tenés que juntar el material y revisar la bolsa para conseguir el alimento. Para conseguir tu propia comida. Tal vez la mayoría piensa que es algo grosero, o que es una estupidez hacerlo, pero para nosotros es un trabajo y es una ayuda, aunque a veces es difícil porque viene todo mezclado.

-¿Cuánto ayudaría que la basura venga clasificada?

-Apartando los materiales nos ayudarían bastante, porque nos alejamos del peligro de encontrar jeringas, que ya nos ha pasado. Si hay jeringas usadas nos podemos agarrar alguna enfermedad porque al revisar la bolsa nos podemos pinchar con esas jeringa. Las jeringas son el principal problema para nosotros.

-¿Cuánto ganás por mes acá?

-Entre cinco mil y seis mil pesos por quincena.

-¿Te alcanza?

-A mí mientras tanto me está alcanzando porque lo que yo saco de acá de material también me sirve en casa, sea carne, fideos, puré de tomate, ropa, abrigo para los chicos… Así que eso compensa.

Con el material prensado se van armando los fardos
Con el material prensado se van armando los fardos

-¿Qué pensás de la gente que hoy está yendo a la montaña todavía?

-No pienso que está mal porque veo en ellos personas que buscan la forma de alimentar a su familia o alimentarse ellos mismos. Para mí, el que estén yendo a la montaña a buscar para comer es un trabajo digno a diferencia de salir a robar o matar a alguien por cincuenta pesos… Eso sí que no. No es lo mío. Prefiero mil veces salir a cartonear, ir a cirujear bolsas antes de salir a robar.

-¿Te gustaría que tus hijos trabajen acá?

-Me parece que sería un buen laburo para mis hijos porque es donde se empieza de cero. Acá es donde ellos van a aprender. Me gustaría que aprendan acá cómo se trabaja. Que prueben acá y que intenten.

-¿Si tuvieras que imaginarte de acá a 10 años? ¿Si tuvieras que decir algo que soñaś…?

-¿Mi futuro?… ¿De acá a diez años?… Uh… Seguir siendo un empleado más, y seguir perteneciendo a esta empresa.

“Nueva Mente”, de Ulises de la Orden, puede verse en el Cine Gaumont, avenida Rivadavia 1635, CABA
“Nueva Mente”, de Ulises de la Orden, puede verse en el Cine Gaumont, avenida Rivadavia 1635, CABA

-Pero supongamos que viene Dios y te concede un deseo…

-¿Un deseo para mi vida? No sé, es una pregunta bastante pensativa. Pero sería fortalecer mi trabajo y estar más con mi familia, y el día de mañana tratar ayudar con lo que pueda a las personas que no tienen un buen empleo.

Fotos y video: Lihue Althabe

Nueva Mente, de Ulises de la Orden, puede verse en el Cine Gaumont, avenida Rivadavia 1635, CABA, todos los días a las 12.15 y 19.15, hasta el miércoles 31 de julio

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