Se sabía que las paritarias iban a ser duras para la nueva gestión de Aerolíneas Argentinas y Austral. Luego de semanas de negociación en las cuales no se llegó a un acuerdo, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) informó que se venció la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y que comenzaron un paro desde las 20 del jueves hasta las 12 de hoy.
En el Aeropuerto Internacional de Ezeiza hay ocho arribos y 16 partidas cancelados. En tanto, en el Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery la situación es mucho peor y la postal que una vez más se repite: cientos de personas haciendo cola en los mostradores mientras esperan una respuesta de la empresa. En esa terminal aérea se registran más de 120 vuelos afectados, entre arribos y partidas.
"Durante meses hemos actuado con una enorme responsabilidad buscando una respuesta a nuestros reclamos en la mesa de diálogo para recomponer los ingresos de los pilotos del sector que contemple la inflación registrada desde la firma de la última paritaria en septiembre de 2015. Sin embargo, una y otra vez, la compañía ha mantenido una inusual intransigencia que imposibilita cualquier tipo de avances hacia un entendimiento entre las partes", expresó APLA en un comunicado.
En el mismo escrito, apuntan contra la actitud de la empresa liderada por Isela Costantini: "Día a día, vemos cómo se deterioran nuestros ingresos ante una realidad indiscutible y que los propios funcionarios y la empresa han reconocido públicamente. Pero lejos de buscar una solución, los directivos de Aerolíneas Argentinas eligieron desoír nuestras reivindicaciones traspasando cualquier límite en las negociaciones".
La Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA), que agrupa a los pilotos de Austral, también se sumó a la medida: "Estamos convencidos de que la defensa de la fuente laboral de los pilotos no admite ningún tipo de dudas ni vacilaciones. Vemos que la liberalización de la actividad, las políticas de cielos abiertos y banderas de conveniencia, la libre migración de matrículas y licencias, degrada y pone en riesgo todas las conquistas y condiciones laborales de los trabajadores, así como expone a los pasajeros por la consecuente afectación de la seguridad que este estilo de liberalización propone", afirmó el secretario general, Alejandro Botana.
Desde UALA explicaron a Infobae que se tomó la decisión luego de un único encuentro con la gerencia de recursos humanos de la empresa, donde ofrecieron un 27% de aumento, el cual fue rechazado. Los pilotos buscan al menos un 40% para "recuperar la pérdida del salario que se produjo desde diciembre y para recomponer hacia futuro".
"Esperamos que la empresa nos llame en tiempo acorde, en 10 días se vence la paritaria y ya entraríamos en acuerdo vencido. Durante los últimos meses, desde diciembre, el salto inflacionario fue significativo. Para adelante no hay clara proyección de los índices inflacionarios", expresó a este medio Genaro Trucco, secretario adjunto de UALA.
Pablo Biró, secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, dijo en diálogo con el periodista Reynaldo Sietecase en Vorterix Rock que "la empresa los obligó a esa situación" y que "la patronal obró de mala fe". "Somos tan víctimas como los pasajeros, pero nos hacen ver como victimarios. El paro no es sorpresivo, el conflicto comenzó en septiembre", agregó. "Si hay gente hoy en el aeropuerto es porque las empresas no quisieron anunciar que no fueran. A 24 horas del paro los medios hablaban del vestido azul de Isela Costantini en el mini Davos", expresó.