Imágenes en el celular, desconfianza y evasión

El Informe sobre Noticias Digitales de la Universidad de Oxford, basado en mas de 75.000 encuestas en 38 países, revela las tendencias claves del consumo de noticias en Argentina, Estados Unidos, México, Canadá, Brasil y Chile

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Una experiencia marcada por la sucesión casi infinita de imágenes en pequeñas pantallas, y por actitudes de creciente desconfianza y evasión.

En un continente recientemente signado por las elecciones de Trump en Estados Unidos y de Bolsonaro en Brasil, y por el No en Colombia, esta frase sintetiza las tendencias claves en los seis países de las Américas incluidos en el Informe sobre Noticias Digitales de 2019 de la Universidad de Oxford publicado hoy.

Este es el estudio más extenso a nivel global sobre el estado del periodismo digital, basado en más de 75.000 encuestas a usuarios en 38 países.

Si el televisor y el diario fueron las fuentes de noticias dominantes del siglo XX, la web y las redes cumplen este rol en el siglo XXI.

Un promedio del 83% de los encuestados en los seis países del continente (Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos y México) se informa través de fuentes digitales. A internet le siguen la televisión con un 67% de promedio y el diario de papel con el 29%.

El dispositivo preferido para acceder a las noticias digitales es el teléfono inteligente. En promedio, un 71% de los encuestados lo utiliza para consumo de información, muy por arriba de la computadora (46%) y la tablet (16%).

La popularidad del teléfono inteligente como dispositivo de acceso a las noticias es cinco puntos porcentuales más alta en las Américas que en el promedio de los 38 países incluidos en el estudio de la Universidad de Oxford. Esta popularidad es particularmente notoria en los países más pobres de la muestra en la región: Argentina (78%), Brasil (77%), Chile (80%), y México (81%), versus Canadá (51%) y Estados Unidos (57%). Esto indica que el smartphone es una tecnología fundamental para equiparar la posibilidad de conexión al universo digital entre los sectores de menores recursos, para los cuales es más difícil el acceso a la computadora y la tablet.

Una gran parte de la población se entera de las noticias en las redes sociales. Facebook es la que más alcance tiene para estos fines, con un promedio del 55% de los encuestados en las Américas. A esta red le siguen YouTube (31% en promedio), WhatsApp (30%), Instagram (16%), Twitter (16%) y Messenger (13%). Además, los encuestados dicen pasar menos tiempo informándose de la actualidad en Facebook, y más en WhatsApp e Instagram.

En el caso de WhatsApp hay grandes diferencias entre los países del continente. Mientras que en Latinoamérica el consumo de noticias en esta red es muy alto (53% de los encuestados en Brasil dice hacerlo, el 41% en México, el 40% en Chile y el 39% en Argentina), en Canadá y Estados Unidos su uso con estos fines es casi nulo, con el 4% en ambos casos. Esto último podría deberse al escaso uso de esta plataforma en ambos países.

Un resultado clave del informe es que Instagram es la red social de mayor crecimiento para el consumo de noticias en la región: en promedio su uso para este fin se incrementó seis puntos porcentuales respecto de 2018, el doble que WhatsApp y el triple que Facebook. Por el contrario, Twitter fue la única red social en la que disminuyó el consumo de noticias en el último año. Los usuarios prefieren las imágenes por sobre las palabras.

A pesar del alto nivel de consumo de noticias digitales en general y en las redes en particular, los encuestados manifiestan tener poca confianza en dicha información. En promedio, solo el 44% de los encuestados en las Américas confía en las noticias en general. Esta cifra baja al 28% en el caso de las noticias que se consumen en las redes sociales.

Lo que es especialmente preocupante es que hay una caída muy fuerte de la confianza en las noticias durante el último año: el promedio regional es de una baja de cinco puntos porcentuales, mucho mayor a la de dos puntos porcentuales a nivel global. El declive es particularmente pronunciado en Brasil (11 puntos porcentuales), posiblemente influido por las disputas sobre las noticias falsas durante la campaña presidencial de finales de 2018.

En virtud de la escasa credibilidad y su tendencia a la baja, no sorprende que un importante porcentaje de los encuestados en las Américas evita el consumo de las noticias: en promedio un 38% hace esto "frecuentemente o a veces". Este comportamiento es especialmente fuerte en Argentina, donde casi la mitad de la población evita el contacto con la información de la actualidad.

Evitar deliberadamente las noticias es una forma de evadirse de la realidad. No de la realidad que vivimos diariamente, de la cual es imposible sustraernos. Pero sí de la que aqueja a nuestros conciudadanos y nuestros países, y también a la de rincones lejanos en el mundo. Esto limita la capacidad de darle sentido a nuestra experiencia personal dentro de un marco más amplio de fenómenos y tendencias sociales.

Si una alta tasa de evasión fiscal limita los recursos económicos del Estado, una alta tasa de evasión noticiosa limita los recursos simbólicos de la sociedad. Así como un Estado económicamente pobre afronta dificultades en satisfacer las necesidades materiales de sus ciudadanos, una sociedad simbólicamente pobre se ve limitada en satisfacer las demandas culturales y políticas de sus miembros.

La riqueza de imágenes que miramos en Instagram mediante los teléfonos inteligentes y la pobreza informativa que devienen de la desconfianza y la evasión noticiosa son postales de una sociedad signada por la fascinación con la hiper-conectividad y el distanciamiento de los medios.

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