"El 31 de diciembre de 2018 vamos a estar acá". Florencia tiene 24 años, es de Ramos Mejía y busca sintetizar en una frase cómo vivió, junto a sus amigas, su primera experiencia en Punta del Este. Es que este año, en donde las autoridades locales esperan cifras récord en cuanto al hospedaje y el consumo, muchos jóvenes argentinos decidieron adelantar sus vacaciones y recibir el año nuevo en un contexto (para algunos) diferente.
Las propuestas que ofrece el balneario uruguayo podrían -tranquilamente- encontrarse en cualquier localidad de la costa atlántica argentina. Paradores concurridos, salidas nocturnas, ricas experiencias gastronómicas, música al aire libre y otras actividades. Sin embargo, gran parte de los argentinos que cruzaron la frontera para vacacionar aquí se apoyan en varios pilares: la seguridad, el ambiente y la paridad de precios en relación a los de Argentina.
Enrique Antía, intendente de Maldonado, dialogó con Infobae hace unos días y destacó este aspecto de la ciudad: "Un grupo de padres puede salir con sus amigos a comer y sus hijos están por otro lado, divirtiéndose, y nada les va a suceder. Es un lugar para la familia y nadie lleva a su familia a un lugar que no le da certezas, tranquilidades. Los argentinos eligen Punta del Este porque aquí se sienten seguros, y saben que siempre la van a pasar bárbaro".
Agustina, de 25 años, le dijo a Infobae que "volver caminando a la madrugada y saber que no te va a pasar nada es impagable. Es la primera vez que vengo con mis amigas a Punta del Este y nos sorprendió que, por ejemplo, estábamos en la playa, en las reposeras, y podíamos dejar nuestras cosas ahí que nunca nos faltó nada. Veíamos a la policía caminar continuamente por el lugar".
La joven de Lomas de Zamora aseguró, incluso, haber viajado con muchos prejuicios que luego descartó: "El ambiente nos encantó. Hay una variedad de planes para los jóvenes que yo no vi en nuestro país. No vivimos situaciones de violencia en los boliches y notamos que todos se manejan con mucha tranquilidad".
En cuanto a los precios, decidieron trasladarse con mucha comida desde Buenos Aires, temiendo que no les alcance el dinero para las compras diarias. "Nos cocinamos todos los días y solo una noche fuimos a comer a un restaurante. En las recorridas que hicimos por los supermercados y en la cuenta de la cena encontramos que los precios estaban iguales que en la costa argentina", sostuvo Agustina.
Para Cristian, de La Paternal, esa era su gran preocupación: "Es mi primera vez acá. Vine porque venían muchos amigos y me daba curiosidad. Siempre pasé las Fiestas en Buenos Aires y quizá me frenaba el tema del gasto, pero sentí que comer o salir de noche sale lo mismo que allá. A nosotros nos gusta la música electrónica y acá había muchas propuestas, eso atrae mucho".
"Terminé gastando la mitad de lo que había planeado. Paré en un hotel y casi todas las comidas fueron en la playa o en restaurantes. Nos salió lo mismo que si hubiésemos estado en un parador de Pinamar o Villa Gesell", agregó.
Durante los últimos días de diciembre y la primera semana de enero, la capacidad hotelera alcanzó casi el 100% de su totalidad. Desde el área de Turismo de la Intendencia de Maldonado estimaron que "hay un 20% más de turistas que el año pasado, y el 80% son argentinos".
"Muchos de los que venimos a Punta del Este lo hacemos por nuestros propios medios. Somos de clase media, trabajamos y estudiamos, por lo que tenemos en cuenta el lugar al que venimos. Yo antes vacacionaba en Mar del Plata, pero desde hace tres años me gusta más el estilo que propone este lugar. Es una sensación agradable estar acá", sostuvo Sofía, de 22 años, oriunda de Pilar.
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