Ya no hay discusión: la ciudad de Buenos Aires, como muchos otros destinos turísticos del mundo, tendrá baños públicos en los espacios verdes. ¿Serán automáticos como en Londres, al aire libre como los polémicos mingitorios parisinos lanzados este año o móviles como los de Austin, Texas?
Aún no está definido el diseño, sin embargo, por etapas las 40 áreas verdes con más de 3 hectáreas que tiene el distrito contarán con este servicio para turistas y vecinos que eligen pasar el día, correr o simplemente despejar la vista.
"Celebramos la iniciativa porque creemos que aporta a nuestra intención de que la gente pueda disfrutar cada vez más de los espacios públicos de la Ciudad. Según nuestro relevamiento, hay unos 40 espacios con esas características", explicó a Infobae Juan Pablo Limodio, subsecretario de Administración del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño.
Según el funcionario, ya hay dispositivos en 10 áreas verdes y funcionan según los días y horarios más visitados por el público. La idea es ir implementando la ley en etapas y seguiremos los lineamientos en términos de los requerimientos que se piden. Tenemos que estudiar los modelos que existen en el mercado y los que ya hay instalados y priorizar, según el uso y la infraestructura existente", agregó Limodio.
La Legislatura sancionó un proyecto de María Rosa Muiños (Bloque Peronista) y de Diego García de García Vilas (Vamos Juntos) en el que se detalla que las instalaciones serán obligatorias en todas las zonas que superen la superficie antes mencionada.
La norma establece características constructivas que deberán tener los baños: "Contar con módulos con inodoro, puertas con sus respectivas trabas de seguridad que indiquen si está libre u ocupado y gancho para ropa. En el área de lavabo se colocarán dos lavamanos, dosificador de jabón, porta-toallas de papel, basurero, espejo y cambiadores para niños tanto en baños masculinos como femeninos, o bien en un área accesible para ambos sexos", como lo establece su artículo 4.
También contempla la preservación de la veintena de parques capitalinos al estipular que las flamantes instalaciones sanitarias "deben sujetarse a lo dispuesto en las normas urbanísticas destinadas a impedir la desfiguración de la perspectiva del paisaje o perjuicios a la armonía paisajística o arquitectónica y también la preservación y protección de los edificios, conjuntos, entornos y paisajes".
"Este es un gran avance para todos los porteños y porteñas que quieren disfrutar de los parques de la Ciudad y tienen grandes dificultades a la hora de poder acceder a un baño. Tanto ellos, como turistas y visitantes, van a poder disfrutar de la vida al aire libre y van a tener garantizado el acceso libre a baños públicos", consideró Muiños.
En la ciudad de Buenos Aires el debate sobre los baños públicos es histórico: hace una década sólo funcionaban los de Puerto Madero que, durante un tiempo estuvieron cerrados. Pero la discusión data de años anteriores. Por caso, la revista Revisionistas cuenta que en Caras y Caretas de marzo de 1908 un fotógrafo que retrataba viejas casas de Buenos Aires relataba: "Desde la Plaza 24 de Noviembre -actual Plaza Garay- seguí por esa calle de Entre Ríos, que unida a la de Callao tiene ya dos leguas de largo. Cuando pasé al barrio del Norte, lo conocí por los mingitorios emplazados de distancia en distancia, que habrán creído innecesarios en los barrios del sur, dado que en ellos no se encuentra ninguno. Las tales construcciones van quedando abandonadas poco a poco, no sabemos si por incuria de la municipalidad, lo que sería lamentable o por falta de uso, lo que sería curioso y pintaría quizás el carácter de nuestro mundo distinguido, habitante de ese barrio de la ciudad tan favorecido y para quien, sin embargo, la calle no es sino un pretexto para lucir el carruaje y en la cual no se camina a pie por ser el ejercicio tarea poco elegante".
Esos mingitorios de chapa y madera fueron reemplazados por baños subterráneos, por la Ordenanza Municipal del 8 de mayo de 1923, que establecía que el gobierno de la cuidad o el órgano que designare proveería del servicio de Baños Públicos y exigía la "asepsia necesaria" para satisfacer las exigencias de la población.
En los últimos dos años se renovaron los sanitarios de las estaciones ferroviarias de Retiro y de Constitución. Para acceder hay que apoyar la SUBE en los molientes que están en el hall, o en los del subsuelo. Hubo algunas quejas de los usuarios porque hay que pagar para usarlos, sin embargo las autoridades explicaron que son para que los usen los pasajeros que ya pagaron su pasaje. En planta baja hay sanitarios que también fueron renovados y que pueden ser utilizados sin tener que apoyar la SUBE, aclaran desde la operadora ferroviaria. En todos los casos, están equipados con cambiadores para bebés y tienen espacios de uso exclusivo para personas con discapacidad.
Los baños públicos en el mundo
En varias ciudades del extranjero los baños públicos funcionan hace años, especialmente en aquellas que se destacan por ser destino turístico. Este año, por segunda vez, se publicaron los ganadores del concurso Toilet Tourism Awards, organizado por el portal australiano My Travel Research. La selección de los seis mejores baños se ha realizado a partir de la gran cantidad de solicitudes recibidas desde América del Norte, Europa, Asia y Australia. Los baños fueron evaluados en función de su diseño, originalidad, ubicación, accesibilidad y contribución económica a la localidad donde se encuentran.
Así, el ganador absoluto fue uno ubicado a 2.970 metros de altura en la cima del monte Schilthorn en Suiza, el restaurante giratorio Piz Gloria y el centro de visitantes han adoptado la temática de James Bond. La razón porque allí se ha filmado una de las películas de la saga.
Muy bien rankeado también quedaron los baños públicos de la Bowl Plaza, en Kansas. Tardaron cuatro años en construirse, son ahora una gran atracción en Lucas, la capital de las artes populares de ese estado norteamericano. Las paredes del baño están cubiertas por dentro y por fuera con mosaicos creados por residentes locales y artistas, y todo el edificio tiene forma de inodoro. La entrada tiene la forma de una tapa de inodoro subida, con bancos que representan la taza.
Este año también fueron noticia unos particulares mingitorios en París, al aire libre y a la vista de todo el mundo. Según el municipio, por ahora son una prueba piloto.