Hace un año, la alarma por el virus zika que causó estragos en países como Brasil, se conocieron algunos casos en Argentina y se prendieron las alarmas para las mujeres embarazadas que, si son contagiadas durante la gestación, pueden tener bebés con microcefalia causado por zika congénito.
Ahora, la Coordinación de Epidemiología de Salta confirmó dos casos de microcefalia por fiebre zika en niños nacidos en las primeras semanas de octubre en la zona de Orán, al norte de la provincia, uno en la localidad de Dragones y otro en la ciudad de Tartagal.
De acuerdo con el parte oficial, las pacientes adquirieron el virus durante durante el brote del verano, oportunidad en que se les diagnosticó la enfermedad. Las muestras, estudiadas en el Laboratorio del Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas Doctor Julio Maiztegui de Pergamino, en la provincia de Buenos Aires, confirmaron la relación. De acuerdo con un informe del Ministerio de Salud de la Nación, en Salta hubo en lo que va del año 37 casos confirmados de fiebre zika, todos en las zona norte de la provincia.
Para prevenir el dengue, zika y chikungunya -transmitidos por el mosquito Aedes aegipty especialmente en meses de calor- el Ministerio de Salud Pública intensificó las actividades educativas y de promoción de la salud en los municipios de alto riesgo en la zona norte del país en los que ya se registraron temporales con intensas lluvias, que facilitan la reproducción de insectos.
Con el objetivo de frenar la propagación de los mosquitos, responsables de transmitir estas enfermedades, brigadas mixtas compuestas por agentes sanitarios de los hospitales de cabecera en cada localidad y agentes socioambientales de los municipios de Tartagal, Mosconi, Salvador Mazza, Aguaray, Embarcación, Colonia Santa Rosa, Urundel, Yrigoyen, Pichanal y Orán recorren los barrios y manzanas con mayor índice de larvas para instruir a las familias y colaborar con la limpieza de jardines y patios.
La microcefalia es un trastorno neurológico que provoca que la cabeza de bebés sea más pequeña de lo esperado por un desarrollo anormal del cerebro. Aunque puede tratarse, actualmente no tiene cura y sus consecuencias varían de acuerdo a la zona del cerebro que resulte más afectada.
El zika, al igual que el dengue y la chinkungunya es transmitida a través del mosquito Aedes aegipty y, por lo tanto, es primordial evitar su presencia y propagación. Con la eliminación y el control de los criaderos del mosquito disminuyen notablemente las posibilidades de que se transmitan.
Para esto evitar conservar agua estancada en recipientes que estén en exterior (como macetas, botellas, neumáticos, recipientes para mascotas, entre otros) para evitar que se conviertan en criaderos de mosquitos. También es importante evitar acumular basura y destapar los desagües. Utilizar mosquiteros en puertas y ventanas también contribuye a disminuir el contacto del mosquito con personas.
Para evitar la picadura también se recomienda cubrir la piel expuesta con ropa que cubra como camisas o remeras de manga larga, pantalones y sombreros. También es importante utilizar repelentes aprobados por las autoridades de salud y dormir en lugares que estén protegidos con mosquiteros.
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