En 2013, una escalofriante grabación de los maltratos de un grupo de maestras a 40 nenes de entre 3 y 5 años en el jardín de infantes "Tribilín" de San Isidro que se hizo pública, comprobó las sospechas de varios padres que veían que sus hijos evidenciaban con comentarios y comportamientos que algo no andaba bien durante las horas que pasaban en el jardín.
Luego de que la causa cumpliera cinco años en enero sin avances, de que prescribiera en diciembre pasado la causa por "lesiones leves" y luego de casi dos años de postergación del debate oral por el resto de las acusaciones, esta mañana comenzó finalmente el juicio contra dos docentes y tres auxiliares del jardín acusadas de maltratar a los menores con golpes, gritos e insultos.
Mariana Buchniv, Yanina Gogonza, Vanina Diap, Noemí Núñez y Noelia Gallardo están acusadas de "presunto abandono de persona, amenazas y lesiones". En la primera de las siete audiencias del juicio, que será entre el 9 y el 18 de octubre, la fiscalía y los abogados de las diez familias querellantes expondrán los argumentos de la acusación. Los letrados que representan a las acusadas, en tanto, podrán exponer los lineamientos de las defensas.
El Tribunal Oral en lo Criminal N°4 de San Isidro, integrado los jueces Federico Ecke, Hernán San Martín y María Coelho, dará a las partes la posibilidad de que presenten, si consideraran conveniente, eventuales planteos de nulidad o impugnaciones.
El juicio oral, que debió haberse realizado en noviembre de 2016, se postergó cuando el tribunal rechazó el pedido de suspensión del juicio a prueba de las defensas de las imputadas, que presentaron entonces diversos recursos para tratar de revocar la resolución del tribunal y evitar que las imputadas fueran sometidas a juicio. Finalmente, todos los recursos fueron rechazados y se fijó la fecha del debate para este octubre, al que las cinco acusadas llegan en libertad.
El audio del horror
En febrero de 2013, Diego Hernayes, padre de una niña que iba al "Tribilín", escondió un iPod en la mochilita de su hija para conocer qué pasaba adentro del jardín. Muchos chicos se hacían pis antes de entrar, decían que no querían ir, lloraban y un nene incluso le contó a sus padres que le habían metido la cabeza en la pileta.
El resultado fue una grabación de más de cuatro horas donde se oyen los gritos e improperios a los que las docentes sometían a sus hijos. "No me hagas enojar porque vas a terminar mal. ¡Abrí la boca!", se escuchaba. "Decime por qué vomitaste, pendeja de mierda", en otro momento y luego, "por tu bien que hayas tragado, mogolica".
Gracias a ese audio que fue ampliamente difundido, se inició una investigación a cargo del fiscal Franco Servidio que terminó con la imputación de la dos docentes y las tres auxiliares.
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