Unos chicos hacían su habitual práctica de fútbol en el club Deportivo Amistad, de Rosario, cuando el sonido de los disparos desató el pánico entre los niños y jóvenes que intentaron escapar de la zona.
Los balazos se escucharon una y otra vez el miércoles por la noche en el club del barrio Las Flores, en donde practican fútbol más de 100 chicos de entre 5 y 13 años.
"Los chicos corrían, gateaban para poder llegar a refugiarse en cualquier lado", contó una madre que fue a buscar a su hijo al lugar cuando comenzaron las corridas.
En diálogo con El Tres, la mujer aseguró que este tipo de drama no es novedad, ya que días atrás ya se había suspendido una práctica por otra balacera: "Esta parte está abandonada a la seguridad", lamentó.
De hecho, en el video quedó registrado que, a pesar de las corridas, otras personas escuchaban los tiros sin sobresaltarse, como si se tratara de una secuencia habitual.
El profesor de fútbol que presenció todo reclamó protección para el club y coincidió con la madre al indicar que ya se habían escuchado disparos cerca del predio: "Teníamos mallas de protección pero se las llevaron. Lo que pedimos es que nos cierren el predio para poder estar más seguros".
Ante esta realidad, desde el Deportivo Amistad decidieron suspender todas las actividades, inclusive las del fin de semana.
"Nunca tuvimos un tejido, sólo candados que los forcejearon y los dejaron maltrechos. El club no está cercado, no hay nada que sirva de perímetro, incluso pasan por el medio autos, carros y motos. Esto fue el agua que rebalsó el vaso", describió el presidente del club, Diego Fernández, en comunicación con Radio Dos.
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