Santiago Maldonado, el joven que fue visto por última vez cinco días atrás luego de un operativo de desalojo a la comunidad mapuche durante un corte en la ruta 40, camino a Esquel, las pericias señalan que podría tratarse de una desaparición forzada de persona realizada por miembros de la Gendarmería Nacional.
Los rastrillajes realizados con perros entrenados confirmarían los testimonios de la detención por parte de esa fuerza de seguridad de Maldonado, el 1 de agosto. Además, los abogados y familiares de Maldonado denunciaron irregularidades en los operativos emprendidos para averiguar los hechos. Tadavía nada se sabe del paradero del joven artesano de 28 años.
"Ahora mismo estamos haciendo las pericias sobre dos camionetas de la Gendarmería, una de ellas con la faja de seguridad rota, rodeados de gendarmes -dijo a Infobae el defensor oficial Fernando Machado-. Las pericias realizadas indican que ese 1 de agosto, Santiago Maldonado no salió del perímetro de la comunidad mapuche en la que se encontraba y confirmarían los testimonios de los miembros de esa comunidad que dicen que fue subido a alguna de estas camionetas de la Gendarmería".
Ese día, la Gendarmería -por orden del juez federal Guido Otranto- desalojó los cortes intermitentes que realizaba la comunidad mapuche Lof Cushamen, al norte de Chubut, en reclamo por la detención de su líder Fausto Jonas Huala, que tiene un pedido de extradición por la justicia chilena.
La fuerza de seguridad desbarató el corte de ruta intermitente -los mapuches detenían a los autos cada cierto tiempo para entregarles panfletos explicativos de su reclamo- e ingresó en la comunidad, ubicada en tierras cuyo título de propiedad pertenece al empresario Luciano Benetton pero que los mapuches reclaman como propias por su origen.
Allí se encontraba Santiago Maldonado, residente en El Bolsón, que visitaba la comunidad para interiorizarse de sus circunstancias, y que frente a la represión se vio paralizado, mientras los mapuches cruzaban a nado el río Chubut para escapar de la embestida de la fuerza de seguridad.
Testigos de la comunidad manifestaron que los mismos gendarmes indicaron que el joven había sido detenido y, luego de formar una fila de ocho oficiales para interferir la visualización de los hechos, fue subido a una camioneta de la fuerza que tomó la ruta hacia Esquel. Desde ese martes no se tienen noticias de su paradero.
Verónica Heredia, abogada de los familiares de Santiago Maldonado, afirmó que las pericias realizadas el sábado con perros adiestrados muestran que, con el rastro de una gorra encontrada del desaparecido, se infiere que se detuvo ante el río y que no salió del perímetro de la comunidad. De este modo se confirmaría el testimonio de los testigos mapuche que dicen que Maldonado habría sido subido a una camioneta de la Gendarmería.
"Los gendarmes que participaron del operativo ordenado por la justicia todavía no fueron indagados por la justicia, a pesar de ser sospechosos de haber cometido el crimen de la desaparición forzosa de Maldonado", dijo Heredia.
"Me parecería increíble que Santiago esté tantos días en algún lado encerrado, no entiendo para qué- apuntó Andrea, cuñada de Maldonado-. Esto es desesperante. De todas maneras, todo es irregular. La Gendarmería, que es sospechosa de haber realizado esa desaparición forzosa, no se retiró de la entrada a la comunidad donde se hizo el rastrillaje, lo cual puede ser interpretado como una situación intimidatoria para los miembros de la Prefectura que realizaban las pericias".
"Ni el gobierno nacional, que dirige la Gendarmería por medio de Patricia Bullrich, ni el gobierno provincial de Mario Das Neves se comunicaron con nosotros en ningún momento, ni para saber nuestra situación ni para ofrecer ninguna contención o garantía sobre el paradero de Santiago -agregó Sergio Maldonado, hermano de la persona presuntamente desaparecida.
"Los principales sospechosos de la desaparición forzada de Maldonado son los miembros de Gendarmería que participaron del operativo de desalojo, pero todavía no fueron ni siquiera indagados por el juez Otranto -dice a Infobae Verónica Heredia, abogada de la familia de Maldonado-. Se debería haber apartado a Gendarmería del lugar, pero el juez Otranto dijo que no podía hacerlo por orden del ministerio nacional de Seguridad de Patricia Bullrich. Pero la Gendarmería está vigilando las pericias sobre la posibilidad de un delito del que son los principales sospechosos. Es una actitud intimidante".
Infobae se comunicó con el juzgado federal de Esquel, a cargo del juez Otranto, pero advirtieron que no se realizaría un parte informativo hasta tener mayores precisiones sobre el caso.
"El operativo de represión en la comunidad Cushamen fue coordinado por el jefe de Gabinete del ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich, Pablo Nocetti, que viajó a Chubut al momento del desalojo de los mapuche", agregó Heredia. En declaraciones a Radio Nacional Esquel, Nocetti había expresado: "Que sepan que vamos a detener a todos los miembros de este grupo que genera caos y temor en la sociedad".
"Las camionetas que están siendo peritadas están lavadas y con las fajas de seguridad rotas -dijo a Infobae el defensor oficial Fernando Machado-. Pongo expectativas en que encontremos rastros en el levantamiento de olores más que en el de las huellas, ya que parecen haber sido limpiadas durante estos días. De todas maneras, la presencia de Gendarmería, que es sospechada de la desaparición forzada de Maldonado, a la hora de realizar estas pericias convierte a esto en algo, por lo menos, no neutral".
El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) pidió una acción urgente al Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas para que el Estado argentino tome de manera inmediata todas las medidas necesarias para buscar y localizar a Santiago Maldonado
Los familiares de Maldonado convocaron a una movilización al Congreso el lunes a las 17 para reclamar la aparición con vida de Santiago.