La Secretaría de Transporte del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires le revocó la licencia a Nicolás Beno, un taxista que fue condenado por la Justicia por perseguir y atacar a un conductor de Cabify. La decisión, publicada este viernes en el Boletín Oficial porteño, marca un antecedente importante en medio de una ola de ataques de la mafia contra conductores de servicios modernos que buscan ofrecer alternativas para moverse mejor y más rápido en las grandes ciudades del mundo.
A través de la resolución 2018-454, firmada por el secretario Juan José Méndez, se dispuso además la inhabilitación por cinco años para ejercer el servicio público de transporte de pasajeros del conductor condenado.
Beno, de 40 años, fue condenado a dos meses de prisión en suspenso por haber perseguido y atacado con una gomera a un conductor de Cabify en octubre de 2017.
El agresor deberá realizar un taller de Convivencia Urbana dictado por la Subsecretaría de Promoción de Derechos Humanos. Además, deberá cumplir con un curso de Reeducación Vial y realizar 30 horas de actividades en la Oficina de Apoyo a Familias de Víctimas de Tránsito de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
La banda de los caza-Uber
En los últimos meses se multiplicaron los ataques mafiosos a trabajadores de Uber y Cabify, dos aplicaciones exitosas en el mundo que buscan generar alternativas para el transporte público de pasajeros.
Video de archivo: la patota caza Uber en acción
La irrupción de estos servicios generó la reacción de gremios de otras ramas del transporte que vieron una amenaza para su negocio. Sin embargo, en vez de preocuparse por modernizarse y brindar mejores alternativas a los usuarios, formaron un grupo que se dedica a realizar ataques, generalmente de madrugada. La actriz Oriana Sabatini, el diseñador Roberto Piazza y la modelo Cinthia Fernández fueron testigos y víctimas de estos vándalos.
Vidrios rotos, neumáticos tajeados, pintadas en la carrocería, persecuciones y hasta escraches virtuales. Ese es el modus operandi de estos delincuentes que pretenden eliminar la competencia y amedrentar a eventuales nuevos conductores. Por ahora esos aprietes no parecen haber dado mucho resultado. Es que un informe conocido esta semana reflejó que Uber tuvo el mayor crecimiento del mundo en la Argentina, a un ritmo de 400 choferes nuevos por semana.
"La caída económica definitivamente ayudó a muchas personas a encontrar a nuestra empresa como una alternativa de ingresos interesante", afirmó el director de desarrollo de negocio de Uber en Argentina, Felipe Fernández Aramburu. De acuerdo con sus últimos informes, uno de cada cinco conductores de Uber se encontraba desempleado al momento de sumarse a la compañía.
Seguí leyendo: