El juez Gabriel Ghirlanda, que lleva adelante la causa por la muerte de Débora Pérez Volpin, ordenó un allanamiento al Sanatorio de la Trinidad de Palermo, donde la periodista, que tenía 50 años, falleció ayer.
En el operativo, realizado por efectivos de la Comisaría 23 de la Policía de la Ciudad, fueron secuestrados la historia clínica de Pérez Volpin, el libro de enfermería y la hoja de guardia, informaron fuentes judiciales.
El cuerpo de la periodista continúa en ese centro médico y esta tarde será trasladado a la morgue judicial, donde será realizada una autopsia para determinar las causas de la muerte.
Pérez Volpin murió tras sufrir un paro cardiorrespiratorio mientras era sometida a una endoscopía digestiva alta, pero la Justicia investiga el hecho como algo más que una cuestión accidental.
La carátula de la causa que lleva adelante el juez Ghirlanda es "homicidio culposo" y las fuentes revelaron que una de las médicas que atendían a la periodista se autoimputó. La profesional se presentó de forma espontánea en la Comisaría 23 porteña, donde la familia de Pérez Volpin hizo la denuncia por su muerte.
La comparecencia de la médica fue posiblemente para tener acceso a la causa, porque ni la fiscal Nancy Olivieri ni Ghirlanda acusaron formalmente a ningún sospechoso.
La endoscopía a la que se sometía la periodista y legislasdora porteña es un estudio médico mínimamente invasivo, que se realiza con anestesia general y que presenta riesgos mínimos. Debido a esto, los familiares de Pérez Volpin quieren saber qué fue lo que pasó.
Hasta el momento, la única información oficial de la clínica fue escueta, con un comunicado que decía lo siguiente: "El plan de estudios incluyó una endoscopía digestiva alta. En el día de la fecha durante la realización de dicho procedimiento padeció un paro cardiorrespiratorio que no respondió a las maniobras habituales de reanimación", dice el documento, firmado por el Servicio de Gastroenterología.