La muerte de dos jóvenes después de haber asistido a una fiesta electrónica en Arroyo Seco disparó la alarma nuevamente sobre el consumo de estupefacientes y drogas de diseño en la Argentina. De tal manera, el Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFyB) presentó un informe revelador en el que indicó que durante 2016, unas 170 mil personas compraron pastillas de éxtasis en todo el país.
"Cada vez más jóvenes se drogan y mueren con pastillas de diseño", expresó el documento de la organización.
Giuliana Maldován, la joven de 20 años que murió tras acudir a la fiesta producto de una hemorragia interna masiva, había sido una de las tantas jóvenes que había consumido esa droga en la fiesta del local Punta Stage, celebrada en la noche del domingo.
"El uso a largo plazo del éxtasis aumenta la temperatura corporal, deshidrata al punto de matar y produce hipertensión, confusión, irritabilidad, insomnio y depresión. También daña el corazón y el hígado", indicó el informe de SAFyB.
Se estima que en la actualidad, cada pastilla cuesta entre unos $200 y $500, de acuerdo con la magnitud de sus efectos. Y de acuerdo con numerosas investigaciones, se determinó que en la última década bajó considerablemente el promedio de edad de sus consumidores.
Según los últimos datos ofrecidos por la Sedronar, el uso de esa droga sintética en el país escaló de manera abrupta. Sólo en el período entre 2001 y 2011 se incrementó nada menos que un 1000% la cantidad de gente que la consume.
La tragedia de la fiesta Time Warp de Costa Salguero en abril de 2016, que dejó un saldo de cinco jóvenes muertos y casi una decena de heridos, disparó la primera alarma masiva sobre la presencia del éxtasis en la noche argentina.
"El uso del éxtasis creció tanto como el de la marihuana y mucho más que el de LSD y la cocaína", aseguró el director del SAFyB, Marcelo Peretta.
Entre los efectos principales y por lo cual la mayoría de los jóvenes acuden a esa droga sintética sobresale la ausencia de fatiga, de cansancio. "Los jóvenes bailan sin parar y sin notar o saber que eso tiene un precio", le dijo a Infobae la médica psiquiatra Geraldine Peronace.
En tanto, el informe del SAFyB completó: "El éxtasis contiene distintas cantidades de metilendioximetanfetamina (MDMA), que produce empatía, euforia, pérdida de timidez y vuelven a quien la toma extrovertido, alegre e hiperactivo".
Con sólo tomar dos pastillas de éxtasis en una misma noche se puede llegar a padecer síntomas de sobredosis. La sobreestimulación del sistema nervioso simpático provoca falta de hambre y así aparecen los síntomas de deshidratación. Como si fuera poco, el recurso de tomar mucha agua de golpe también podría complicar el panorama: esa ingesta de líquido tan rápida termina por diluir el sodio en la sangre y puede generar un cuadro de hiponatremia, que puede conducir a convulsiones, vómitos y hasta a un edema cerebral.
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